Un francotirador polivalente

'Battlestrike: Call to victory' es el tercero, y por el momento último, juego de la saga Battlestrike. Esta saga nos ha venido ofreciendo durante el 2005 una serie de juegos basados en la tan de moda Segunda Guerra Mundial. Esta vez nos metemos en la piel de un francotirador estadounidense que acude allí a donde le necesitan. No nos equivoquemos, que seamos tiradores de larga distancia no significa que en el juego no tengamos que estar siempre en primera línea.

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El juego no presenta nada nuevo, pero seguramente su PVP de 14,95€ nos haga echarle un ojo. Veamos si merece la pena.

De hecho aunque comenzamos el juego lanzándonos en paracaídas sobre tierras enemigas, un clásico, poco a poco iremos perdiendo compañeros y realizando las misiones de manera más solitaria. Acabaremos realizando las misiones de un batallón nosotros solos. Digamos que seremos algo así como el chico de los recados, siempre nos tocará salvar la papeleta.

Los escenarios, sus nombres más que nada, tienen reminiscencias históricas. Por ejemplo, tendremos que recorrer Arnhem o defender Bastogne. Misiones que todos los aficionados a este género conocerán al dedillo, pero que en 'Battlestrike: Call to Victory' no tendrán mucho de corriente debido a la dudosa documentación de los desarrolladores. Lo que unido a otros aspectos que luego se comentarán, hace que la inmersión en el juego sea bastante nula. Y lo que más nos acabará molestando es el final de la historia, la cual nos deja colgados en medio de la campaña.

Aunque eso sí, la variedad es amplia. Escoltar convoys, ir a toda velocidad montados en un jeep mientras eliminamos enemigos, evitar el derribo de un puente, ir a buscar suministros… El juego aunque se limita a ser un mata-mata lineal,  nos ofrece una gran variedad de misiones.

Nuestro fiel compañero será el rifle Springfield M1903, arma principal e indiscutible del juego. Apoyado eso sí, por bazookas, metralletas o granadas, según la situación lo requiera.

Pero lo que más llama la atención son las ciudades y los escenarios. Hay algunos bastante bien recreados, con sus limitaciones pero creíbles. Sin embargo, el aspecto general de los escenarios es totalmente vacío y con casas hechas con cubos de Lego, cuadradas a más no poder. Eso unido a la constante niebla y que el juego es totalmente lineal, es decir un arbusto es una barrera totalmente infranqueable, no resulta muy agradable

Las animaciones no van mucho mejor, los enemigos apenas tienen un par de movimientos: correr, esquivar lateralmente y arrodillarse para disparar. Y para de contar. Además que no es que estén muy bien resueltos.

Seguimos con el problema de la solidez de los objetos. Por poner un ejemplo: hay una misión en la que estamos atrincherados, pues bien, las ráfagas, o al menos los destellos que vemos al disparar, no aparecen de la boca del cañón del arma correspondiente, sino que aparecen en el alambre de espinos de la trinchera.

Pero el problema más gordo del juego es el comentado anteriormente, su linealidad. No porque un juego lineal no pueda ser bueno, sino porque habrá veces en los que no sabremos que hacer. Hay zonas que se suponen cortadas pero que con un par de saltos podremos sortear, y visitar todo el nivel vacío de enemigos. Lo cual resulta un tanto mosqueante al no saber si la ciudad esta vacía porque te van a meter un susto de muerte o porque te has metido por un sitio por el que los programadores no querían que te metieses. Al final tocará volverte a recorrer todo el escenario para averiguar que el objetivo estaba al comienzo del mapa.

Y por supuesto, si esto nos puede ocurrir un par de veces sin querer durante el juego, no hay que decir la de parajes desérticos que podremos visitar si lo vamos buscando. Además como es de suponer, si por algunos lugares que no deberíamos de poder pasar podemos, hay multitud de lugares en los que nos podremos quedar atrancados. En algunos casos con una buena dosis de paciencia y dando saltos podremos evadirnos, pero en alguna que otra ocasión no quedará mas remedio que volver a la última partida guardada.

La banda sonora acompaña, incluso en algunos momentos pone énfasis a momentos de tensión. Aunque como los efectos, no es una joya que queramos tener en CD.

