Possession

Cuando John Keating (El club de los poetas muertos) se subió a la mesa de profesor para recomendar a sus alumnos que vieran el mundo desde una perspectiva diferente, mostró de manera sucinta la clave para no caer en la rutina y enfocar la vida hacia la creatividad y el optimismo. El consejo no cayó en saco roto, pues de entre sus pupilos de fuera de la pantalla parece ser que se encontraban los chicos de Blitz Games, antiguo Interactive Studios. Con ellos, el a priori previsible y por lo tanto manido género que acostumbra a mostrar zombis en pantalla adquiere ahora una nueva dimensión, gracias a la propuesta con la que imbuyen de un nuevo talante al desarrollo de todo survival horror. Pero…

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¿Un Pikmin con zombis?

Possession, sin embargo, no puede formar parte del grueso de este tipo de juegos por una sencilla razón: esta vez no nos abriremos paso por callejones ni por estrechos pasillos acribillando a todo muerto viviente que salga a nuestro paso, sino que seremos nosotros los que nos arrastraremos gimiendo y persiguiendo a civiles para atraerlos a nuestra triste existencia. Nuestro pellejo de zombi recibirá las órdenes de un líder, el Esclavizador, que se encargará de saciar su sed de venganza hacia quienes le sumieron en su actual estado, el de cabecilla de un nuevo ejército de las tinieblas.

En dos escasos párrafos ya tenemos dos referencias cinematográficas, pero esto se queda corto comparativamente ante la cantidad de detalles y situaciones que los desarrolladores han extraído directamente de las películas de zombis a las que son aficionados. Y es que para hacer una cosa bien no hay nada como ser un apasionado del tema y trasladar al mundo del videojuego la angustia y el caos que desprenden cintas como El amanecer de los muertos. Sin embargo, el inicio del juego bebe más de 28 días después por una apertura a la que inevitablemente estamos ya más que acostumbrados. Comprobadlo por vosotros mismos.

Todo comienza el día en que cuatro activistas irrumpen en el laboratorio de una conocida empresa. Por accidente, sufren en sus carnes un experimento biológico fallido que provoca la expansión de un virus y la consiguiente mutación de sus cuerpos infectados. Al sufrir el proceso degenerativo que los convertirá en zombis, uno de ellos, el protagonista de la historia, el Esclavizador, conservará la suficiente lucidez mental -aunque suene a paradoja- como para dirigir a sus nuevos compañeros, los otros tres, hacia la conquista de la ciudad. De paso, podrá asegurar la destrucción total de la empresa que le ha transformado en un ser inmundo. Arrasando con todo lo que encuentre y convirtiendo a base de mordiscos a todos los infelices que se crucen en su camino, el número de zombis a los que desplegará por la ciudad y que le obedecerán ciegamente será considerable.

Hazme tuyo

El título del juego, Possession, hace referencia a la habilidad del Esclavizador- aparte de para organizar y dirigir a sus huestes de ultratumba- de meterse en el cuerpo de cualquiera de los zombis que estén bajo su dominio, y de este modo conseguir su propósito en 'vivo' y en directo. Un propósito tan simple como divertido: controlar a todos los muertos y llevar el caos y la ruina a la ciudad, que será por lo menos tan grande como la que vimos en Grand Theft Auto: Vice City. Esta ciudad rectangular de casi 8 kilómetros estará compuesta de tres distritos, a los que hay que añadir las afueras y el centro. En cada una de las secciones la libertad de movimientos será total, e irá ampliándose conforme avancemos. En las calles, además de gente corriente huyendo de un lado para otro, nos esperan militares, escuadrones especiales muy similares a los SWAT, y cómo no la policía, que no será tan incompetente como cabría desear. Juntos aunarán fuerzas para borrar del mapa facciones de nuestra hermandad de zombis.

Así pues, gracias al choque de nuestras hordas contra las fuerzas del orden, una ciudad americana con sus rascacielos, restaurantes y parques quedará pronto convertida en un espectacular escenario post-bélico repleto de fuego, escombros y cadáveres que pronto formarán parte de nuestras filas.

