Expectativas albergadas

Desde este punto privilegiado de la ciudad de Tokio en el que me encuentro, las ideas parecen fluir suave pero incansablemente. Es de noche y puedo ver la Torre de Tokio, bella y esbelta como siempre, en la lejanía. Es difícil imaginar un lugar más tranquilo y sosegado en la urbe más grande del mundo. En este monstruo que todo lo devora y asimila. Esta tranquilidad le da a uno la extraña oportunidad de pensar a otro ritmo. Lentamente. Disfrutando del momento. Estamos a tres días del inicio del Tokyo Game Show 2007. Y esta edición promete ser de las que marcan época. Me dispongo a compartir con todos vosotros, después de un periodo de ausencia, mis pensamientos sobre las expectativas que levanta la feria de este año. Os he echado de menos. Pero he vuelto para quedarme, que no es poco.

Entremos en materia. Este año el TGS viene cargado, bien cargado. Para empezar, los organizadores esperan alrededor de 200.000 visitantes. Tendremos más de 170 expositores, y por primera vez será un evento de cuatro días de duración. Será una feria donde seguro que se nota que algo ha cambiado en la industria. Y es que el efecto Wii seguro que se hará notar. Miles de nuevos adeptos japoneses (en mayor o menor medida) al mundo de los videojuegos van a descubrir que hay una feria dedicada a su nuevo hobby. Y es que tanto Wii como su hermana portátil Nintendo DS han conseguido lo que parecía imposible: abrir este mundo que tenía la imagen de estar cerrado a un sector de edad determinado, a todas las edades y condiciones. Un auténtico éxito para Nintendo. El otro día el señor Iwata, presidente de la compañía, decía en tono jocoso que ahora los principales enemigos de las consolas son las mamás. Y las animaba a jugar cuando no estuvieran sus hijos en casa. Esta anécdota deja bien claras las intenciones y política a seguir por parte de Nintendo: Juego para todos.

Paradójicamente, Nintendo no estará en la feria, pese a los rumores en sentido contrario que se apuntaron hace unos meses. Pero es imposible no darse cuenta de cómo ha cambiado el panorama de la industria en tan sólo unos meses. Los que lleva Wii en el mercado, sin ir más lejos. La nueva apuesta de Nintendo vende más que ninguna otra. Y no sólo en Japón. Ahora es un fenómeno global.

Y hablando de ventas. Ya tenemos aquí el efecto TGS, como lo llamo yo. Y es que la pasada semana se hacían públicas las últimas cifras de ventas en Japón. En ellas se pudo observar una bajada considerable de ventas de consolas, incluidas las de Nintendo. El público quiere más. Espera con ansia anuncios importantes de las grandes compañías. Dejan de lado por unos días sus ánimos consumistas, algo harto difícil aquí en Japón a fe mía, y se disponen a escuchar las nuevas propuestas de la industria.

¿Y qué podemos esperar de la feria de este año? Bien, parece que Sony quiere recuperar terreno perdido con respecto a Nintendo y va a por todas. Comenzando con el discurso de apertura, pronunciado por el presidente de Sony Computer Entertainment, Kaz Hirai. El sucesor de Kutaragi-san tiene la difícil papeleta de hacer que su nueva criatura recupere la posición privilegiada que siempre tuvieron sus antecesoras. Lo va a tener difícil, muy difícil. Las distancias se reducirán, pero el efecto que ha tenido la fulgurante salida de Wii en todos los mercados, no se lo va a quitar nadie de la cabeza. Eso queda ahí para la historia de los videojuegos. Veremos cuáles son las intenciones y políticas del directivo de Sony en la conferencia. Esperemos que no haya que leer entre líneas y deje las cosas bien claras sobre el futuro de Playstation 3. Por el bien del consumidor.

