You're in the Movies
- Plataforma3604
- GéneroPuzle
- DesarrolladorZoë Mode
- Lanzamiento28/11/2008
- EditorCodemasters
Telefilm de sobremesa
Llega a Xbox 360 un título muy particular. Lejos de ser un juego propiamente dicho, You're in the Movies es un editor de cortos, con aspecto de películas de serie B. Haciendo uso de la Xbox Live Vision, grabaremos nuestras mejores actuaciones para protagonizar esos cortos tan peculiares.
You're in the Movies no es un juego como tal. No cabe duda de que se encuadra, sobre todo debido a su sistema de puntuación, dentro del mercado del ocio interactivo, pero sus miras se encuadran dentro de un terreno muy diferente: el de convertirse en un acto social, un acompañante de fiesta cuando nos reunamos con familiares y amigos. Forma parte de una serie de títulos de Microsoft enfocados a llegar a un público más amplio, junto a los interesantes Lips y Scene It!, pero ha salido mucho peor parado por su planteamiento. Aquí la idea es grabarnos, haciendo uso de la Xbox Live Vision, y con los fragmentos se creará un tráiler de película de serie B.
El proceso funciona tal que así: seleccionamos una de las 30 posibles películas que nos oferta el juego, de géneros muy diversos (terror, catástrofes, monstruos gigantescos, etcétera). Podemos participar en solitario o con hasta tres amigos, cada uno encargándose de uno de los papeles principales de la película. Es posible seleccionar el papel que queremos hacer, con sólo colocarnos en el lugar de cada personaje. A partir de ahí, empieza la grabación, en la que durante aproximadamente media hora (un tiempo que variará según el número de participantes en la sesión) realizaremos varias tomas. Al final, veremos el tráiler con nuestras grabaciones incorporadas, de un minuto de duración aproximada.
La grabación de escenas se realiza a través de minijuegos, en los que tendremos que realizar movimientos que, aunque no lo parezca, acabarán teniendo sentido dentro de la película. Las pruebas son variadas: romper rocas que aparecen en pantalla, esquivar palos de entrenamiento, tirar barro a un cerdo, correr para huir de un toro, girar un hula-hop, conducir una moto, etcétera. Para ello, bastará con situarnos donde una silueta en pantalla nos indica y realizar los movimientos que nos marcará el juego. Pese a que lo que pueda parecer, no hay minijuegos particulares para cada película, y muchos de ellos se repetirán de forma bastante habitual.
Todos ellos nos irán otorgando una puntuación que no influirá en nada en el resultado de la película final, sino que más bien incitará la competición entre los distintos participantes, ya que se irán acumulando y, al final, después de la película, tendrá lugar una entrega de premios en la que se reconocerá la mejor actuación. Este aspecto, que podría ser interesante, se ve lastrado por la puntuación máxima de 9999 en cada prueba; el propio juego nos ofrece oportunidades para llegar a dicha cifra, y aunque es posible errar y perder jugosos puntos, lo cierto es que eso sólo pasará en las primeras partidas. Con un poco de tiempo y sabiendo cómo funciona el título, será habitual alcanzar la más alta puntuación.
Además de los minijuegos, hay situaciones en las que el juego nos llama a escena para grabar algunas secuencias particulares. Es decir, poner cara de susto, reírnos, risa maléfica, mirar dentro de un pozo, seguir una luz unos segundos de grabación que, a fin de cuentas, dan la sensación de que bastaría con ellos para grabar todo, sin la necesidad de esos minijuegos que son el mayor atractivo del título, pero se ningunean en exceso. De hecho, las películas son tan cortas que hasta resulta frustrante el tiempo invertido en una secuencia ínfima, y la mayor diversión radica en esos minijuegos en los que nos obligan a hacer el ridículo en compañía de nuestros amigos.
De hecho, el ritmo del juego es algo extraño, y al disfrutar de cuatro, que es cuando ofrece su máxima diversión, los participantes tienen que esperar demasiado hasta que llegue su turno. Cinco minutos de espera, viendo cómo juegan los demás, antes de actuar durante unos segundos y volver a esperar a la siguiente ocasión. En total, son cinco tomas por película para cada jugador, una cifra bastante elevada para la escasa duración que tiene la secuencia resultante, la cual además suele ser bastante absurda, pero sin desentonar en ese estilo de serie B tan peculiar. Posteriormente, con un modo Director, podremos montar nuestras propias secuencias, haciendo uso de todos los fragmentos a nuestra disposición.
hemos hablado en profundidad en su momento. Se trata de un complemento perfecto para nuestra consola, ya que nos permite personalizar nuestro avatar, es posible utilizarla en algunos títulos como Rainbow Six Vegas o Viva Piñata Trouble in Paradise, o convertirla en nuestra fuente de vídeo para las conferencias que mantengamos a través de Xbox Live. Pero además, como funciona vía USB, la podremos conectar a cualquier PC, expandiendo sus funciones y su uso; si tenemos Windows como sistema operativo, se autoconfigura sola sin problemas. Viene incluida en la caja de You're in the Movies, convirtiéndose en un añadido muy atractivo.
Sin embargo, pese a la buena calidad general de la cámara, en You're in the Movies no nos ofrece su mejor cara. También es cierto que se pide mucho en el juego: la cámara debe reconocer el fondo, eliminarlo manteniendo el contorno de los participantes, y grabar todos los movimientos que hagamos. El reconocimiento es excelente, pero cuando llega el momento de eliminar el fondo, es donde la cámara, o el juego, empiezan a sufrir, parpadeando mucho y distorsionado los bordes, cortando más de lo que debería en muchas ocasiones. Es habitual, por ejemplo, que haya puntos muertos en los que nos desaparece parte del pecho para vislumbrar el fondo, pero si movemos un brazo no ocurre. Además, requiere un fondo monocromo y plano para obtener resultados lo más precisos posibles.
Si la grabación es imprecisa, la película resultante se resiente. Por ejemplo, si por el motivo que sea, sale un trozo de nuestra habitación o salón al lado de nosotros, ese fragmento estará presente también en pantalla durante la secuencia final, resultando algo muy extraño y forzado. Del mismo modo, si nos falta un fragmento de cabeza o si el movimiento que realizamos no tiene razón de ser dentro de la secuencia. El juego no se puede medir en términos visuales, ya que no tiene prácticamente nada que explote el potencial de la máquina, ni jugables, ya que todo se limita a movernos delante de la cámara. Eso sí, destacar que está perfectamente doblado al español y que durante las pantallas de carga, nos hará preguntas de trivial.
Mediocre
Podía ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con él quedará archivado en la estantería para no jugarlo nunca más. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.