BlazBlue: Calamity Trigger
Blaz Blue: Calamity Trigger, la última y más perfecta creación de Arc System Works, genio y figura en todo lo referente a la lucha bidimensional, ha irrumpido en los mercados estadounidense y nipón para convertirse en un clásico instantáneo. Desgranamos todas y cada una de sus virtudes en el presente avance.
Blaz Blue: Calamity Trigger, la última y más perfecta creación de Arc System Works, genio y figura en todo lo referente a la lucha bidimensional, ha irrumpido en los mercados estadounidense y nipón para convertirse en un clásico instantáneo. Desgranamos todas y cada una de sus virtudes en el presente avance.
El género de la lucha versus sigue demostrando poseer en la actualidad casi tanta salud como en su época dorada, cuando reinó sin oposición en los salones recreativos y consolas domésticas durante la década de los 90. Capcom (Tatsunoko Vs. Capcom, Street Fighter IV), SNK (The King of Fighters XII), Namco (Soul Calibur IV, Tekken 6) Las compañías que durante dicha época nos brindaron los mejores títulos de lucha son también las que ahora nos hacen gozar con juegos que los fanáticos del combo y el Hadoken no pueden dejar pasar. Arc System Works, grande entre los míticos estudios expertos en el género de las tortas, también se ha sumado a la fiesta. Así, después de su notable Battle Fantasia, título con el que se buscaba obtener el beneplácito de jugadores tanto expertos como ocasionales, la compañía nipona pone ahora toda la carne en el asador para dar a luz su mejor título jamás lanzado.
Teniendo en cuenta que hablamos de la desarrolladora que ha dado a luz clásicos indiscutibles como Fist of the North Star, Sengoku Basara X, Dragon Ball Z: Supersonic Warriors 1 & 2 o la excelsa saga Guilty Gear, asegurar que su última creación es su mayor obra lanzada hasta la fecha es sin duda hablar de palabras mayores. Pero hay que rendirse a la evidencia; BlazBlue: Calamity Trigger supera ampliamente a todo lo que Arc System Works ha mostrado anteriormente. Su apartado visual ofrece la más perfecta fusión entre elementos 2D y 3D jamás vista, dando como resultado un despliegue gráfico espectacular y colorido. En lo referente a mecánica y jugabilidad, Arc System ha dejado a un lado los experimentos y las carencias voluntarias vistas en Battle Fantasia, para pasar a evolucionar y perfeccionar sus más excelsas creaciones anteriores. Todo esto, y mucho más, es lo que convierte a BlazBlue en lo mejor de una de las mejores.
Vaya por delante que el juego que nos ocupa no tiene nada que ver con la saga Guilty Gear. La razón es sencilla: Arc System Works se ha independizado de Sega/Sammy, por lo que la licencia GG ha dejado de estar en sus manos. Sin embargo, y como reza el dicho, no hay mal que por bien no venga, ya que el estudio se ha esforzado al máximo para conseguir que su nueva creación conserve todas las señas de identidad que hicieron grande a Guilty Gear, ubicando dichas características bajo un nuevo trasfondo que ya desde este primer BlazBlue se antoja excepcional. Tras lanzar el juego en los salones recreativos japoneses el 19 de noviembre de 2008, los genios de Arc System han volcado todo su buen saber hacer para ofrecer unas conversiones domésticas simplemente magistrales, repletas de extras y añadidos por los cuatro costados.
Así, el juego se encuentra disponible en versiones destinadas a PS3 y Xbox 360 desde el 25 de junio en Japón, 30 del mismo mes en tierras norteamericanas. La prensa especializada de ambos mercados se ha rendido a los pies de BlazBlue, otorgándole puntuaciones altísimas que dan como resultado unos impresionantes 89 % de media en GameStats y 91 % en Metacritic. Sin duda os estaréis preguntando cuándo llegaremos a catar tan apetitoso juego en Europa. La respuesta, por desgracia, es aún una incógnita. La encargada de distribuir en el viejo continente los últimos juegos lanzados por Arc System Works es 505 games, compañía que no destaca precisamente por su celeridad a la hora de traer dichos títulos a tierras europeas. Buena prueba de ello es que, tras Battle Fantasia, el próximo juego de Arc System en ser distribuido por 505 Games es Guilty Gear 2: Oberture (última entrega de la franquicia, exclusiva de Xbox 360, que cambia por completo de mecánica y planteamiento, pasando de las dos dimensiones a los polígonos y de la lucha versus al beat 'em up masivo estilo Dynasty Warriors), el cual nos llegará el próximo 4 de septiembre, nada más y nada menos que dos años después de ser lanzado en tierras niponas.