Y las voces en inglés, con subtítulos en castellano, están bastante logradas aunque no se dan en demasía. Se echan de menos esos gritos de rabia en medio del campo de batalla, o algún comentario de un compañero durante la misión.

Contaremos con un arma principal, el rifle de francotirador, y luego un arma secundaria que podremos cambiar por otras que nos iremos encontrando en el camino. Rifles, metralletas o bazookas, serán el tipo de armas que llevaremos como secundarias. Además portaremos con nosotros un puñado de granadas, y cuando nos pasamos cierto número de misiones obtendremos unos binoculares. Cuando veamos un tanque o carros blindados, sólo tendremos que mirar por ellos y pedir refuerzos aéreos para deshacernos fácilmente de la amenaza. Es una pena, que no los podamos usar siempre que queramos…

El juego no es muy realista, ni creemos que lo pretenda. Por ejemplo, las balas no pierden velocidad si disparamos a mucha distancia. Algunos jugadores habrán probado juegos en los que si el objetivo está a cierta distancia, tenemos que apuntar bastante arriba de éste para que la bala no se quede por el camino. Pues bien, en 'Battlestrike: Call to victory', esto no ocurre. Ya podemos estar a 200 metros que si apuntamos a la cabeza, le daremos en la cabeza.

Aunque a la hora de apuntar con el zoom sí notaremos ciertos vaivenes, que podremos reducir agachándonos o tumbándonos, aunque en muchos casos no será necesario utilizar la mirilla ya que con la cruz que llevamos siempre es más que suficiente. Esto se debe a la constante niebla que nos acompañara durante el juego, niebla que el zoom no puede vencer, por lo que a casi todos nuestros enemigos los veremos a simple vista.

Si hasta ahora 'Battlestrike: Call to victory' parecía un juego con sus defectos pero bastante potable, hay un par de errores que fastidian todo el juego. El principal es el aspecto gráfico que aunque afecta a la jugabilidad ya lo comentamos en su sección, pero ahí otros que comentar a continuación.

Los enemigos son tontos. Por decirlo dealgún modo su Inteligencia Artificial es nula. La dificultad no reside en tener buena puntería, sino en saber dónde se encuentra el enemigo. Asunto fácil, ya que los enemigos siempre se encuentran en el mismo lugar, y poco se van a mover de ahí. Lo difícil es que al salir de alguna casa o zona no nos frían a disparos, porque es ahí donde juegan con ventaja. Saben perfectamente por donde tenemos que salir, y si tardamos mucho en encontrarlo seguramente acabemos muertos.

Además existe un error que acentúa aún más este problema, las balas atraviesan algunos objetos. Lo que quiere decir que podemos perder media barra de vida antes de darnos cuenta que nos están disparando a través de un tanque blindado. Cosa que nos ocurrirá en más de una ocasión.

El juego no es difícil, sin embargo estas situaciones y la enorme puntería que tienen los enemigos a niveles de dificultad altos, nos harán bajar un poco el listón. Ya que el juego no depende de nuestras habilidades en la mayoría de ocasiones.

Aunque la variedad de situaciones antes comentada y al tratarse de un mata-mata nos haga seguir jugando hasta acabárnoslo. Tiene sus errores, pero puede ser hasta cierto punto adictivo. Además aunque no cuenta con muchas misiones, la dificultad hace que el juego tenga la duración perfecta. Una pena que no tenga ningún modo multijugador, aunque sorprendentemente el archivo de texto que guarda nuestra configuración si tenga parámetros de ajuste para deathmatch o juego cooperativo. Tal vez fuese eliminado en el último momento…

Sin embargo y pese a todo lo dicho anteriormente, es un juego que puede resultar adictivo. Es un mata-mata directo, con una interesante variedad de misiones, que aunque no aumentan la jugabilidad, hacen que no nos aburramos de tener que repetir siempre lo mismo. Además su dificultad nos hará tirarnos un buen rato intentado pasárnoslo, si no jugamos en modo fácil claro, aunque la mayoría de este tiempo estemos lidiando con problemas del juego y no con la pericia de los que diseñaron la misión.

Y aunque existen propuestas mucho más interesantes, al menos éste es de los más baratos.

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