[E3] Silent Hill: Homecoming
El terrorífico pueblo de Silent Hill esconde muchas sorpresas en su nueva entrega. Ahora, estamos un poquito más cerca de descubrirlas...
El terrorífico pueblo de Silent Hill esconde muchas sorpresas en su nueva entrega. Ahora, estamos un poquito más cerca de descubrirlas...
A sólo un par de meses de su lanzamiento, aprovechamos esta nueva edición del E3 para volver a acercarnos a Silent Hill: Homecoming. La primera entrega de la exitosa serie de Konami para las consolas de la actual generación ha generado todo tipo de reacciones a su alrededor, desde elogios a duras críticas. ¿Qué es lo que de verdad ofrece esta nueva incursión en el universo de Silent Hill?
El juego no tiene relación directa con ningún capítulo anterior. Se mantiene la teoría de que las entregas pares de la serie son capítulos independientes: 2, The Room y Homecoming no tienen nada que ver con la línea argumental de 1, 3 y Origins. Pero, eso sí, le hace un guiño a muchos de los elementos aparecidos en todos ellos, empezando por la expansión de Silent Hill fuera de los límites de su propio pueblo.
Aunque no se sabe si ocupará el cien por cien del título, el argumento transcurre en el pueblo de Shepherd's Glen. Alex Shepherd (conociendo la serie, estamos seguros de que el hecho de que compartan el mismo nombre oculta más de lo que parece) es un veterano de la Segunda Guerra Mundial que, cuando regresa a su hogar, descubre que su hermano ha desaparecido, y posteriormente su padre cuando fue en su busca.
La serie Silent Hill siempre ha conseguido ofrecer un argumento apasionante y lleno de sorpresas, ambientado en escenarios tétricos, lúgubres y desconcertantes. Sin duda, para esta nueva entrega se está trabajando muy en serio para lograr reproducir toda esa magia, y elevarla a la enésima potencia. Los pocos instantes que han ido saliendo a la luz han dejado claro que este título es capaz de ponernos los pelos de punta y de hacernos pasar muy malos ratos.
Hasta la fecha, se han podido ver tres escenarios distintos: el famoso hospital, el cementerio y las propias calles del pueblo. Posiblemente el menos espectacular de todos ellos sean las calles, ya que una niebla constante puebla cada esquina, dificultando nuestra percepción del entorno. Una atmósfera asfixiante que juega con nuestros sentidos, pero que a la par oculta muchas oportunidades (abrir puertas con tablas de madera haciendo uso de un hacha, por ejemplo).
El hospital ofrece una presentación desconcertante, en la que Alex no es más que un preso atado a una camilla, y el entorno parece haber enloquecido: sangre, gritos y lo que parecen ser experimentos inhumanos pueblan las salas a nuestro alrededor. Pero algo acaba con el médico que nos llevaba y somos libres para vagar por un entorno de auténtica pesadilla.
Será la primera vez que visitemos en un Silent Hill un cementerio al nivel en el que lo haremos aquí. Panteones, pasadizos, tumbas por doquier las dimensiones de este escenario son bastante sorprendentes, y el horror que es seña de identidad de la serie se ve potenciado por una ambientación idónea para despertar nuestros temores más profundos.
Todos los escenarios, y el juego en sí, destacan por su gran interactividad y sus múltiples opciones. Para empezar, destacar muy positivamente que no habrá tiempos de carga al atravesar puertas: los escenarios estarán completos, y podremos recorrerlos sin miedo a interrupciones; así será más fácil investigar, pero también, si nos enfrentamos a un enemigo, no tendremos la opción de escapar fácilmente de él. Donde sí tendremos opción será en los diálogos con otros personajes, con opciones para encauzar las conversaciones por distintos caminos.
Además, será posible saltar por los terraplenes y pequeñas diferencias de nivel, o incluso romper ventanas para saltar por ellas. A los amantes de los survival horror clásicos, les gustará saber que los puzzles seguirán estando a la orden del día, y la gran mayoría serán del corte clásico (conseguir llaves o claves para poder abrir puertas, por poner un ejemplo). La gran ventaja, tanto para la acción como para los puzzles, será que podremos controlar la cámara a nuestro antojo; también tendremos la posibilidad de acudir a una vista en primera persona.
Alex, como buen veterano de guerra, sabrá defenderse mucho mejor que sus predecesores. Por el momento no se han desvelado muchas armas, pero resulta satisfactorio ver que no se basará tanto en las armas de fuego como muchas voces de alarma anunciaban al principio. De momento, hemos visto las clásicas tuberías, cuchillos y hachas, las cuales Alex sabe utilizar con mucho acierto.
Las mejoras del sistema de combate son más que patentes, sobre todo gracias a un sistema de esquivas muy útil y dinámico. Lejos quedan los ortopédicos combates de las entregas anteriores, ahora serán mucho más precisos y agradables. Tanto, que los enemigos nos atacarán en grupos sin ningún tipo de reparo, y seremos capaces de hacerles frente sin temer en exceso por nuestra vida.
Todo esto será necesario para poder enfrentarnos a las criaturas que nos acecharán y a los grandes jefes finales. En su conferencia del E3, Konami ha mostrado un ente muy del estilo Silent Hill, al que podemos afrontar de diferentes maneras. Como grandes bolsas de carne que cuelgan desde el techo, la criatura no duda en atacarnos sin piedad. Dichas bolsas sirven de contrapesos, así que podemos destruirlas para hacer que el monstruo caiga al suelo.
En un ambiente tan dinámico, tanto por desarrollo como por sistema de control, los sustos son mucho más imprevisibles y logran cogernos mucho más desprevenidos: sillas de ruedas que caen por la escalera ante nosotros, cadáveres que caen del techo, perros que nos atacan por sorpresa desde un desnivel, o incluso rápidos cambios al mundo oxidado de Silent Hill.
En un juego de estas características, hay un elemento que es casi fundamental y de una importancia casi absoluta: la banda sonora y los efectos de sonido. En ese aspecto, Homecoming está al mejor nivel. Bajo la batuta, una vez más, de Akira Yamaoka, se está creando un apartado de una calidad inmejorable, capaz de ponernos los pelos de punta por sí solo.
Pero si juntamos todos los elementos, Silent Hill Homecoming tiene muchas papeletas de conseguir satisfacer a todos los aficionados a los survival horror. Consigue recuperar esa sensación de que estamos ante un Silent Hill, y eso es mucho decir, algo por lo que suspiran muchos títulos del género. No tendremos que esperar mucho para saber si consigue que su experiencia sea tan inolvidable como promete.
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