Esperemos que, tras la llegada de dicho título, 505 Games se ponga las pilas y trabaje a conciencia para que al menos podamos disfrutar de BlazBlue antes de que acabe el año. La cruda realidad es que aún no existe fecha de lanzamiento europeo para el juego que nos ocupa, al menos oficial. Alguna tienda online británica lo fecha para el 30 de octubre del presente año, aunque la experiencia nos dice que los datos únicamente provenientes de dichas fuentes siempre hay que cogerlos con pinzas, más aún cuando otras tiendas online más afamadas, como amazon uk, ni siquiera lo tienen listado. En fin, mientras aguardamos la llegada de BlazBlue a estas tierras, nada mejor que ofreceros un segundo avance en el que desgranaremos todas las virtudes de un título llamado desde ya a convertirse en un clásico imperecedero de la lucha bidimensional. La rueda del destino sigue girando
Hori, toda una institución en Japón en lo referente a periféricos, ha aprovechado la salida de BlazBlue para lanzar un arcade stick engalanado con motivos del juego, el cual posee el fenomenal acabado al que la compañía nos tiene acostumbrados.
El arte de la lucha
Las versiones domésticas de BlazBlue: Calamity Trigger demuestran el mimo y cuidado que Arc System Works ha volcado en la conversión, sumando a la experiencia original de recreativas una serie de extras que convierten al juego en un bocado de lo más apetitoso. No existen luchadores nuevos respecto al original, aunque los dos jefes finales se encuentran seleccionables desde un principio, dando como resultado una plantilla de 12 personajes. Puede parecer corta, y de hecho lo es, aunque hay que tener en cuenta que nos encontramos ante el primer juego de lo que a buen seguro será una longeva franquicia, por lo que a partir de aquí sólo queda sumar. Eso sí, Arc System Works ha construido cada personaje con la maestría que le caracteriza, alejándolos de los arquetipos que suelen verse en otros juegos del género (y es que, ¿en qué otro título de lucha se ha visto a un ninja que lleva atado a la espalda un clavo gigante en lugar de una espada?), al tiempo que los ha dotado de personalidades, técnicas, movimientos especiales e incluso mecánicas que hacen a cada luchador ser completamente distinto del resto.
En BlazBlue, cada personaje es un mundo, lo que sin duda alarga la vida útil del juego. Se nota que Arc System ha preferido trabajar a conciencia una plantilla corta, antes que ofrecer un listado más extenso de personajes en un título con poca sustancia en lo referente a modos de juego (algo que desgraciadamente ha acabado pasándole a The King of Fighters XII, el otro gran deseado de la lucha 2D, aunque de ello ya hablaremos en su correspondiente análisis). Arc System es perfectamente consciente de que este primer BlazBlue debe ser el pilar sobre el que erigir la que está llamada a convertirse en su licencia más afamada y exitosa, por lo que no ha querido dejar nada al azar. La legión de aficionados a la franquicia Guilty Gear encontrarán en BB un juego de lo más familiar, que podría pasar perfectamente por la tercera entrega numerada de dicha saga, a pesar de que en cuanto a argumento y personajes sea totalmente distinta... O quizá no lo sea tanto; de hecho, algunos personajes de BlazBlue recuerdan poderosamente a varios luchadores de Guilty Gear tanto por su diseño como por las técnicas de las que hacen gala. Tal es el caso de Ragna (una suerte de Sol-Badguy, más radicalizado incluso), Jin (la viva imagen de Ky Kiske), Iron Tager (primo hermano de Potemkin) o Arakune (tan oscuro y moldeable como Eddie).