Nuestros amigos los zombis

La posibilidad de poseer uno de nuestros esbirros decadentes es la esencia del juego, la que más posibilidades reportará y la que más espectacular nos resultará, al poder ver en primera persona las caras de los pobres condenados que nos servirán de almuerzo. Por supuesto, dependiendo del estado del zombi al que poseamos, nuestra perspectiva podrá cambiar completamente. De este modo, si nos hacemos cargo de un zombi al que le faltan las piernas, tendremos una visión a ras de suelo un tanto incómoda, pero aún así será mejor que la que consigamos después de poseer a otro muerto viviente con el cuello partido, con el que veremos el panorama un tanto 'descolocado'.

Cabe destacar que no todos los zombis del juego serán iguales: habrá unas 5 clases, muy bien equilibradas, cada una con sus defectos y virtudes. Además del más estereotipado, el típico despojo humano al que estamos acostumbrados, tendremos otras cuatro versiones que presentarán una clara variación de atributos. De este modo, en circunstancias concretas, deberemos discernir cual de los no-muertos nos será de mayor utilidad, antes de poseer un cuerpo que no nos sirva para nada y los justicieros de la ciudad pongan fin a nuestra masacre.

Así pues, hay zombis que se mueven a mayor velocidad que el resto, pero a cambio no pueden llevar armas; otros que a medida que se descomponen se van hinchando, para finalmente explotar y esparcir gases y sustancias contaminantes; los hay que presentan dos fases de mutación claramente diferenciadas, máquinas de matar con la habilidad de escalar que atacan mejor en conjunto, pero no muy resistentes…y cómo no, no puede faltar el monstruo supremo, un legado de Némesis que mide una barbaridad y que como podéis imaginar está perfectamente capacitado para devastar. A cambio, no podrá propagar el virus.

Y llegados a este punto, conviene ahora hablar de los alardes que Possession mostrará gracias a estos zombis y que justificarán el porqué un juego de estas características ha tenido que esperar al salto generacional para irrumpir en el mercado.

Cómo dar vida a un zombi desde el ordenador

Posible futuro online

Un título de las características de Possession se presta mucho al juego en línea. Y no sólo por la posibilidad de controlar a cinco clases diferentes de zombis más el Esclavizador. Toda una ciudad pidiendo a gritos ser derruida por una horda enloquecida de muertos vivientes es un plato demasiado grande para comérselo uno solo, por mucho que nos ruja el estómago, y nada mejor que pegarse con unos amigos un festín de carne humana. Para el juego en red se contempla la posibilidad de añadir armas exclusivas para determinados modos de juego aún no desvelados, aunque todo apunta a que uno de ellos nos ponga en la piel de un civil que trate de evitar la mutación de los infectados por medio de antídotos. Si jugamos con civiles habrá que tener en cuenta que con Possession se acabó el factor sorpresa: antes o después, todo cuerpo inerte que veas en el suelo acabará levantándose inevitablemente para lanzarse contra ti. Así que coge rápidamente lo que pueda llevar encima antes de que sea demasiado tarde…y prepárate para enfrentarte a la masa de gritos y piel roída que pretende envolverte en la esquina siguiente, al más puro estilo Dead Rising. Blitz asegura que el modo online va a ser más angustioso de lo que alcancemos a imaginar.

Quiero ser un zombi

Es de agradecer que Possession esté anunciado inicialmente para la 360 y PS3, con versiones en lontananza para PC y Revolution, ya que es un juego que merece ser probado y la exclusividad quizá hubiera frenado su éxito por lo alternativo que resultará para algunos. La curiosa mezcla de género, a caballo entre la estrategia y el avanza y destruye, no deja de ser otro aliciente. La orgía de sangre está anunciada para 2007, así que jovenzuelos, a ver si como mínimo alcanzáis la mayoría de edad dentro de dos años para que luego ningún miembro de alguna asociación de padres os vea comprando el juego y se preocupe. Possession traerá cola seguro.

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