Hydrophobia
Al género del survival horror se le suma un nuevo y letal enemigo, el líquido elemento, al que tendremos que hacer frente en el interior de un gigantesco buque en hundimiento y en el que el oxígeno será nuestro bien más preciado.
Al género de los survival horror se le suma un nuevo y letal enemigo, el líquido elemento, al que tendremos que hacer frente en el interior de un gigantesco buque en hundimiento y en el que el oxígeno será nuestro bien más preciado.
En esta última década hemos conocido todo tipo de monstruosas criaturas que reducían a cero nuestras probabilidades de escapar con vida de un sinfín de títulos de éxito. Recordar con temor a los brutales raptores de la saga Dino Crisis, los omnipresentes zombies del inagotable Resident Evil, u otras formas de aterrorizarnos como los angostos y sangrientos escenarios del pueblo maldito Silent Hill o, más recientemente, el propio fuego de la última entrega del padre del survival horror, Alone in the Dark.
El esfuerzo de las desarrolladoras se centra en ofrecernos nuevas recetas para crear crudas sensaciones de miedo frente al televisor. Se orienta cada vez más al horror psicológico antes que a la brutalidad y cualquier temor humano es, tarde o temprano, reflejado en un videojuego. Por otra parte es difícil sorprender al jugador, ya que obras de último lanzamiento como Dead Space han dado otra vuelta de tuerca al género, mezclando influencias que van desde el cómic hasta el cine, o incluso otros títulos anteriores. Ahora, en los inicios de este 2009, se presenta una apuesta por la inclusión de un nuevo elemento, el agua, como sistema de miedo. Infundir respeto y temor al usuario con el líquido de la vida, el que bebemos o con el que nos duchamos.
¿Y esto es posible? ¿Como puede plantearse una historia en torno a algo a lo que desde la cuna de la humanidad se le otorga propiedades beneficiosas y transformarlo en un personaje con carácter en un videojuego? Sin duda el planteamientos es más que atractivo e Hydrophobia tiene papeletas de convertirse en uno de los 'tapados' del año. Sus creadores, tras varios rumores de cancelación, desmentidos, por la falta de material desde 2007 (a excepción del trailer presentado en 2008) y por la nula experiencia de sus miembros en este género, presentan a su criatura en sociedad.
Hydrophobia nos pondrá en la piel de Kate Wilson, una ingeniera de seguridad a bordo del Queen of the World, un enorme navío en el que viajan las personas más poderosas e influyentes del planeta. Dicha embarcación es la única esperanza que le queda a la tierra tras la catástrofe profetizada en el siglo XVIII que vaticinaba la inundación prácticamente total de la superficie terrestre, enterrando en barro y pobreza ciudades enteras, devolviendo a la humanidad a sus inicios más primitivos. Es entonces cuando el Queen of the World sufre un ataque a manos de un grupo terrorista denominado Neo-Malthusian, que corresponde al nombre del visionario y al cual deberemos enfrentarnos.
Con este apocalíptico argumento plantea Blade Interactive su apuesta dentro de un género tan prolífico como es el survival horror. Y es que la compañía británica, fundada en 1998, apenas se ha zambullido en otros proyectos que saliesen de la licencia World Championship Pool, y World Championship Snooker, títulos de irregular calidad en los que llevan trabajando desde principios de siglo, amén de aquel G-Surfer o Hyper Sonic Extreme aparecidos en Play Station 2 al más puro estilo F-Zero. Ahora, con Hydrophobia, nos presentan sus credenciales en una aventura con la que nos prometen la mejor recreación a nivel de aspecto y comportamiento del agua, con una física muy realista y un importante papel en el juego, tan importante como el de la superviviente.
Hay que tener presente que en este apartado Blade Interactive ha puesto especial interés para convertirse en un referente en el sector como FarCry2 lo es con el tratamiento del fuego. En el trailer presentado en el pasado E3 puede comprobarse la espectacular física introducida para representar el agua en multitud de situaciones, como oleajes, habitaciones estancas y la que promete ser una interacción única con personajes humanos. Incluso se potenciarán los efectos de disparos o salpicaduras con un realismo excelente.
Para ello han desarrollado un motor específico que les ha llevado dos años de trabajo, el HydroEngine, un nombre más que adecuado. Este sistema puede interactuar con objetos sólidos como el motor Havoc Physics Engine, utilizado por Valve, ofreciendo al jugador la auténtica visión de millones de gotas moviéndose en cadena, reaccionando a cada elemento con el que choca a su paso, tiñéndose por la luz y dando una constante sensación de volumen. Pero no todo es H2O en este título: el aspecto gráfico luce a primera vista más que correcto, y aunque los escenarios mostrados corresponden mayoritariamente a zonas como salas de máquinas, almacenes o pasillos, se aprecian buenas texturas en las paredes, efectos de luz filtrándose entre los barrotes, ojos de buey o puertas, e interesantes contrastes de zonas iluminadas con fluorescentes y otras de total oscuridad.
El mapeado, a pesar de ser único, tendrá unas dimensiones más que considerables, con vistosos casinos, restaurantes y hasta un campo de golf o oscuras zonas en las salas de máquinas o baños. También nos planteará numerosos puzzles, ya sean para conseguir items y armas o para, simplemente, escapar de una estancia a punto de inundarse o conseguir algo de oxígeno. Y es que Kate carga con un pequeño inconveniente, su miedo visceral al agua, lo que convierte el simple hecho de mantenerse a flote en una situación agónica en la que nuestra protagonista sufrirá algún tipo de reacción en forma de ataque de pánico, con pérdida en los controles y efectos en el color e iluminación de la imagen.
El elemento de fobia no hará sino acrecentar esa sensación de estar atrapados en las tripas de un gigante de hierro que tendremos que reparar, pero que no dudará en someternos a situaciones de resistencia límite, obligándonos a llevar a nuestra protagonista a zona seca y firme tan rápido como podamos, si no queremos sufrir los efectos de su incontrolable pavor. Pero habrá situaciones en las que el agua no será el rival a batir. Como ingeniera que es, Kate no domina en aboluto el manejo de las armas y en multitud de ocasiones utilizará aquello que tanto pavor le provoca contra los enemigos a los que se enfrente. Enemigos de los que aún no sabemos mucho, solo que ocuparán las zonas secas del Queen of the World desde las cuales planean el secuestro y que tienen en el agua al mismo aliado o rival que nosotros.
Sobre si afrontaremos la aventura completamente solos es algo de lo que no se han dado detalles. Varias capturas del concept-art de Hydrophobia nos muestra a Kate prestando ayuda a otros supervivientes, sin saber si esas personas llegarán a unirse a nosotros, siendo personajes manejables o simplemente partes de alguna misión. La apuesta de Blade Interactive es clara, sumergir literalmente al jugador en un mundo donde apenas posea control sobre el entorno y que el simple hecho de respirar sea el principal objetivo de nuestra aventura, con un título que apunta influencias de grandes del género como Bioshock o Dead Space pero con mimbres suficientes como para dar una grata sorpresa. ¿La fecha? Marzo de 2009 para Xbox 360, PC y PlayStation 3. Hydrophobia aún no cuenta con distribuidora, pero tal es la fe de sus creadores que ya piensan en una secuela situada en alguna ciudad de Estados Unidos, posiblemente Boston.
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