Esta familiaridad respecto a lo visto en la saga Guilty Gear (franquicia que mucho nos tememos caerá en el olvido tras quedar huérfana de desarrollador) se traslada también a la mecánica de BlazBlue. El juego que nos ocupa presta atención especial al combate en las alturas, con saltos largos y dobles, juggles, proyecciones aéreas y similares, diferenciándolo por lo tanto de lo visto en un Street Fighter al uso. BB cuenta con un sistema de cuatro botones de ataque, siendo los tres primeros destinados a los golpes débiles, medios y fuertes, mientras el último es el denominado Drive, el cual desencadena un ataque especial característico de cada personaje. En general, el presente sistema recuerda poderosamente al del reciente Tatsunoko Vs. Capcom, dado que al pulsar distintas direcciones en la palanca de control se activarán ataques diferentes, a pesar de que nos encontremos presionando el mismo botón. Esto, unido a la posibilidad de enlazar golpes pulsando los botones en orden de menor a mayor intensidad, permite una mayor accesibilidad a la hora de encadenar combos, lo que sin duda agradecerán aquellos usuarios que no se encuentren demasiado versados en el género de la lucha.
Para ellos también está pensada la denominada Easy Special Option, que recuerda bastante a lo visto en la Easy Operation incluida en las versiones Xbox y GameCube del legendario Capcom Vs. SNK 2, ya que nos dará la posibilidad de ejecutar una cadena de comandos pulsando un único botón. De todas maneras, los fans más acérrimos del género no tienen que temer que el juego se haya simplificado para hacerlo más accesible de cara al público ocasional. BlazBlue es un título 100 % hardcore, poseedor de una profundidad que a buen seguro será exprimida a conciencia por los expertos en la lucha versus.
Así, aparte del sistema de control básico que acabamos de mencionar, contamos con la posibilidad de ejecutar técnicas especiales tales como el denominado Barrier (pulsando hacia atrás en la palanca de control más los botones A y B, lo que nos ofrecerá una protección más efectiva que la estándar) o el llamado Rapid Cancel. Esta última técnica, bastante familiar para los aficionados a la saga GG (en dicha franquicia se denominaba Roman Cancel), permite cancelar cualquier ataque en curso tras pulsar simultáneamente los botones A, B y C, permitiéndonos coger al rival desprevenido si somos lo suficientemente rápidos; eso sí, dicha técnica consumirá una parte de nuestra Heat Gauge, por lo que deberemos moderar su uso.
La poción energética, un ejemplo del merchandising generado por BlazBlue tras su lanzamiento.
La Heat Gauge en sí no es otra cosa que la denominación que recibe en BlazBlue la clásica barra de energía, independiente de la de salud, que permite a cada personaje desencadenar sus técnicas más mortíferas, las cuales a su vez reciben el nombre de Distortion Drives. Sin embargo, los movimientos especiales más espectaculares de BB son los denominados Astral Finishers, una suerte de Fatalities que nos darán la posibilidad de rematar a nuestro oponente con sangriento y sobrecogedor estilo. Para activar un Astral Finisher debemos contar con una Heat Gauge completamente llena, encontrarnos en el último asalto del combate, y asegurarnos que la barra de salud de nuestro rival se encuentra a menos del 20 % de su capacidad. Exigentes requisitos, pero creednos cuanto aseguramos que el resultado merece la pena. Por poner un ejemplo, el Astral Finisher de Ragna le permitirá transformar su espada en una guadaña, con la que despedazará a su adversario hasta que, como golpe de gracia, acabe generando un agujero negro que enviará a dicho rival al olvido.
Para acabar con los sistemas de juego, sólo nos queda apuntar que los personajes de BlazBlue cuentan, además de con sus golpes y técnicas personalizadas, con mecánicas individuales que los diferencian aún más entre sí. Por poner un par de ejemplos, Carl lucha junto a una marioneta, la cual también podremos controlar de manera simultánea junto al personaje principal; así mismo, la vampira Rachel cuenta con una barra independiente de las de salud y energía, usada para controlar su poder sobre el viento.
