Bayonetta
Después de sorprendernos con Madworld, Platinum Games y Sega vuelven a la carga con Bayonetta, un juego de acción protagonizado por una bruja muy especial. Tras probar durante sus tres primeras horas, sólo podemos elogiar este verdadero espectáculo audiovisual y jugable.
Es difícil describir Bayonetta con palabras. Por mucho que se pueda decir, intentar contar, o presentar todas sus virtudes, no es hasta que se juega y se ve en directo toda su espectacularidad que uno llega a ser consciente del excelente título que es, a todos los niveles. Una clara muestra de que el espíritu que hizo grande y carismático al estudio Clover se mantiene intacto en Platinum Games, y que Sega acertó de lleno apostando por el nuevo estudio. No en vano, llevan dos juegos creados y ambos son de una calidad que no admite discusión; Madworld hizo las delicias de los usuarios de Wii con un juego gamberro, desenfadado, cargado de humos y con una gran jugabilidad que lo convertían en un juego único en su especie, sobre todo en la máquina de Nintendo.
Bayonetta no le va a la zaga a la aventura de Jack. Es más, potencia prácticamente todas sus virtudes de cara a crear un título que consigue hacerse un hueco entre los mejores del género. A la batuta de este espectacular juego, Hideki Kamiya; tal vez haya a quien no le suene este nombre, pero en su etapa en Capcom fue el director o el diseñador de títulos como Resident Evil, Resident Evil 2, Devil May Cry, Resident Evil 0, la franquicia Viewtiful Joe, y Okami (además de trabajos de doblaje como Godot en el tercer Phoenix Wright). No cabe duda de que se trata de un hombre capaz de crear arte, buen conocedor de todos los géneros en los que se desenvuelve, que entiende a la perfección lo que sus creaciones le piden de cara a pulirlas y ofrecernos la mejor versión posible de su idea original. Y con Bayonetta nos ha vuelto a sorprender, con uno de los grandes para los próximos meses, que gracias a Sega ya hemos podido disfrutar durante sus tres primeras horas de juego en la versión para Xbox 360.
Durante los primeros compases de juego, obviamente, vivimos inmersos en un mar de dudas, ya que se nos van sucediendo distintos flashbacks y conocemos a nuevos personajes que dotan de una profundidad cada vez mayor al argumento y gracias a los cuales todo va cobrando sentido. La historia básica nos sitúa en Vigrid, una ciudad ficticia de Europa, donde Bayonetta se dedica a acabar con ángeles y otras criaturas celestiales a cambio de jugosas recompensas. Estamos en un mundo en el que el infierno, el cielo y el purgatorio conviven en un enfrentamiento casi constante, y nuestra bruja protagonistas está justo en medio de todo ello, eliminando a las criaturas celestiales para cobrar las recompensas que se pagan por sus halos.
Pero la cosa no es tan sencilla como parece a priori, ya que desde la propia introducción vemos cómo Bayonetta parece haber pertenecido a una antigua orden, y cómo tiene una rival, Jeanne, a la que se enfrentó constantemente a lo largo de los siglos que tiene de vida. Bayonetta estuvo inmersa en un sueño durante 500 años bajo un lago, y desde que se despertó carece de recuerdos, por lo que pese a sonarle la cara de esa rival a la que se encuentra constantemente, no sabe de qué, igual que actúa por propia conveniencia, incapaz de recordar su pasado. Otros personajes son Rodin, el dueño de la tienda The Gates of Hell (donde compraremos armas y objetos), Enzo (un hombre extraño que acompaña a Bayonetta) y Luka (quien odia a Bayonetta desde que era un crío porque la vio matar a su padre).
Como es bien sabido, Bayonetta lleva dos armas de fuego en los tacones de sus botas y otras dos en las manos. Así dicho, recordamos cuando se anunció el juego, que ese concepto parecía extraño y poco coherente; a día de hoy se antoja la mejor idea para un título de estas características. No obstante, no serán las únicas bazas de Bayonetta, ya que no en vano es una bruja. Durante las tres primeras horas de juego pudimos ver también su habilidad para el combate cuerpo a cuerpo, con elaborados y numerosos combos. Hay dos botones para ataque cuerpo a cuerpo, mientras que uno sólo para disparar las pistolas, pero con combinaciones de botones se puede disparar a la vez que se golpea. La variedad de combos es abrumadora, con toda posible combinación que se nos ocurra con hasta cinco botones por vez.
