Star Ocean: First Departure, Impresiones
La práctica hace la perfección. Nos hemos quejado hasta la saciedad de los innumerables remakes y ports que Square Enix lanza al mercado, de su falta de originalidad y de la poca ambición que demuestra en su filosofía. El caso de Star Ocean: First Departure nos recuerda al del reciente FFIV, ambos títulos remodelados desde cero y haciendo gala de un nivel técnico sobresaliente. Igual es que por fin han aprendido
La práctica hace la perfección. Nos hemos quejado hasta la saciedad de los innumerables remakes y ports que Square Enix lanza al mercado, de su falta de originalidad y de la poca ambición que demuestra en su filosofía. El caso de Star Ocean: First Departure nos recuerda al del reciente FFIV, ambos títulos remodelados desde cero y haciendo gala de un nivel técnico sobresaliente. Igual es que por fin han aprendido
Como periodistas vivimos pendientes de todas las noticias y de la actualidad que genera el mundo del ocio electrónico. Todas las compañías y plataformas que existen en el mercado cuentan con legiones de seguidores que rara vez se piensan dos veces adquirir el último juego de su empresa favorita. Atender al hype que nos rodea es tan gratificante como asfixiante, tal es la cantidad de noticias que los videojuegos producen diariamente, pero hay que reconocer que por más que nos quejemos del funcionamiento o de la filosofía de una empresa siempre seguimos atentos a los progresos de la misma, jugando con sus repetitivos juegos o con cualquier otra cosa que nos echen a la boca.
A día de hoy existen pocas compañías con un nivel de producción tan elevado como Square Enix, siempre con varios juegos en el punto de mira y con una presencia muy marcada gracias a su saga por antonomasia, la omnipresente Final Fantasy. El último evento privado de los de Iwata fue carne de cañón para los críticos y otra nueva decepción para los aficionados, pero no en vano sí se anunciaron algunos títulos que han sido injustamente olvidados, como es el caso de Star Ocean: First Departure. RPG modélico allá donde los haya, Enix siguió el rebufo de Final Fantasy VI y de Tales of Phantasia para dar origen a una saga que ya cuenta con cinco entregas diferentes y que con el paso del tiempo ha cobrado algo de fuerza por occidente -gracias sobre todo a la llegada de Till the end of time'-, que hasta el momento se había visto privado de los tres primeros exponentes de la serie.
First Departure
Cuando se anunció el remake de Star Ocean se generó controversia por miedo a desmitificar una saga que contaba con una reputación muy a tener en cuenta por los aficionados, y además era difícil imaginar de qué manera iban a mejorar un juego que ya en su día supuso un boom' en cuanto a las posibilidades de SNES se refería. Voces incluidas en las escenas cinematográficas, un sistema de combate muy depurado y especialmente un apartado gráfico del que bien se podría decir que dejaba en pañales al todopoderoso Final Fantasy VI. Ambos juegos comparten un esmero y cuidado en casi todos los detalles presentes durante la aventura fuera de dudas, pero por desgracia la aventura de Radix y cía. suponía un esfuerzo económico muy grande de cara a una posible traducción, por lo que ni siquiera el hecho de que el doblaje fuese originariamente en inglés logró convencer a Enix de sacar del país nipón su mejor juego.
Como casi todo el mundo, acogimos el estreno de First Departure con recelo, expectantes ante el trabajo que Square Enix había llevado a cabo trece años más tarde. A sabiendas de que la historia y el sistema de juego iban a permanecer casi idénticos al cartucho original nos queda poco más que el apartado gráfico y el técnico en general para sorprendernos. Se puede decir que, tras largas horas probando y desmenuzando los entremeses de este remake, Star Ocean es a su manera uno de los RPGs más espectaculares de PSP, y una auténtica delicia para todos los aficionados a los clásicos juegos de Rol de la decana SNES. Y eso, a estas alturas y hablando de Square Enix, es decir mucho.
Magnificencia a la antigua
La evolución de First Departure es lógica, similar a la que se produjo en su día con el salto entre SNES y PSX. De unos escenarios limitados y con la peculiar pixelación de una consola de 16bits pasamos a fondos pre-renderizados de calidad soberbia, con la misma estructura de la edición original, añadiendo nuevos elementos y facilitando en gran medida la integración del jugador al sistema de juego. Enix ha tenido cuidado de disminuir la curva de dificultad inicial, prestando mucha atención a explicar adecuadamente todos los controles y la opciones que debemos tener en cuenta a lo largo de la epopeya.
Llama mucho la atención el corte con el que la compañía ha bordado el apartado gráfico, sosteniéndose sobre diseños anime para los personajes y los CGIs mientras que pueblos, mazmorras y otras zonas que recorreremos gozan de una imagen mucho más austera, plagada de detalles pero con la intención de sorprender en su elaboración. Nuestro héroe de turno, Radix, es un simple sprite dentro de un mundo genialmente creado y en el que no se ha escatimado ni el más mínimo detalle.
Hay muchos cambios con respecto al cartucho original y casi todos atañen al diseño de las ciudades o a la estructuración de los interiores de las casas. Pequeños detalles que sólo podrán apreciar los que hayan disfrutado de la aventura original, pero que sin duda son un guiño a los aficionados que se han acercado a la importación o al sacrificio de terminar un juego en japonés. La historia y los momentos en los que ésta se narra, todos introducidos mediante vídeos CGIs, se ha escenificado de forma mucho más comprensible y lógica; es espectacular ver cómo el tiempo ha cambiado por completo un género que antes se sostenía sobre innumerables clichés.