Una conversión plagada de extras
Tal y como apuntamos anteriormente, Arc System Works ha puesto toda la carne en el asador para ofrecer unas versiones domésticas que poseen jugosas y cuantiosas novedades respecto a la recreativa original. De entrada, en el mercado estadounidense se ha puesto a la venta una única edición del juego, la especial, que se encontrará disponible hasta fin de existencias, siendo entonces sustituida por la edición normal. Dicho pack incluye la banda sonora, obra del gran Daisuke Ishiwatari, compuesta por 2 CDs que ofrecen un total de 113 minutos de música divididos en 42 cortes, además de un DVD (Blu-Ray en la versión PS3) a modo de profundo tutorial del juego, ideal tanto para novatos como expertos y creado por integrantes de dustloop.com y shoryuken.com, afamadas webs especializadas en el género de la lucha versus. Huelga decir que, para cuando 505 Games se digne en traer BlazBlue al viejo continente, dicha edición especial brillará por su más completa ausencia, y es que 'Europe is different' también en este sentido.
Ya entrando en el juego en sí, el añadido más interesante de BlazBlue es sin duda un más que completo modo historia, en el que Arc System Works vuelve a demostrar su maestría a la hora de crear argumentos complejos y profundos (para lo que es habitual en un juego del género, se entiende), en los que todos los personajes tienen una igual importancia en el devenir de los acontecimientos. En definitiva, algo a años luz de lo ofrecido en la actualidad por Capcom y SNK Playmore en sus títulos de lucha; y es que los guiones elaborados por Arc System pueden vanagloriarse de estar a la altura de los hilos argumentales que la antigua y añorada SNK incluía en sus juegos, al tiempo que son capaces de destilar esencia manganime por los cuatro costados. Además de un argumento independiente para cada personaje, el modo historia de BlazBlue ofrece diferentes rutas alternativas a lo largo de su recorrido (idea que Arc System ha tomado de Battle Fantasia), las cuales desembocarán en distintos finales. Así, para conocer todos los entresijos del argumento, se nos invitará a terminar el modo historia con los 12 personajes en hasta 3 ocasiones, lo que nos brindará unas 30 horas de juego, nada mal teniendo en cuenta el género en el que BB se encuentra encuadrado.
El clásico Arcade (que ofrecerá acción directa, obviando el argumento y los diálogos entre personajes, tal y como sucede en la recreativa original) y el denominado Score Attack (para luchar con el objetivo de batir records de puntuación) son los restantes modos monojugador del título. Por supuesto, BlazBlue incluye también soporte online, mediante el que hasta 6 personas podrán reunirse en un mismo grupo con el objetivo de disputar intensos combates, con la posibilidad de que los 4 usuarios que aún esperen su turno para luchar puedan ver la refriega en curso. Además, es posible guardar repeticiones de dichas partidas, las cuales podrán ser posteriormente visualizadas en el llamado Replay Theater. Dichos vídeos ofrecen la posibilidad de seleccionar entre diferentes velocidades, incluida una que prácticamente se desarrolla frame a frame, siendo por lo tanto ideal para desgranar y estudiar punto por punto las estrategias empleadas. Para redondear los extras de las versiones domésticas de BlazBlue, Arc System ha incluido versiones alternativas de unos cuantos luchadores, denominadas Unlimited y similares en su concepto a las Gold y Black de la saga Guilty Gear. Ya por último, la compañía nipona ha decidido incluir una intro al más puro estilo anime, elaborada por el estudio de animación Gonzo (Afro Samurai, Transformers: Cybertron).
La edición limitada de BlazBlue, compuesta por el juego, un tutorial en vídeo y la banda sonora dividida en dos CDs.
