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Demigod

Demigod

Dominación divina

¿Te enfrentarás al resto de semidioses con tal de defender tu posición en el reino celestial? Si la respuesta es afirmativa, lo nuevo de Gas Powered Games es el título que estabas esperando. Una genial mezcla de acción y rol dotada de un ritmo frenético y demoledor.

Gas Powered Games y Stardock nos traen Demigod, un videojuego que nos transportará a un mundo inspirado en la mitología griega más clásica, mezclando hábilmente estrategia y rol. El argumento nos pondrá en la piel de un semidios que ansía la divinidad. El Padre de Todos ha estirado la pata y los más poderosos titanes del planeta han sido llamados para ocupar su puesto en el Olimpo.

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Los responsables del título que hoy analizamos tiene en su haber algún que otro juego de renombre, como la saga Dungeon Siege o la de Supremme Commander. Sin embargo, a pesar del gran éxito cosechado en el pasado, Gas Powered Games ha comenzado a flojear en calidad, como demuestran los resultados de sus últimos lanzamientos, y como pudimos apreciar con Space Siege. ¿Confían en los semidioses para volver a situar esta empresa entre una de las grandes de la estrategia y el rol?

Como todo juego, el comienzo se debe a una idea, que muchas veces procede de alguna novela, película, serie animada o, aunque pueda parecer mentira, de otros juegos. En el caso de Demigod, fue un título de Blizzard, o más concretamente un escenario disponible para Warcraft III: Frozen Throne. Hablamos de ‘Defense of the Ancients', un mapa creado para este título y altamente conocido entre de la comunidad de seguidores del mundo de Azeroth. Por cierto, este a su vez se basaba en otro mapa, pero de Starcraft.

Durante la partida encarnaremos a uno de los ocho semidioses disponibles, cada uno de ellos dotado con sus propias características y habilidades. Con la ayuda de otros semidioses, que estarán controlados por la inteligencia artificial o por otros jugadores, y apoyados por toda una serie de esbirros extraídos de la amplia fauna mitológica clásica, deberemos sobreponernos a nuestros rivales. Por supuesto, la victoria no se decidirá en una partida de petanca sino en una batalla de proporciones épicas, tanto como el tamaño de los titanes que manejaremos.

Las elecciones posibles cubrirán el amplio abanico de gustos de casi todos los usuarios. Habrá titanes parecidos a los del excelente Shadow of the Colossus, mientras que otros tienen su origen en personajes de leyenda. Cada uno contará con una serie de ventajas sobre el resto de sus congénere, y no por ello dejarán de tener ciertas debilidades que debemos saber proteger. Y si esto nos sabe a poco, se espera la llegada de dos nuevos contendientes en una futura actualización o paquete de expansión.
Si bien rol y estrategia parecen ir cogidos de la mano en los últimos años, pocos son los juegos que han sabido unir estos dos géneros con la suficiente habilidad. En el caso de Demigod, la parte rolera viene representada por la posibilidad de ir adquiriendo nuevas habilidades para nuestro personaje, conforme vayamos acumulando éxitos en los enfrentamientos. Además, cada tipo de titán disponible cuenta con diferentes posibilidades a la hora de evolucionar, por lo que la variedad está servida.

Y aunque podremos adquirir mejoras seleccionándolas en nuestro árbol de habilidades, también existe otra forma. En nuestra fortaleza podremos canjear dinero por mejoras representadas por ítems que podrán incrementar tamto nuestras características, como las de todas nuestras tropas. Estos objetos podrán aumentar nuestra salud o regenerarla, provocar más daño, incrementar nuestro movimiento,... Conseguir monedas será tan simple como capturar banderas controladas por el enemigo, o derrotar a otros semidioses.

Si somos derrotados, aunque no de forma definitiva, perderemos todos los objetos que nuesrto alter ego heróico porte en el momento de fallecer. De esta forma, quedarán durante un periodo de tiempo a merced de nuestro oponente, quien debería saber aprovechar la situación para hacerse con ellos. Esto fomenta que durante el combate resulte indispensable recuperarnos rápidamente, y relfexionar ligeramente antes de lanzarnos a lo loco sin tener en cuenta ninguna consecuencia posible para nuestros actos.

Por supuesto, esta característica no se puede decir que sea una asombrosa y hábil forma de traerse el rol al mundo de la estrategia, pero es que en el caso de Demigod no hace falta nada más, porque su forma de estrategia tampoco es la más tradicional. El título de Gas Powered Games deja a un lado las complejas estrategias y largas confrontaciones para basarse en un desarrollo mucho más rápido y frenético, donde las acciones se suceden y los usuarios deben pensar con rapidez y astucia.

