Lobezno X-Men: Los Orígenes, Impresiones
Un nuevo juego lanzado al amparo de una superproducción. En esta ocasión se trata de las primeras aventuras del X-Men más famoso, Lobezno, el amigo de los niños. A primera vista, uno más para la larga lista de adaptaciones cine-consola, pero por primera vez en mucho tiempo, puede que nos equivoquemos.
Un nuevo juego lanzado al amparo de una superproducción. En esta ocasión se trata de las primeras aventuras del X-Men más famoso, Lobezno, el amigo de los niños. A primera vista, uno más para la larga lista de adaptaciones cine-consola, pero por primera vez en mucho tiempo, puede que nos equivoquemos.
La lista de videojuegos con superhéroes como protagonistas crece exponencialmente en los últimos tiempos. Casi al mismo ritmo que la de adaptaciones cinematográficas. Los resultados, excepto honrosas excepciones suelen ser nefastos. De esos que en las conclusiones acaba poniendo 'sólo apto para fanáticos de X personaje'. Por suerte, los fans de Marvel, DC, Norma y demás compañías comiqueras tienen un adalid en forma de compañía desarrolladora, Raven Software. Estos chicos son los responsables de algunos de los mejores juegos salidos del mundo de la viñeta. Sólo hay que citar su extraordinario Marvel Ultimate Alliance para despejar la sombra de la duda.
Este estudio cuenta con tres equipos de desarrollo, actualmente trabajando en Singularity, Wolfenstein y este Lobezno. X-Men Los Orígenes. Uno de los cuales ha sido el encargado de crear todos y cada uno de los juegos de héroes enmascarados de Raven. ¿Adivináis cual? Sí, el mismo que desarrolla esta próxima aventura de Lobezno. Pero eso no es lo mejor, sino que lo bueno viene con el hecho de que habían empezado a crearlo antes incluso de que se anunciara la película de la que aprovechará el tirón. Esto es porque los chicos de este equipo de desarrollo son ávidos lectores de cómics, y querían hacer un juego de Lobezno, 'el super héroe más cool jamás creado' según las palabras de Dan Vodrak, jefe de desarrollo del título que nos ocupa.
De esta manera, antes de que Hugh Jackman firmara para volver a vestirse de Jason Howlett (También conocido como Logan Keller, o mejor aún, Lobezno), en Raven ya tenían un prototipo jugable de lo más entretenido. Se suele decir que los juegos no son divertidos hasta cerca de cuatro o cinco meses antes de la salida al mercado, pero en este caso la intención fue hacer algo accesible y ameno desde casi el momento cero. Y eso sin dejar de lado todo lo que conlleva el personaje central de su juego. Luego aparecieron los estudios de Hollywood ofreciendo todo tipo de facilidades, como acceso a todos los borradores del guión y a material exclusivo de la película. También entró el señor Jackman en la ecuación, prestando sus facciones y su voz al personaje (no así sus movimientos, capturados todos por especialistas en los estudios de Raven). Además luce mejor aspecto que nunca gracias a las virtudes del Unreal Engine 3. Con estos antecedentes parece que va ser realmente difícil estropear un proyecto tan bien encaminado.
De esta manera, para cuando conseguimos ponernos a controlar a este mozo de largas garras estábamos sobre aviso de lo que íbamos a tener ante nuestros ojos. Grandes escenarios con todo lujo de detalle, iluminación y sombras dinámicas, varias capas de texturas en todos los personajes -incluso tienen modelados parte de los intestinos-. Y un Lobezno tan realista que da hasta grima verle hecho trizas al recibir un misil, pero que poco a poco se regenera gracias a sus poderes mutantes hasta volver a su estado habitual. Lo veremos en pantalla agujereado, descarnado, como un amasijo de huesos recubiertos de adamantium Sin ningún tapujo en mostrar unas vísceras por aquí o un desmembramiento por allá. Esto no es el cine, la sangre tiene un mayor hueco en pantalla.
De igual modo que se concede esta pequeña licencia, la versión jugable de la película trata de ampliar el argumento y cameos de todo tipo de superhéroes presentes. Por tanto será todo lo que salga en pantalla grande, e incluso más. El hilo conductor de la aventura será muy similar en ambos casos -película y videojuego-, viviendo los orígenes de Logan desde el Canadá del siglo XIX hasta el presente, a base de flashbacks y demás recursos fílmicos.
Lo que menos esperábamos era que una vez con el mando en las manos todo se mostrara tan accesible y fluido. Que casi por arte de magia nos engancháramos a la demostración del primer nivel del juego a la que tuvimos acceso. Se trataba de un nivel ambientado en la jungla durante alguna guerra en la que el protagonista tuvo algo que ver. Todo empieza como un paseo en helicóptero hacia un nuevo campamento, hasta que un misil impacta en nuestro vehículo y nos precipitamos hacia la densa selva desde miles de metros de altura.
En este punto nos sorprendió que incluso la caída estaba totalmente controlada por nosotros. Y es que en Raven han puesto el acento en tratar de conseguir que no existan videos durante los niveles, sino que seamos nosotros los que tengamos el control en todo momento (ni siquiera hay los ya cansinos Quick Time Event). Esto se demostró con un par de espectaculares escenas típicas del mundo del cine, como un asalto a un helicóptero en el aire o la de un puente colgante al estilo Indiana Jones. Estos momentos llegan a ser hasta un 30% de la jugabilidad de Lobezno. X-Men Los Orígenes. Esperemos que no sea demasiado. La intención es conseguir mantener la atención del jugador en todo momento. Lo consigue.
El resto del tiempo de juego está distribuido entre un 20% para la parte de aventura y plataformeo (lo justo añadir algo de variedad al esquema avanza-pega-avanza de los beat'em up más clásicos) y un 50% para los combates. Este es el punto del que quedamos más satisfechos en nuestra toma de contacto. Bebe de las fuentes de God of War, pero le añade un punto genial muy al estilo Lobezno. Con sólo los botones principales del mando se pueden realizar multitud de brutales combos desde el segundo uno de aventura, e ir ampliando la lista al avanzar y ganar experiencia. Esta, a su vez, también vale para potenciar los muchos poderes especiales del protagonista, que simplemente van apareciendo en determinados momentos de la aventura, por eso de que sigamos teniendo nuevas habilidades cada poco tiempo. Es más seguiremos aprendiendo nuevos movimientos y poderes hasta prácticamente la última misión, donde seremos un verdadero espectáculo para la vista y una tortura para las tropas enemigas.
De esta manera iremos superando hordas y hordas de enemigos que reaccionan de manera dinámica a nuestros movimientos, aprendiendo nuestras rutinas de ataque para ponernos las cosas más difíciles. Nuestros rivales irán desde simples soldados armados, hasta engendros del tamaño del Empire State, como se pudo ver en una batalla con un centinela enemigo. Y eso sin olvidarnos de todo tipo de adversarios de tamaño medio, mutantes incluidos, de todo tipo y pelaje.
Ya la guinda es el homenaje' al mundo del cómic incluido entre los extras donde podremos ir desbloqueando distintos materiales sacados directamente del papel. Portadas, bocetos, storyboards e incluso trajes alternativos para Lobezno. Lo que todo fan esperaría de un juego de superhéroes si no hubiera película. Pero es que, como dijimos antes,Lobezno. X-Men Los Orígenes no es un juego de cine. Más bien se trata de una oda al personaje que casi de casualidad va a aprovechar el tirón de una superproducción de Hollywood. Seguro que habrá más de uno que espera con ansia su estreno Pero no para ir al cine, sino a la tienda de videojuegos más cercana.
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