Demon Chaos, Impresiones

A finales de agosto de 2005 Genki anunció el desarrollo de un nuevo integrante en el sistema de juego de acción masiva que popularizó Dynasty Warriors. Bajo el nombre de Ikusa Gami, que se traduciría como "Battle God", se nos llevaría a controlar a un Dios caído en el año 1543 de la era de Nobunaga, en Japón. Hasta ahí podía parecer un producto normal, pero su máxima premisa era poner en pantalla de forma simultanea a más de 65.000 tropas de enemigos. Ante las primeras imágenes que lucían un aspecto realmente bueno, este dato se hacía casi imposible en un sistema tan explotado como PS2, antojándose más como una utopía que únicamente podría encontrar buen fin en la nueva generación de consolas con títulos como N3 para Xbox 360.

Un mes después se llevó al Tokyo Game Show 05, donde pasó desapercibido, hasta su salida en Japón en noviembre del mismo año. Las promesas se cumplieron. Genki y su estudio de desarrollo NewPro habían logrado transportar al campo de batalla a miles de tropas de forma simultanea. Y ahora, mediante Konami, el mes de marzo es el elegido para ponernos a los mandos de Inugami en España. Pese a que ha pasado tiempo desde su salida, y con una versión PAL beta en nuestras manos, os adelantamos cómo se jugará a Ikusagami, renombrado para su comercialización en occidente con el nombre Demon Chaos.

Humanidad vs. Bichos
Estamos en al año 1543 de la era de Nobunaga. En el corazón de Japón, oleadas de demonios han emergido desde el lago Shinshu Suwa y han sumido al mundo en una época de caos, desesperación y guerras. Sólo un elegido, en este caso una joven sacerdotisa llamada Yasaka Aoi, es capaz de devolver la tierra a una época de tranquilidad. Tras llegar al templo sagrado siendo perseguida por las criaturas, Aoi invoca al Dios InuGami, que desciende a la tierra para sellar a los demonios. Y así comienza esta épica aventura que nos llevará a recorrer paisajes de todo tipo mientras acabamos con todo lo que se nos pone delante.

El modo historia empieza con esta básica premisa mediante una notable secuencia de introducción similar a la del anime Inuyasha y continua mediante cuadros de texto más típicos. Todo el juego se basa en la misma premisa: coger a Inugami y acabar con miles de tropas. Así, la primera misión se nos introduce bajo la simple descripción del regreso de la pareja a Mikawa, mientras que Takechiyo Matsudaira ha sido tomado como rehen por parte del Clan Imegawa. Nosotros, como mediadores, deberemos ir al cambio de batalla para rescatar a Takechiyo y escoltarlo a su hogar.

Inugami también podrá equiparse nuevas armas o recoger power ups del mapeado. Su mayor poder será, de todas formas, liberar el Spirit Force y explotar en una furia sin igual que acabará con todos los enemigos de la pantalla. Esta energía será mejor guardarla para momentos en los que la gráfica y el mapa, situados en esquina superior derecha, muestre un montón de puntos rojos. Cuando estemos en plena marabunta, liberar la técnica y empezar a repartir golpes será lo más sensato. Hasta combos de 10.000 enemigos podremos hacer.

Pese a que sólo encontramos dos (frenar o avanzar), Inugami podrá crear toldos elementales (Pilares Sagrados) para curar a los aliados, lanzar bolas de fuego contra puertas y barricadas, etcétera.