Jugando a la guerra

La II Guerra Mundial. Jamás un acontecimiento histórico tan importante fue tan prolífico en cuanto a adaptaciones jugables. No hay más que ver las franquicias tan exitosas que existen para todas las plataformas existentes. Generalmente, son los shooter, los simuladores de vuelo y los multijugadores masivos los que albergan quizás el mayor número de licencias, pero el género de la estrategia tampoco se queda corto, ya que es un buen escaparate donde plasmar grandes e impactantes combates. 

El caso que nos ocupa, Panzer Tactics DS, se corresponde con esta fructífera dualidad. En los albores de la misma, tendremos a nuestra disposición tres bandos diferentes de combatientes: Alemanes, Aliados y Rusos. En este caso, aunque moralmente no sea correcto para algunos, sí puede ser excitante para otros el hecho de poder controlar a los integrantes del eje. Esto no deja de ser una mera anécdota, pero no es muy común ponernos en la piel de los 'malos', cuando lo habitual es formar parte de los aliados.

El rigor histórico se mantiene en el modo campaña. Así, dependiendo del ejército que hayamos elegido, nuestras acciones estarán englobadas dentro de un contexto histórico concreto. Así pues, si escogemos el bando alemán nos trasladaremos al año 1939, y más concretamente a los sucesos correspondientes a la invasión de Polonia. Nuestro objetivo pues será eliminar cualquier atisbo de resistencia por parte del ejército polaco.

En el caso de los Rusos, si nos decantamos por ellos nos tocará defender Stalingrado del avance de los alemanes. Es 1941 y la lucha se desarrolla en el frente Norte y en pleno invierno.  Por último, si decidimos formar parte del grupo de los aliados, será 1943 y nuestro deber el librar el continente de fuerzas alemanas en Italia y Europa Central. 

La mayor parte de los combates se desarrollan sobre tierra, pero habrá determinados  momentos en donde la acción discurra sobre costa o mar, dependiendo del tipo de misiones a realizar. Por lo general, éstas se basan en objetivos muy simples: eliminar todas las posiciones enemigas o conquistar ciudades, por ejemplo. Asimismo, ganaremos prestigio y experiencia si cumplimos  los objetivos menores que se nos impongan, aunque no sean vitales para cumplir las misiones.

Tendremos que ser cuidadosos y cautos, para evitar que nuestras presumibles bajas sean superiores a un número concreto de unidades, además de rápidos, puesto que habrá que cumplir las misiones en un número determinado de días. De no ser así, si alguno de estos dos puntos no se cumple, habremos fracasado en nuestra misión.

A pesar de que puede ser difícil al principio lidiar con estas limitaciones además de con el propio enemigo, tendremos la posibilidad de ir aumentando nuestras tropas conforme se vayan conquistando ciudades y cumpliendo objetivos. En este caso, será más fácil resultar exitoso en nuestra campaña.

Finalmente, si consideramos que el modo campaña es algo aburrido, siempre podemos servirnos de otro amigo para jugar, ya sea con una única consola, con multitarjeta, o vía online con cualquiera que quiera retarnos.  

Gráficos y sonido

El apartado gráfico de este título es bastante simple, pero cumple con su cometido. El mapa de juego está en unas completas 2-D, reflejándose correctamente el campo de batalla, ríos, mares, bosques y ciudades. Pese a presentar un aspecto sencillo, podemos destacar algunos efectos climáticos como la nubosidad, presente en determinados momentos durante el juego y que otorgan algo de variedad al conjunto.  

Las 3-D también son visibles, aunque es un nivel más testimonial. Básicamente se limitan a transiciones que imitan los distintos enfrentamientos que se van produciendo. En cada caso, se mostrará el ambiente donde esté discurriendo el combate, es decir, campo abierto si nos encontramos en el medio natural o urbano si estamos dentro de una ciudad. 

Los sprites que conforman las diferentes unidades tanto nuestro ejército como el enemigo sigue la línea de simplicidad imperante. Dependiendo de si son carros de combate, antiaéreos, infanterías o escuadrillas, los iconos se representan en forma de soldados, cañones, tanques/tanquetas y aviones. Pese a tener también un tamaño pequeño, son fácilmente reconocibles. 

Cuando aparecen las transiciones en 3-D, los diseños son poligonales. En este caso sí presentan un mejor acabado, además de incluir efectos como explosiones, ráfagas de balas, el polvo que se levanta al desplazarse los carros o incluso el humo en aquellos objetivos alcanzados.

El sonido está bien recreado. Durante la presentación y navegación por los distintos menús gozaremos de un tema épico muy absorbente. En el desarrollo de los combates, los sonidos de las ametralladoras, los acercamientos de los carros, las pasadas de los aviones, los obuses o las distintas explosiones cumplen bien su papel.

Pese a que a veces los juegos de estrategia se caracterizan por utilizar muchos menús de cara a poder manejar con soltura el juego, en este caso podemos decir que es bastante simple. Dispondremos en cada momento de un menú circular con las distintas acciones a realizar, y el stylus para distribuir las tropas, algo muy agradecido por cierto.

Antes de comenzar, podemos completar un tutorial de manejo. En él aprenderemos todos los movimientos necesarios para sacarle el mayor provecho, sobre todo para los neófitos del género.

El tablero de juego está compuesto por una malla hexagonal que cubre todo el espacio. Dependiendo del tipo de unidad que estemos utilizando, podremos avanzar más o menos por el tablero descubriendo la totalidad del mismo. Por lo general, los aviones y los soldados son los que mayor facilidad de movimientos poseen. Los carros de combate o camiones se encuentran en un nivel medio, mientras que los antiaéreos poseen un radio de desplazamiento más reducido. 

Cada unidad de nuestro ejército posee un número determinado de componentes. Lo normal es que sean 10 por cada una de ellas. Cada vez que nos enfrentemos y perdamos efectivos, el número irá descendiendo hasta que llegue a 0, en cuyo caso perderemos la unidad al completo. No obstante, ya hemos dicho que si conquistamos ciudades, cumplimos objetivos menores o llegamos a un número determinado de puntos de experiencia podremos recuperarlas de nuevo.

En cuanto al listado de acciones que podremos realizar, además de moverse, atacar y finalizar turno, podremos consultar el mapa general con nuestras posiciones y las enemigas, la posibilidad de guardar o salir de la partida, cambiar opciones, curar y reclutar unidades cuando podamos, o alternar entre varias en caso de que estén en la misma casilla.

Los modos de juego se componen de la clásica campaña, multijugador, opciones de configuración, y realización de las diferentes misiones de un modo independiente. Las opciones para el multijugador que nos ofrece el juego nos permiten realizar combates multitarjeta, y vía wi-fi con cualquiera que quiera retarnos. También existe la posibilidad de jugar dos personas en una misma consola.