Apartado audiovisual
Arc System Works puede vanagloriarse de ser el único estudio que durante toda la pasada generación elaboró los sprites de sus juegos a 480p, mientras sus principales rivales seguían arrastrando resoluciones provenientes de la era 16 bits. Y es que, cansados de comprobar cómo los juegos de lucha de Capcom en 32 y 128 bits mantenían la resolución de su placa recreativa CPS2, y los de SNK la de su añeja Neo-Geo, resultaba todo un placer encontrarse con el despliegue gráfico del que hacían gala títulos como Guilty Gear X o Hokuto no Ken. Pues bien, Arc System Works continua con BlazBlue la tónica de adaptarse a los tiempos que corren, ofreciendo unos sprites a 720p que pueden vanagloriarse, tras confirmarse que los personajes de KOF XII no llegarán a tanto, en ser los únicos en alta definición existentes en el mercado junto a los del remake de Super Street Fighter II Turbo.
Aunque en cuanto a puesta en escena, tamaño y, sobre todo, número de frames de animación no puedan competir con los personajes de KOF XII, los sprites de BlazBlue poseen ese toque personal y marcado carisma que Arc System sabe dar a todas sus creaciones. Eso sí, lo que convierte al apartado visual de BlazBlue en toda una delicia para la vista son sin duda los escenarios 3D, construidos con una maestría tal que se fusionan con los sprites y demás elementos bidimensionales existentes en cada decorado de una manera jamás vista hasta ahora, todo gracias al uso de un colorido excepcional en el texturizado y la inclusión de puntuales retazos 2D. La prueba irrefutable de dicha fusión es que, observando BlazBlue en pantallas estáticas, a uno le da la sensación de que los escenarios han sido elaborados en dos dimensiones, al igual que los sprites. En definitiva, y si dejamos a un lado los sprites de KOF XII (que a pesar de mostrarse a baja resolución no dejan de quitar el aliento), sin duda podemos asegurar que el apartado gráfico de BlazBlue no tiene parangón en su género.
En lo referente a la banda sonora, aquí sí que no hay color. Tras la desaparición de la añorada Neo Sound Orchestra por parte de SNK, y corroborar con SFIV que el talento musical abandonó a los compositores de Capcom tras el lanzamiento de Street Fighter Alpha 2, el inefable Daisuke Ishiwatari queda como el último gran maestro compositor en lo que a BSOs de juegos de lucha se refiere. Las composiciones de BlazBlue, creadas tomando como inspiración a luchadores en lugar de escenarios (el gran secreto que permitió a SNK y Capcom crear históricas BSOs durante la década de los 90; secreto que en la actualidad parecen haber olvidado), son tan aceleradas y excepcionales como en cada una de las entregas de la saga Guilty Gear. Ishiwatari ha creado así mismo varios cortes exclusivos que sólo se escucharán en determinados enfrentamientos, como el de Ragna Vs. Jin o el de Litchi contra Arakune. En definitiva, un fenomenal despliegue de guitarras eléctricas, coros (ojo -o más bien oído- a la melodía creada para v-13), percusión e instrumentos orquestales que contribuyen en buena medida a aumentar la intensidad de los combates. En lo que al audio se refiere, la versión estadounidense de BlazBlue permite seleccionar entre los doblajes japonés o inglés, a gusto del consumidor.
El nuevo rey de la lucha
BlazBlue: Calamity Trigger es un título sin fisura alguna. Jugabilidad, gráficos, música, sonido, modos de juego Todas las piezas que componen la nueva creación de Arc System Works han recibido el mismo tratamiento por parte de la compañía nipona, dando como resultado un título que se convierte en un auténtico regalo para los aficionados al género de la lucha versus. Desgraciadamente, todo parece apuntar a que los usuarios europeos aún tendremos que esperar bastante hasta que el juego llegue al viejo continente, a pesar de que se encuentra disponible en Japón y Estados Unidos desde finales del mes pasado. Esperemos que 505 Games, los distribuidores de Arc System Works por estas tierras, se pongan al fin las pilas y no tarden en poner a nuestro alcance este auténtico clásico instantáneo, que incluso podría llegar a ser digno de contarse entre los diez mejores juegos de lucha de todos los tiempos.
- Acción
