Metro 2033

Un ambiente post-apocalíptico después de una guerra devastadora que ha dejado medio mundo sumergido en escombros. En la capital de Rusia, Moscú, los supervivientes han sabido adaptarse al nuevo mundo refugiándose bajo tierra en las redes de metro, donde se ha creado una nueva civilización que ha dejado atrás la ciudad fantasma en la que se había convertido la capital rusa. Esto es, a grandes rasgos, lo que narra el libro Metro 2033 del escritor Dimitri Glukhovsky. Libro en el que se inspira el videojuego de mismo nombre que está previsto para PC  y Xbox 360.

La historia de este best-seller narra las aventuras de Artyom, un joven  que abandona la estación de metro donde ha vivido hasta el momento para proteger a la red entera de contra una amenaza que acecha. La propuesta, a simple vista, tiene ciertas similitudes con Fallout 3, ya que sus padres han desaparecido y el protagonista tiene el interés por salir y conocer qué hay más allá de lo que conocemos como el Palacio subterráneo, en referencia a la espectacular construcción arquitectónica que supone el metro de la capital rusa. A pesar de las similitudes con la obra de Bethesda, desde los desarrolladores se ha querido marcar las diferencias entre uno y otro juego, ya que en el caso de Metro 2033 la situación post-nuclear de la aventura es tan sólo unos veinte años después de la gran devastación, por lo que los habitantes de este universo todavía no están del todo adaptados al nuevo mundo, con lo que esto conllevará a nivel de necesidades vitales y de actitudes en según que situaciones.

4A Studio ha cogido esta historia, que ha vendido más de un millón de ejemplares en todo el mundo, para hacer su oportuna adaptación al mundo de los videojuegos. La aventura de Artyom empezará con un Flashfoward. El protagonista estará librando una gran batalla final con los mutantes enemigos Dark Ones, la amenaza para la civilización que hay bajo las cenizas de Moscú. Este frenético inicio devolverá al protagonista al principio de la aventura para saber y conocer cómo se ha llegado a ese gran final.

Este shooter en primera persona tiene previsto dar distintas opciones jugables a los jugadores. Por eso, se podrán librar batallas cara a cara o intentar ser lo más sigiloso posible. De eso se beneficiará el entorno en el que transcurre la trama, lleno de zonas oscuras y momentos para ser una sombra de los enemigos. Faltará ver la implementación de este modo sigiloso en el transcurso de la acción y si realmente supone una variedad palpable a nivel de jugabilidad respecto los momentos de frenética acción.

Muchas veces no se actuará con sigilo por gusto si no por pura necesidad. Escasea la munición en el metro de Moscú. Además, las armas que podamos encontrar en el interior de estos túneles no son de demasiada calidad, por lo que tener según que arsenal no es garantía de nada debido a su propensión a romperse. La sensación de escasez provoca, de paso, que sea necesario tener dinero a mano para lo que pueda ser. Y las armas modernas que se puedan encontrar fuera del metro, con esa munición tan preciada en los túneles, son ideales para conseguir oro.

De momento, Metro 2033 se basa en una historia y un universo interesante. Y en muchas promesas. Entre ellas, la de tener una IA para gozar de combates intensos y reales. Enemigos que se cubran, que flanqueen nuestra posición, que no se la jueguen si están solos o que varíen su comportamiento según se desarrolle la batalla.  En este sentido, no actuarán igual algunos humanos enemigos que los mutantes. A esto se le añaden algunos minijuegos que amenizarán, junto a las relaciones con los NPC y sus tareas secundarias, la acción a través del Metro y los escombros de Moscú.