El Tigre, bajo par

Diez años han pasado desde que EA añadiese a su saga de golf 'PGA Tour' el nombre del golfista revelación del siglo veinte. Desde entonces, 'Tiger Woods PGA Tour' se ha convertido en sinónimo de uno de los mejores simuladores de este deporte para todas las plataformas.

Sorprende ver como un género no muy prolífico en lo que a videojuegos se refiere, ha conseguido meter tres títulos en las listas de ventas de Wii durante sus seis primeros meses de vida. Primero fue la 'demo técnica' del Wiimote con su Wii Sports. Más tarde le acompañaría un titulo igual de arcade y desenfadado, que mejorando sus gráficos y alargando considerablemente su duración, hizo de Pangya Golf with Style uno de los superventas nipones. Finalmente, uno de los simuladores golfísticos con más solera llega a nuestras Wiis para saciar a los jugadores más tradicionales, Tiger Woods PGA Tour 07 (Para abreviar, TW07 a partir de ahora)

Analizar cada año la respectiva entrega de la saga TW se está convirtiendo en un trabajo más que duro. Su movilidad casi nula en lo que a la plantilla de jugadores se refiere, unos gráficos estancados que hacen difícil distinguir a qué entrega corresponde cada imagen del juego, un apartado sonoro prácticamente inexistente, un control que no ha cambiado casi nada desde sus orígenes... Espera, ¿Un control nada innovador? ¡Si este año se puede jugar a TW07 con el Wiimote! Parece ser que la saga acaba de conseguir ese soplo de aire fresco que le iba haciendo falta desde hace unos años.

El juego

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Antes de entrar en materia con lo que el apartado jugable nos ofrece, echemos un vistazo general al título. Prestaremos especial atención a la ingente cantidad de modos de juego disponibles, que harán que podamos disfrutar de él largo y tendido mientras esperamos a su próxima entrega.

Pero vayamos por partes. Lo primero que nos sorprende al meter el disco en nuestra Wii, es que antes de poder elegir ningún modo de juego o cualquier otra opción, deberemos completar un sencillo y rápido tutorial. En apenas cinco lecciones tendremos los conocimientos básicos para poder comenzar a jugar, aunque para sacarle todo el provecho, deberemos practicar durante horas, aprendiendo de los trucos que nos irán saliendo durante las pantallas de carga y de nuestra propia experiencia.

Una vez superado el tutorial, y ya en el menú inicial, tendremos todas las siguientes opciones a nuestra disposición. 'Partida rápida', donde podremos jugar unos cuantos hoyos con hasta cuatro jugadores, ya sean controlados por la CPU o por uno de nuestros amigos. 'My tour', donde podremos ver las estadísticas de nuestro personaje, sus records y los trofeos ganados. 'Editor', un completo editor de personajes en el que crear a nuestro jugador a nuestra imagen y semejanza. Aquí podremos cambiarle la apariencia física, comprarle nueva ropa o aumentar sus puntos de habilidad según vayamos ganando torneos. 'Extras', en esta sección iremos desbloqueando diversos huevos de pascua, desde información sobre torneos de golf, a videos y demás curiosidades. 'Opciones', para cambiar la configuración del juego. Podremos crear nuestras listas personalizadas con las canciones del juego, modificar el volumen de los sonidos y revisar los botones del mando entre otras opciones.

La sección 'Modos de juego' es tan amplia y con tantas posibilidades que se merece un apartado en exclusiva. A continuación os detallaremos las diversas modalidades de juego, con una breve explicación de cada una.

- Tiger Challenge. Viaja alrededor del mundo aceptando los desafíos que te propongan, para finalmente plantarle cara al mismísimo Tiger Woods.

- PGA Tour season. Completa una temporada entera de la PGA y queda lo más alto posible del ranking

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- Stroke Play. Una partida a 18 hoyos de hasta cuatro jugadores, el que tenga la puntuación más baja en su tarjeta es el que gana.

- Match play. Desafía a un rival. Durante los 18 hoyos, el ganador de cada uno se anotará un punto. Gana el que más puntos tenga.

- Bloodsome. Partida en grupos. Tu equipo lanza dos veces desde el tee de salida, y el equipo contrario elige con qué bola es con la que debéis jugar el resto de la partida.

- Greensome. Igual que en Bloodsome, pero en esta ocasión es tu equipo el que decide con qué bola es con la que siguen jugando.

- Skins. Cada hoyo es una apuesta, el jugador que al final tenga la tarjeta con la puntuación más baja se lleva el dinero de dicho hoyo.

- Alternate shot. Jugáis con una sola bola, el que la meta, se queda con el punto de ese hoyo.