Reviviendo un clásico
Ratix Farrence, Milly y Dorm son tres jóvenes muchachos miembros de la Brigada Clatos cuya única misión en la vida es patrullar su pueblo en busca de posibles ataques de vándalos y ladrones. Una extraña plaga comienza a azotar los resquicios de la civilización en la que vivimos, convirtiendo a los seres vivos en piedra sin cura alguna. Son tiempos agitados, difíciles en los que el buen manejo de una espada es imprescindible para perdurar. Tres jóvenes héroes de los que poco sabemos y que combinan sus acciones en conjunto, hasta que un día son abducidos por una extraña nave de origen desconocido.
Nuestra civilización, tal y como la conocemos, se acerca a su fin. Tras la pérdida de Dorm y de ver convertidos a nuestros seres queridos en piedra, comenzamos una nueva aventura en busca de una cura para la terrible plaga que azota nuestro planeta, volviendo al pasado para atar cabos y por supuesto derrotar al villano de turno. En nuestra misión daremos con múltiples amigos que unirán a nuestra causa, y muchos elementos nos resultarán conocidos dado que han servido a la larga como inspiración a decenas de sagas distintas, entre ellas a la popular Tales of '.
Combates en tiempo real
Ya comentábamos que en este remake hallamos muchas diferencias con respecto al original, y que a Enix no se le ha olvidado la esencia de uno de sus juegos más relevantes dentro de su catálogo. Todos los cambios se refieren a pequeños detalles sin importancia a primera vista, tanto en el modo de narrar el argumento como en el aspecto gráfico, pero también en el sistema de combates. Para evitar los tediosos momentos de exploración al estilo Seiken Densetsu se ha implantado un llamativo mapamundi -que recuerda a horrores al de Final Fantasy VII-, muy útil para desplazarnos sin tener que emplear más tiempo del necesario en combates por haber perdido la ruta o por confundirnos de camino.
Los cambios gráficos son en efecto muy significativos, y como veréis en las imágenes se ha enfatizado enormemente en los efectos especiales, magias y casi en todo el resto de elementos que conforman el apartado técnico, mientras que los combates gozan ahora de una mayor soltura y velocidad, adoptando así una fórmula muy parecida a la de Star Ocean 2, continuación que por cierto hemos de tener muy en cuenta de cara a la futura valoración de este First Departure, pues es evidente que a grandes rasgos Enix ha tratado de acercar más esta primera aventura al estilo de la segunda.
Así pues el uso del círculo será suficiente durante los combates para marcar al enemigo y hacer que nuestro personaje corra hacia él y le ataque, sin tener que seleccionar el objetivo cada vez que queramos efectuar un ataque, exactamente igual que en Star Ocean 2. Cada personaje cuenta con unos rasgos muy marcados, no existen las mismas opciones de personalización que tan de moda están en los RPGs de reciente factura; en su lugar encontraremos un elenco impresionante de armas y distintos útiles que equiparnos, así como un sistema de juego nada linear que nos obliga a estar en constante tensión en pos de evitar perder los combates más exigentes.
Subiendo niveles, todos los posibles
Cada personaje cuenta con la posibilidad de aprender distintos skills o formas de ataque, además de golpes especiales, magias y demás. Podremos acceder a un sencillo sistema mediante el cual subimos individualmente el nivel de cada hechizo o ataque especial, a fin de lograr personalizar los personajes a nuestro gusto y antojo. En este sentido sí que no hay apenas cambios, salvando la colocación de algunos objetos o de la cantidad de los mismos, lo cierto es que Star Ocean en PSP es, como decíamos, en esencia el mismo juego que en SNES.
La exquisitez técnica de la que hace gala el juego puede ser un doble filo para el mismo dado el gran número de tirones que sin motivo aparente sufre el motor gráfico, suponemos fruto de la cantidad de texturas a modelar y de la grandiosidad de los fondos que tan bien ha tratado Square Enix. No estaría demás solucionar este problema de cara a un lanzamiento en Estados Unidos, pues es prácticamente el único elemento negativo que hemos encontrado en el motor gráfico.
El mismo juego pero más grande, más bonito
Damos por supuesto un lanzamiento en Estados Unidos de First Departure, pero no existe ningún dato oficial o información al respecto. Guardamos esa esperanza porque de otro modo no tendría sentido que Square Enix privase a occidente, por segunda vez, de uno de los juegos de mejor factura que existen en SNES y en PSP. Este Star Ocean es más' que su homónimo en casi todas las facetas de su desarrollo; más bonito, con más escenas de vídeo, voces en casi todas las conversaciones, una curva de dificultad mejor ajustada
Precisamente por ello nos queda la duda de si conseguirá impactar tanto como lo hizo su antecesor, porque en realidad no ofrece nada realmente nuevo, sino más bien un compendio de vicisitudes técnicas muy loables. Nosotros reconocemos la esencia del original, pero aseguramos desde un principio que NO es una experiencia tan increíblemente gratificante como la de jugar con el juego original, una reacción natural a las decenas de remakes con los que Square Enix nos golpea mes sí y mes también.
Al principio de este texto afirmábamos que la compañía japonesa cada vez atina más en mejorar sus clásicos, modificando el motor gráfico o adaptando el juego a las nuevas generaciones, y de paso dando a conocer juegos como este, que a buen seguro pasan desapercibidos para muchos de los aficionados al género. Remakes como estos sí que valen la pena, incluso cuando personalmente no sabría vaticinar qué hubiese ocurrido si a Square se le hubiese ocurrido la estúpida y simple idea de llevar a NDS el juego original y dejar el remake para su hermano mayor. En cualquier caso aconsejamos no perder de vista este Star Ocean pues promete convertirse en una de las opciones más recomendables del extenso catalogo de PSP; tiene todos los elementos para ello.
- Acción
- RPG