Y esto me lleva a preguntarme algo que todo el mundo se cuestiona: Si la fórmula funciona tan y tan bien, ¿por qué no siguen Sony y Microsoft la estela de Nintendo y desarrollan consolas y juegos en esa línea? La respuesta es sencilla aunque con matices. Es una cuestión de orgullo empresarial y de imagen. Sobre todo por parte de Sony. ¿Veremos en la feria algo que nos haga cambiar de opinión y que dé un giro inesperados

Siguiendo con Sony, la compañía tendrá más 40 juegos, jugables o no, sobre el suelo de Makuhari. Y algunos analistas prevén una rebaja en el precio de Playstation 3 para contrarrestar el efecto 'Halo 3'. También se ha anunciado Eternal Sonata para PS3. ¿Toda la carne en el asador? Todo esto está muy bien, pero concordaréis conmigo, apreciados lectores, que necesitamos más. Alguna que otra sorpresa en forma de anuncio o incluso algo más tangible ayudaría, ¿verdad?

Y qué decir de Microsoft. Todos sabemos que no es Xbox 360 lleva una vida precaria aquí en Japón. No tanto como la de su predecesora, pero precaria a fin de cuentas. Parece que Microsoft nunca se da por vencido y que no quiere retirarse del mercado nipón sin antes haber dado toda la guerra de la que es capaz y más. Un detalle que quizás no sabíais es que la consola de Microsoft es percibida por el público japonés como una máquina para jugadores expertos y avezados. 'Hardcore gamers' en el argot de la industria. Pues bien, la compañía americana quiere aprovechar esta imagen en Japón y ya ha hecho algunos movimientos en este sentido. Por ejemplo, la inclusión en el catálogo del 'Live' japonés de juegos para este sector del público. Juegos como 'Rez', 'Ikaruga' o 'Exit', para la delicia de los amantes de géneros no tan convencionales. Pero no sólo de jugadores expertos se vive, así que Microsoft ha realizado una serie de anuncios en un evento previo al TGS en el que nos da a entender que va a por todas en la tierra del sol naciente. Ninja Gaiden II, el lanzamiento de Lost Odyssey en diciembre en Japón y en febrero en Norteamérica y territorios PAL, e Infinite Discovery de Square-Enix, son algunas de sus bazas. Y parece que se reservan más anuncios para la propia feria. Veremos.

En cuanto a las desarrolladoras, Square-Enix nos propone un catálogo fundamentalmente basado en las franquicias de Final Fantasy y Dragon Quest, donde podremos admirar nuevos tráilers del capítulo número XIII de la fantasía definitiva. Sega presenta un catálogo muy atractivo con continuaciones de sagas ya establecidas como Sega Rally, Nights o Bleach. Capcom parece que va a realizar una serie de anuncios muy jugosos y, según algunas fuentes, sorprendentes. Konami con sus Metal Gear jugables acaparará a buen seguro gran parte de la masa de fans japoneses que asistan a la feria. Grasshopper, los padres de Killer 7, presentará una versión jugable de No More Heroes para Wii. Como vemos, para todos y para todos los gustos. Aunque a mi lo que gustaría realmente es que hubiera alguna que otra sorpresa más de lo que es habitual. ¿Alguien ha dicho 'remake' de Final Fantasy VII en Playstation 3'?

Por supuesto, tendremos también otras propuestas de ocio electrónico como los juegos para móviles, una industria en clara expansión en Japón. En un mercado donde productos como el iPhone se perciben como anticuados, y los teléfono móviles parecen pequeños ordenadores con pantallas panorámicas de 3 pulgadas, cámaras de varios megapíxeles y televisiones digitales integradas, se prevé una enconada lucha por conseguirse un hueco que reporte grandes beneficios.Será esta la feria del cambio en el juego electrónico. No hace falta ni planteárselo. Una pequeña consola blanca de sobremesa nos responde contundentemente. El panorama ha cambiado radicalmente en unos meses y parece que esto ha animado a la industria, sobre todo en Japón. Yo por mi parte espero grandes anuncios en la feria. Quiero ver como realmente cambian los videojuegos. Quiero propuestas innovadoras. Quiero más.

Todos estos pensamientos me hacen abstraerme un momento de la preciosa vista que admiran mis ojos. El panorama de la torre de Tokio es el marco ideal, sí, pero a unos kilómetros de distancia me espera el Makuhari Messe, el Tokyo Game Show. Pero eso, amigo lector, es otra historia. Una historia que os contaremos, con todo lujo de detalles, aquí en vuestra revista. En MeriStation. Saludos desde Tokio.