- Battle golf. Juego de dos jugadores contra los adversarios de otros clubes

- Capture. Juego para dobles cuya finalidad es derribar cinco dianas antes que el adversario. Puedes robarle dianas a tu oponente y él a ti.

- One ball. Juego de dos a cuatro jugadores en el que solo se usa una bola. Para puntuar, en cada tiro tenemos que hacer que la bola aterrice en un círculo que se va haciendo más pequeño conforme nos acercamos al green.

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- Team one ball. Igual que One ball, pero jugando por equipos.

- Skills 18. Juega 18 hoyos como en Stroke play, solo que esta vez para conseguir más puntos, deberás hacer pasar la bola por unos anillos dispersos por todo el escenario.

- T-I-G-E-R. Una competición para ver quien lanza la bola más lejos con un solo golpe. El perdedor de cada ronda 'ganará' una letra, el primero que consiga las cinco que componen la palabra Tiger pierde.

- Target. Tienes veinte bolas para acertar en los objetivos. Consigue la máxima puntuación.

- Target2Target. Aquí puedes ir a por las dianas o a por los blancos móviles. Cada uno tiene diferentes puntuaciones.

Dieciseis tipos diferentes de juego en un título de golf son una cantidad más que notable, que harán que la vida de este juego sea muy larga hasta finalizarlo al 100%.

Y no es solo en los distintos modos de juego donde abunda la cantidad, ya que gracias al dinero que consigamos en los torneos y demás fases, podremos acceder a la tienda, donde tendremos cientos y cientos de complementos con los que vestir a nuestro personaje. Camisetas, pantalones, gorras, zapatillas... Si no nos bastase con el completo editor de personajes, aquí tendremos otro sitio en el que pasar horas personalizándolo aún más.

Sin tener en cuenta a los personajes creados por nosotros, el juego también cuenta con 34 de los más prestigiosos golfistas del momento (Alguno de ellos ficticio), con jugadores de renombre como Stuart Appleby, Luke Donald o Colin Montgomerie, que cuentan con unas representaciones tan fidedignas, que son casi una copia digital de los originales. Una pena que no hayan incluido al español Sergio García.

Gráficos

Como ya hemos comentado, aquí el juego es donde peca de continuista. Ya que los escenarios en los que podremos jugar, pese a ser los mismos campos de juego que en la realidad, y estar representados palmo por palmo, no tienen apenas cambios respecto a entregas anteriores. Difícilmente podremos saber si estamos jugando a la versión 06 o 07 con solo ver un green o un paisaje.

Otro de los deslices gráficos del juego lo podremos observar después de ver cómo nuestro jugador golpea la bola. El Motion capture hace que los movimientos de celebración o de enfado sean mucho más realistas, pero aun así se sigue notando que son gestos 'precocinados', sensación que se ve acentuada dada la poca expresividad de los rostros.

Lo que sí que hay que agradecerle a los chicos de EA es el trabajo ofrecido en la topografía de los niveles. Cada pendiente, cada bunker, cada curva... Todo esta situado exactamente donde esta en el campo original, y esa completa documentación en los escenarios es un esfuerzo más que agradable y que los verdaderos aficionados al golf agradecerán.

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Por lo demás, no esperéis encontraros ninguna maravilla gráfica. Ni el césped es un prodigio visual, ni los fondos (los escenarios con casas, sobre todo) están muy cuidados, ni los efectos del agua pasan del aprobado, ni los árboles o los espectadores nos dejaran boquiabiertos... Vamos, que no veremos nada que no hayamos visto ya en PS2.

Sonido

Aquí tenemos otro de los puntos mejorables del juego. Respecto al apartado sonoro en los menús o en las partidas arcades no hay queja. Canciones electrónicas que casi rozan el chill out, muy agradables aunque sean solo instrumentales. Todo impecable, como nos suelen tener acostumbrados los de EA.

En cambio, durante las partidas 'serias' será donde el apartado musical y de efectos sonoros nos dejará más decepcionados. Las partidas las jugaremos sin ningún tipo de música ambiental o de sonido que no sea el del agua de un río, el viento, los pájaros o los gritos de los espectadores. Hasta aquí vale, es un simulador de golf y necesitamos tranquilidad para calcular la jugada, pero de ahí al completo autismo sonoro hay un gran trecho, ya que ni las eventuales voces en inglés de los comentaristas llenarán ese vacío.

Y es durante un torneo, cuando fallemos un golpe o lo acertemos, cuando más evidente será el tropiezo sonoro, dado que acabaremos hasta los mismísimos Woods de las cuatro exclamaciones de alegría o de decepción enlatadas que nos bombardearán constantemente desde el público. ¿Tan difícil era grabar veinte tipos diferentes de gritos para que no fuesen tan repetitivos?