Entre combos, apenas hay pausa o tiempo para reaccionar, si somos capaces de comprender qué movimientos son capaces de encadenarse de forma fluida; de hecho, el contador de combo del juego nos irá premiando si lo conseguimos. Las combinaciones de ataques son muy numerosas, como decimos, y al gran abanico de movimientos por tierra se le añade la misma gama en el aire. Bayonetta puede realizar un doble salto (e incluso flotar un rato en el aire, sacando durante breves instantes unas alas de mariposa) y atacar a las criaturas desde el aire. Cuando creíamos que estábamos empezando a comprender todas las posibilidades de ataque y movimiento del personaje, conseguimos un nuevo arma, la katana, que añade un nuevo grado de profundidad a todo el abanico de movimiento, sustituyendo los golpes cuerpo a cuerpo por nuevas acciones que se realizan igual, pero tienen un efecto muy diferente; por ejemplo, tenemos hasta dos puntos de carga de ataque con espada, al igual que Ryu Hayabusa en ninja Gaiden, pero con la posiblidad de hacerlos en tierra (horizontal) o en el aire (vertical).
Al ir eliminando enemigos, se irá cargando el medidor de magia. Este servirá para que, cuando tengamos abundante en reserva, podamos realizar un ataque de tortura a los enemigos. Pulsando los dos botones de ataque, Bayonetta invoca una dama de hierro o una guillotina, por poner un par de ejemplos, con los que tortura y aniquila a los enemigos; cada tortura es distinta según a la criatura a la que se la apliquemos. Destaca especialmente el botón de esquiva, el gatillo derecho, ya que si lo hacemos en el último instante antes de recibir el golpe, se activa el tiempo brujo, un lapso corto en el que el tiempo se para y tendremos tiempo para atacar sin oposición. Eso sí, deberemos hacerlo realmente en el último suspiro, por lo que es una táctica arriesgada, y no es recomendable depender siempre de esta táctica (aunque es muy útil contra jefes finales).
Si la luna está en la fase adecuada, Bayonetta también puede correr por las paredes del escenario, y no faltan los abundantes puzzles en los que deberemos ralentizar el tiempo para poder caminar sobre el agua, o utilizar antiguos artefactos para poder retroceder en el tiempo y recuperar estructuras que se habían destruido. Además, Bayonetta podrá recoger objetos para crear sus propias pociones desde el menú de pausa, o bien adquirir esos recuperadores de vida y potenciadores de ataque en la tienda de Rodin. También contará con distintos tipos de pistolas para equipar, y su pelo jugará un papel clave en los combos más potentes, dejando a nuestra chica desnuda mientras puños y tacones gigantescos de pelo aniquilan a los rivales.
A todo esto hay que sumarle un curioso minijuegos entre capítulos, en el que deberemos disparar a los ángeles que aparecen con un número limitado de balas; como si de una barraca de feria se tratase, deberemos sumar puntos con nuestros disparos para luego intercambiarlos por objetos o por halos de ángel (la moneda del infierno). El juego está estructurado por capítulos, y al final de cada uno se nos dará una puntuación; el uso de objetos o continuaciones se penaliza mucho, así como el daño que recibamos durante la partida, incitándonos en todo momento a intentar conseguir la partida perfecta. En estas tres horas de juego hemos podido completar cuatro capítulos de la casi veintena que componen el juego, por lo que hablamos de una duración entre 10 y 12 horas, muy satisfactoria y muy, muy rejugable.
Abundantes combos, variedad de armas y objetos, golpes mágicos de tortura y finales, muchos secretos por descubrir, puzzles por resolver, armas que podremos recoger de los ángeles para usarlas contra ellos (con un nuevo abanico de movimientos y ataques propios) Es difícil saber qué le falta a la nueva obra de Platinum Games y Sega, porque parece tenerlo todo. Pero por mucho que digamos, todo esto tiene sentido al verlo en acción, en movimiento, y con el mando en la mano; cuando Bayonetta y su magia se convierte en una extensión de nuestro propio cuerpo y nos convertimos en parte del espectáculo presente en pantalla. La cuesta de enero se antoja más divertida que nunca: el día 8 de ese mes, Bayonetta llega a nuestro país.
- Acción
Bayonetta es un título de acción en tercera persona a cargo de Platinum Games, creadores del Devil May Cry original, y Sega para PlayStation 3, Xbox 360, PC, Wii U y Nintendo Switch que nos pondrá en el papel de una bruja que podrá disparar tanto con las manos como con unas pistolas atadas a sus tobillos.