Introducción
Hace ya unos cuantos años, allá por la década de los 90, el fenómeno tamagotchi llegó a nuestras vidas. En aquellos tiempos supuso una auténtica revolución. Todo el mundo tenía uno, y pese a lo limitado de sus posibilidades de juego -únicamente a cuidar del tamagotchi, alimentarlo, hacerle feliz, y limpiarlo-, marcó un hito en el entretenimiento portátil. Como cualquier moda masiva, el tiempo hizo estragos y acabó desaparecieron de las manos y bolsillos de los niños españoles y de todo el mundo.
En 2004 volvieron y con mucha más caña que antes, se había ampliado el modo de juego a dos jugadores, así que si poseíamos uno, y teníamos algún amigo con uno de estos, podíamos hacerle visitas, y ¡hasta tener hijos! Pero el reflote de este fenómeno no fue tan brutal como la primera vez que salieron al mercado, aunque éste tuviera muchísimas cosas más para hacer, el factor novedad se había desvanecido.
Ahora llega a nuestras tiendas "Tamagotchi Connection: Corner Shop" el sucesor de nuestras antiguas mascotas virtuales con muchas más posibilidades y cubierto por un gran colorido y el aliciente táctil. Ya no sólo hay que cuidar a nuestra criaturita, podemos decorar su hogar, comprarle ropa y hacer que desarrolle muy diversas profesiones.Gráficos
Los gráficos son sencillos, trazos básicos que buscan intencionadamente ese aspecto desenfadado, como si parecieran recién dibujados por un niño. Hasta el punto que sólo cuatro líneas forman la habitación donde habita nuestro tamagotchi. Llegará un punto en el que ya sabremos lo que va a suceder, qué pantalla vamos a visualizar o qué colores serán los que vienen a continuación. Por supuesto se trata de un título con un target muy definido hacia los más pequeños, lo que no justifica que su apartado visual quede en pañales en comparación con otros cartuchos de DS.
Lo que sí podríamos destacar de los gráficos es que son muy graciosos. La habitación virtual del tamagotchi puede terminar siendo un caos dependiendo de cómo se monte. Las tiendas están hechas todas con mucha gracia. Los compradores que vienen a tu DS pueden encontrar seres de todo tipo, tales como un tamagotchi normal, una cereza, una oveja, un mafioso, una niña pija
Hay muchísima variedad de personajes y todos muy graciosos.
Se ha apostado tanto por la sencillez, por ofrecer un cuidado de tu mascota tan intuitivo, que el resultado peca de lineal y repetitivo. Encontraremos pocas pantallas, el menú de inicio, la habitación del tamagotchi, el menú de elección de tienda y las tiendas, cada una de ellas distinta, y con mucho colorido. Cuando llevéis un rato jugando sentiréis cierto dejá-vù rondando por vuestra cabeza.
No hay voces normales en los personajes, sino todo lo contrario, las voces son estilo animal crossing. La pega es que este idioma inventado apenas tiene en su vocabulario un par de palabra, no cambia ni el tono de voz, ni el timbre, todo el tiempo es monótono. La opción más aconsejable si vamos a pasar un buen rato frente a la Nintendo DS es bajar el volumen al máximo o como opción B acaban con un estruendo timpánico digno de acudir a un otorrino. La música tampoco es digna de mayores halagos, hecha para rellenar. De nuevo, se asume lo básico en su desarrollo, opción aceptable por parte de sus creadores, pero no por ello vamos a dejar de ser justos y afirmar que el trabajo en este apartado ha sido mínimo. No es ni una música pegadiza, ni tan siquiera agradable al oído por lo cansino de su repetición. Encontramos varias melodías distintas, con varios ritmos, pero no muy distintos.
Jugabilidad
Encontraremos dos modos para jugar: cuidar el tamagotchi y dedicarnos a nuestra tienda. Una habitación virtual donde cuidar de nuestro tamagotchi, en ella podremos colocar muebles, accesorios, cambiar el suelo y las paredes. También es donde alimentaremos a nuestra pequeña mascota, le pondremos distintas vestimentas
En esta habitación encontraremos un menú que es desde donde compraremos todo lo que queramos tener. El otro modo que encontramos para jugar, es cuidar de nuestra tienda. En ella nos irán apareciendo compradores que nos informarán de lo que quieren comprar. Tendremos que satisfacer sus necesidades lo mejor posible porque ellos son los que nos pagarán dinero dependiendo de cómo le demos el producto. Los compradores nos pondrán nota en cada venta.
Encontraremos bastantes tipos de tiendas. Las de salida que son una floristería donde haremos ramos de flores y los decoraremos, y la pastelería, ésta ya con un nivel mas difícil de juego, pero tiene la misma finalidad. Encontraremos también joyería, tienda de complementos, salón de maquillaje, tienda de comida, el dentista, bar musical
y muchos mas negocios que ya iréis descubriendo.
El juego es bastante fácil, los minijuegos que encontraremos en cada una de las tiendas están dirigidos a publico de todas las edades, pueden jugar tanto los más pequeños de la casa como los mas mayores, aunque seguro que los infantes lo disfrutan más. En cada una de las tiendas lo que tendremos que hacer son minijuegos para ir creando el producto que el cliente nos pide.
Este juego podríamos compararlo utópicamente con Nintendogs, puede dar mucho de sí, pero una vez terminamos de ampliar las tiendas, y de conseguirlas todas, los únicos objetivos del juego son hacerse con todos los objetos que no hayamos comprado antes. El título de Nintendo se muestra más completo, haciendo un mejor uso de las opciones gráficas, táctiles y de intercomunicación entre máquinas, además del plus de los cachorritos, visualmente muy atractivos.
Tamagotchi: Corner Shop incluye opciones de WiFi local, pero comparándolo de nuevo con Nintendogs, éste le gana en la opción de poner la consola en modo sleep y si nos cruzamos con otra DS poder intercambiar regalos. Puesto que tamagotchi llega muchos meses después que los perros, bien podría soportar el servicio online de Nintendo WiFi Connection para jugar con el resto del mundo. Las posibilidades del juego aumentarían mucho, yendo a visitar a nuestros amigos, entrando en sus tiendas, convirtiéndonos en conejillos de indias