Es así que uno de los puntos fuertes de Demigod son sus mapas, muy logrados artísticamente. A pesar de lo que pueda parecer al principio, cumplen un papel muy importante. Sus dimensiones son pequeñas y han sido creados con niveles o accesos por los que tendremos que pasar obligatoriamente. Así, cada arena de combate tendrá sus propias vías para llegar hasta el hasta el adversario, generándose varios frentes desde donde podremos flanquear y realizar maniobras.
Como no podría ser de otra manera, el objetivo final en cada uno de ellos será abrirnos camino hacia la base del adversario. Si conseguimos llegar a ese punto sanos y salvos, tendremos una oportunidad de destruirla o enfrentarnos contra su propio semidios. Al tratarse de una carrera por ascender posiciones en la jerarquía olímpica, no hay lugar para hacer prisioneros, y el fin definitivo de toda contienda debería ser la eliminación del avatar que corresponde a nuestro oponente, simple y llanamente.

Sin embargo, el desarrollo del juego diverge un poco según nuestra elección de personaje. Las deidades disponibles están englobadas en dos categorías: asesinos y generales. En función de nuestras preferencias y nuestro estilo de juego elegiremos semidioses de uno u otro tipo. Si elegimos a un asesino, el juego discurrirá como un juego de rol y acción, al más puro estilo Diablo. En cambio, si escogemos a un general, dispondremos de varias acciones para administrar y manejar a nuestras tropas, como en un juego de estrategia.

Eso sí, la obra de los padres de Supreme Commander es un juego directo, que le da un papel bastante secundario a la gestión de recursos y donde contará por encima de todo la velocidad a la hora de tomar decisiones. Es por ello que se han disminuido todos los factores a controlar durante una batalla, buscando la celeridad antes que la más pura estrategia. Es por ello que todos los enfrentamientos serán de 1 contra 1, buscando que centremos nuestra atención en un único y claro objetivo.

Obligatoriamente, un juego de estas características tiene que estar orientado a los modos multijugador. A su vez, este motivo es la única y triste excusa que nos queda para justificar el pobre trabajo realizado para los que quieran disfrutar de Demigod y no compartir la experiencia del juego en red. Al carecer de una campaña, o algún sustituto de similar intensidad, el título acelera mágicamente su fecha de caducidad si no podemos entregarnos de lleno a alguna confrontación por internet.

Únicamente contaremos con un modo campeonato y con un modo escaramuza, que no dejan de ser combates contra una decente inteligencia artificial, pero completamente inconexos argumentalmente. Habría sido perfectamente factible haber creado algún tipo de hilo que uniese distintos nodos de la historia, como se viera en juego de temática similar como el Black & White de Lionhead. Por si esto fuera poco, la acción se ve limitada a ocho escenarios, lo que contribuye a lograr una alta sensación de aburrimiento.
En cuanto al modo online, hay demasiados problemas actualmente que nos impiden obtener una experiencia jugable satisfactoria, principalmente los relativos a la conectividad y muy relacionados con los mecanismos de seguridad que se han implementado para evitar las copias ilegales del juego. El hecho es que cada jugador debe conectar directamente contra su oponente en red, y esto produce que las posibilidades de sucederse los problemas se multipliquen por dos.

Si bien Gas Powered Games está dedicando todos sus esfuerzos a solucionar estos inconvenientes, los usuarios ven como el único modo verdaderamente aprovechable sigue sin ser completamente utilizable. Como compensación, se ha dejado entrever la posibilidad de que los usuarios puedan enfrentarse directamente contra empleados de la compañía, quienes podrían asesorar a los jugadores sobre las mejores estrategias a seguir en el transcurso de una partida de Demigod.

Porque respecto a otras características técnicas, nos encontramos ante un juego de una calidad envidiable. El ciclópeo tamaño de nuestros personajes no influirá para nada en la tasa de frames por segundo, muy fluida en todo momento a pesar del elevado nivel de detalles que se cuentan entre los numerosos elementos que poblarán la pantalla de forma  simultánea.  Lo impresionante de cada uno de los titanes hace que su simple aparición cubra por completo toda la acción en pantalla.

Desde que se anunció su lanzamiento, eran muchas las expectativas depositadas en este título, pero nos ha dejado un cierto sabor agridulce. Han sabido combinarse adecuadamente los elementos de rol y de estrategia, y a nivel técnico se encuentra muy por encima de la media, pero podría haber dado mucho más de sí. Es una lástima, porque Demigod está dotado de una jugabilidad increíble, gracias a un manejo sumamente sencillo unido a la enorme variedad de posibilidades, la singularidad de los semidioses y los complementos que podemos adquirir. Esperemos ver todos los problemas resueltos… porque la oferta de Gas Powered Games merecería una nota significativamente más alta.


- Acción rápida y desarrollo muy ágil.
- Buena variedad de opciones.
- Calidad gráfica muy alta.

6.5

Correcto

No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.