[E3] Call of Duty 3, Impresiones

La contienda más grande de la Historia continúa en un nuevo escenario interactivo con una calidad gráfica asombrosa. Con toda la experiencia acumulada en anteriores episodios de guerra, en Call of Duty, Finest Hour, Big Red One y Call of Duty, Activision presenta un nuevo juego que destaca por su altísima calidad gráfica e inmersión.

Ya sabíamos que Activision pretendía que Call  of Duty 3 se constituyese como uno de sus principales juegos insignia para este año. La presentación en el E3 había levantado mucha expectación entre seguidores de la saga, y hasta que no pudimos ver con nuestros propios ojos un adelanto de lo que se nos vendrá encima el próximo otoño, el poco escepticismo del ambiente no desaparecía del todo. Una primera impresión es que si Activision no ha conseguido cien por cien producir un producto de sobresaliente, ha estado extremadamente cerca. Nos encontramos ante lo que podría ser el juego del año, con una calidad gráfica, sonora y de inmersión, más que sobresaliente.

Entrar en Call of Duty 3, aunque suene a tópico, es lo más cercano a entrar en la guerra. Sentiremos las mortales balas trazando el aire y silbando a nuestro alrededor en un callejón asfixiante, lleno de humo y cascotes cayendo de las casas, escuchando gritos en alemán y aterrados ante el terrible sonido de las orugas de un panzer por las proximidades. Los aviones surcan el cielo a tan baja altura que nos sobrecogen con el ruido de sus motores y el aire que mueven bajo ellos. Las bombas caen indiscriminadamente y vemos cómo un disparo de algún tirador oculto alcanza a nuestro compañero, a tan sólo dos metros de nosotros… ¿Por qué él y no nosotros...?

Es difícil racionalizar la situación ante esta maravilla gráfica y olvidar que estamos ante un juego. Las nuevas generaciones van a fusionar realidad con ficción de tal modo que vivir cualquier experiencia de una manera semi-real estará muy pronto al alcance de todos.

Los escenarios visitados están pulidos hasta en el más mínimo detalle. No habrá texturas repetidas ni de un solo color. Adiós a los colores planos en determinados muros o suelos. Todo parecerá próximo y podremos incluso sentir cómo tocamos su superficie rugosa. Por ejemplo, un muro derruido está formado por distintos polígonos estáticos que forman los trozos de pared en el suelo, huyendo de las clásicas texturas que se repiten en escenarios de otros grande juegos. Esto recuerda mucho a Call of Duy 2, aunque el acabado de este nuevo capítulo está, sorprendentemente, mucho más definido que lo que nos deslumbró en aquel.

Los modelados de los personajes roza la perfección, aunque se mantiene similar a la vista en Call of Duty 2. Los enemigos no parecerán primos, sino que tendrán diferencias más o menos visibles, aunque siempre dentro de ciertos patrones. Las texturas del juego son de lo más realista jamás visto, aunque habrá que ver más adelante misiones fuera del entorno urbano para poder valorar globalmente. Las luces y sombras han sido tratadas con mimo y denotan un gran esfuerzo detallista para no desmerecer el trabajo de los diseñadores. Unas buenas texturas con una mala iluminación no sirven para nada. Activision fusiona perfección con detallismo en un cóctel explosivo, nunca mejor dicho. Además, podremos alcanzar a enemigos parapetados tras muros débiles o barricadas, destrozando su protección o simplemente atravesándola.

En cuanto a física, por lo que hemos visto, el nuevo motor gráfico empleado muestra muchísima suavidad a la hora de realizar cualquier acción. Movernos, caer al suelo, apuntar y disparar, atacar cuerpo a cuerpo a otro personaje... De momento no podemos valorar la interactividad en los escenarios, pero sí en la lucha cuerpo a cuerpo contra el enemigo. Sentiremos su sudor, y casi su olor, cuando lo tengamos pegado a la nariz luchando para ver quién de los dos muere. La suavidad de estos movimientos bruscos y la calidad en las aristas y ángulos, es estupenda.

El juego presentará diversos caminos a elegir por el jugador para una misma situación. Desde el clásico flanqueo a lo BIA, hasta sorprenderles por la retaguardia o atacarles de frente con un asalto directo. En próximos análisis veremos este punto con mayor detalle, una vez que podamos disfrutar de todos los niveles.

El apartado sonoro es estremecedor y sacado de la época. Los disparos, pasos sobre los escombros, zumbido de aviones, ruido de tanques, golpes, caídas,… son nítidos y se relacionan perfectamente entre sí, de modo que si tres o cuatro coinciden a la vez, que será lo normal, lo escuchemos todo perfectamente. La música está a la altura de la aventura épica poniéndonos la piel de gallina en más de una situación.

Es pronto para evaluar la IA, pero no sería coherente que Activision hubiese pinchado en este aspecto, dado el monumental trabajo gráfico y sonoro realizado. Es cierto que muchos juegos muestran tan sólo una estupenda fachada gráfica para desengañar luego con tediosas IA. La experiencia dicta que Call of Duty 3 estará dotado de una IA a la altura de los tiempos actuales, con enemigos trazando estrategias contra nosotros sobre la marcha. No obstante, y para no pillarnos los dedos, lo dejamos sólo en una hipótesis que esperamos se cumpla. Activision en este punto nos tiene bien cuidados.

Call of Duty 3 estará disponible para todas las plataformas (PlayStation 3,Wii, Xbox, PlayStation 2 y Xbox 360), aunque lógicamente sólo se podrá sacar todo su jugo gráfico y sonoro con una Xbox360 o una PS3 aderezadas por un buen equipo medio de sonido.