Fury

Llegará a finales de año un nuevo y ambicioso MMORPG, desarrollado por Auran, que pretende aportar la agilidad de un FPS al género del RPG sin perder sus señas de identidad. Su nombre es 'FURY' y su propósito ser la próxima evolución del multijugador masivo.

Poco a poco se van desvelando nuevos detalles sobre Fury, un MMORPG que abandona el clásico sistema de lucha del género para introducir combates completamente en tiempo real, donde la habilidad del jugador será un factor tan importante, e incluso más, que el nivel de nuestro personaje.

En Fury también se potencia la interacción con otros personajes, ya que para subir nivel no será necesario matar cientos de arañas gigantes, lobos o demás enemigos secundarios típicos de este tipo de juegos. Todo dependerá en exclusiva de los jugadores que habiten el servidor, convirtiéndose éste en un campo de batalla donde 64 jugadores tendrán que luchar por ganar experiencia, nuevas armas, oro, magias o armaduras.

En Fury lo más importante es el combate y sobre ello se cimentan todos los elementos del juego. Las Arenas son los lugares clave para ganar experiencia y habilidades rápidamente, mediante brutales combates.

Los diferentes retos se repartirán en diferentes 'arenas' donde tendremos que librar las más crueles batallas con el objetivo de hacernos más y más fuertes.

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Tampoco se olvida el factor exploración, aunque indudablemente se le da un protagonismo muchísimo inferior al de la mayoría de títulos del género. En Fury la exploración se centrará en encontrar nuevas escuelas donde aprender nuevos hechizos usando la experiencia adquirida, tiendas donde comprar nuevas armas y lugares donde aprender a usar las más de cuatrocientas habilidades que podemos utilizar durante el juego.

Claro está que en los diferentes parajes encontraremos tanto personajes no jugables, que tendrán más o menos peso en el juego, como a personajes controlados por otros jugadores en el servidor. Con todos ellos podremos hablar o negociar, aumentando la interactividad del título y evitando reducirlo a un mero puñado de combates.

Antes de entrar en cualquier Arena será esencial seleccionar una serie de habilidades. Esas serán las únicas que podremos usar durante la batalla. Aparte, únicamente una serie de 'power ups' jugarán a nuestro favor como comodines extra, por lo que es esencial elegir sabiamente cuáles serán nuestras habilidades iníciales.

El juego abandona cualquier tipo de sistema de turnos y se convierte en un juego de acción en tercera persona donde combinando las diferentes habilidades conseguidas y previamente seleccionadas deberemos eliminar a nuestros rivales. Dichas habilidades se dividen también en tres grandes grupos, las defensivas, las de curación y las ofensivas, eligiendo nosotros en todo momento cuál queremos usar durante el combate, mediante el uso del ratón. El movimiento del personaje será totalmente libre durante combates y viajes, pero la elección de ataques y habilidades sigue dependiendo del clásico sistema de control con ratón clásico del género.

En las primeras partidas a nivel jugable Fury es algo engorroso, ya que resulta un poco complejo controlar el movimiento de nuestro personaje con el teclado (tanto su giro como los desplazamientos laterales), y por otra parte controlar la cámara, la selección del personaje que queremos atacar y el cambio entre los diferentes conjuros, con el ratón. Pero todo es acostumbrarse, y tras unas partidas la mecánica del juego se hace mucho más simple de lo que puede parecer.

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Además de todo esto el juego también incluye hasta 25 movimientos mortales diferentes. Estos movimientos son una especie de 'Fatalities' a lo Mortal Kombat, que consisten en ejecuciones letales que matarán de la forma más cruel a nuestros rivales.

Los efectos climáticos tampoco disgustan, y sin duda la peor parte se la llevan las animaciones, una de las asignaturas pendientes dentro de la mayoría de títulos del género.

La variedad de modelos y la personalización total de personajes y objetos que podemos encontrar durante el juego, sí es por otra parte digno de elogio, aunque tampoco nada revolucionario ni que se haya visto en otros juegos similares.

Tiene muy poco que ver con juegos como WOW o Lineage y aun así estamos seguros de que es un juego capaz de atraer a un mayor número de público al género, ya que los que aborrecían estos juegos por falta de interactividad, se verán ahora tal vez atraídos por ellos. Pero por otra parte seguro que muchos de los más puristas no lo verán con buenos ojos. Nosotros nos reservamos nuestro veredicto para la versión final. Hasta entonces seguiremos informando de las evoluciones de este interesante MMORPG.