Jugabilidad

Por fin llegamos al apartado con más chicha de cualquier análisis de un juego de Wii. Si la next-gen 'potente' debe demostrar en cada título que su máquina es la que dispone de los mejores gráficos, Wii, que decidió encaminarse más hacia la innovación del control de su mando, debe demostrar que sus juegos son los que disfrutan de la mejor jugabilidad del mercado.

En TW07 nos encontramos un control que pese a lo sencillo que podría parecer, nos otorga todos los elementos necesarios para tener una jugabilidad de lo más completa. Con el Wiimote podremos ejecutar la totalidad de acciones necesarias, eso sí, jugando de pie y emulando hasta en el más mínimo detalle lo que sería un swing real en el campo de golf. Pero si no tenemos ganas de jugar levantados, estamos cansados, o cualquier otra excusa que se nos ocurra para jugar desde el sillón, también podremos jugar con el nunchaku conectado al Wiimote, ya que gracias a su stick golpearemos la bola de una forma más tradicional, como ya habíamos visto en otras plataformas como PS2.

Las acciones a realizar para jugar son sencillas y efectivas. Con el botón B pulsado, y ejecutando un buen swing, golpearemos a la bola, dependiendo la fuerza de nuestro golpe de la intensidad con la que hayamos realizado el gesto. Aquí no hay barras de potencia como en Wii Sports, solo un porcentaje que nos indicará la fuerza del golpe.

Con el botón A veremos un círculo en la distancia, que es la zona de incertidumbre en la cual debería caer la pelota si golpeamos con una fuerza del 100%. Con el botón B pulsado, mientras vemos esa zona de incertidumbre, podremos mover ligeramente el círculo, adaptando más a nuestras necesidades el dónde queremos que caiga la bola.

Durante el golpe, podremos girar el Wiimote hacia un lado u otro para darle más efecto a la bola, y así conseguir un hook o un slice. De todas formas, y si ese efecto no nos pareciera suficiente, mientras la bola este en el aire, y tras presionar una dirección en la cruceta direccional, podremos dar vueltas con el Wiimote y hacer que la bola gire hacia ese sentido para que al botar salga disparada en esa dirección.

También podremos practicar el golpe antes de ejecutarlo, pulsando para ello el botón - y haciendo como si de un golpe normal se tratase. Finalmente, y si somos de los que no nos gusta esperar, justo después de golpear la bola podremos pulsar el botón A, acelerando la acción hasta que lo soltemos o nos toque golpear de nuevo.

Según lo que hemos jugado, tampoco hay mucha diferencia a nivel jugable con Wii Sports (El único juego golf publicado en España hasta este TW07), aunque se nota como se le ha querido dar mucha más profundidad al apartado jugable. Esto, junto a las mejoras gráficas, su larga duración y su enorme variedad de modos de juego, hacen que de momento TW07 sea el enemigo a batir en su género.

Por desgracia, también tendremos que hablar de imprecisiones a la hora de jugar y de ver cómo se comportan los sensores de movimiento de Wii. Ya sabemos que calibrar los velocímetros en juegos donde el mando no para de moverse constantemente es un trabajo harto difícil para los programadores, pero en esta ocasión da la sensación que tampoco es que se hayan esmerado mucho en este tema.

El ejemplo más claro lo tendréis al ir a hacer un golpe largo. La variación de fuerza la reconoce bastante bien si golpeamos suavemente, fuerte, o muy fuerte. Pero es cuando queramos darle a la bola una potencia inferior al 70% donde veremos que es completamente imposible, ya que el mando no detectará nuestros movimientos. Así que si queremos que la bola haga un recorrido corto, no nos servirá hacer un golpe con el hierro 9 al 40%, si no que tendremos que hacerlo con un p. wedge al 75%.

Lo peor es que el problema realmente no radica en los golpes largos, donde podremos solucionar ese fallo recurriendo a un palo inferior, si no que donde de verdad maldeciremos al Wiimote (o mejor aún, a quien lo programó en este juego) es en el green. Es en esta zona donde la precisión debe ser milimétrica para que no convirtamos un eagle en un boogey, y por desgracia, es en esta zona donde se deben hacer los movimientos más suaves con el palo. Os imagináis el problema, ¿No? Exacto, más de una vez tendremos que golpear con más fuerza de la necesaria para que reconozca el golpe y pasarnos del hoyo, o cuando hagamos una de las varias repeticiones suaves en las que no reconocerá el movimiento, los sensores se confundirán y lanzarán la pelota justo mientras todavía estamos preparando el golpe. Un verdadero suplicio.

A favor:

En contra: