Shin Onimusha: Dawn of Dreams, Impresiones E3

Quince años después de la muerte de Nobunaga, su sucesor, Hideyoshi Toyotomi se ha alineado con las fuerzas Genma. Una nueva amenaza y nuevos héroes que toman el relevo de Akechi Samanosuke en la protección del pueblo japonés en un renovado Onimusha.

La primera trilogía Onimusha se cerró con la conclusión de Onimusha 3 pero Capcom ha decidido seguir adelante con la franquicia. Shin Onimusha, o Dawns of Dreams en occidente significa un punto y aparte dentro de la serie, con una nueva historia, nuevos personajes y un planteamiento con el que se ha intentado corregir los fallos endémicos que se presentaron en capítulos anteriores. Esta mañana lo hemos probado en la zona común del stand de Capcom, donde se encontraba el mismísimo Keiji Inafune, cosa nada habitual, con quien hemos podido intercambiar impresiones.

Volviendo a las novedades, la primera es la inclusión de una cámara libre que permite elegir la  perspectiva al gusto del jugador mediante el analógico derecho. Eso si, habrá momentos en el juego en los que la cámara se bloqueará "on the rail" y no será posible modificarla, aunque serán los menos y nunca en situaciones que interfieran en combate.

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El cambio de épocas temporales de Demon Siege se abandona, y la acción toma parte en un periodo exclusivamente, 15 años después de la muerte de Nobunaga en Honnoi. El protagonista de Shin Onimusha es Soki, un joven guerrero Oni que a los ojos del mundo es la última esperanza para frenar al ejército Genma. Para ello tendrá la ayuda de cuatro guerreros que se unirán a su causa. Uno de ellos, Yagyu Jubei, una chica llamada igual que el protagonista de Onimusha 2, también podía controlarse en la demo del E3.

El nuevo sistema de jugabilidad introduce la figura de un segundo personaje en la aventura, de forma similar a la que vimos en Samurai's Destiny, pero prescindiendo del sistema de regalos. Además, si bien el personaje secundario realiza sus acciones independientemente según su IA, podemos darle cuatro instrucciones básicas, ataque, defensa, ataque mágico y recoger almas.

Esto se hace mediante las cuatro direcciones del pad, cada una asignada a una orden. Por si fuera poco podemos cambiar en cualquier momento de personaje pulsando select. También existen combos duales, en los que participarán los dos, y donde la ayuda del secundario se torna esencial. Decir también que si uno de los dos muere, la aventura concluye.

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El control sigue siendo muy parecido, casi idéntico al de Onimusha 3. Se conserva el mismo sistema para fijar y encarar a los enemigos con el botón R1 que además hace que carguemos nuestro arma y aparezcan las características llamas bordeando el arma y también para esquivar a los enemigos con pasos y volteretas laterales. La guardia sigue en L1 y en L2 se ha habilitado un botón de cambio de estilos que no estaba en uso en esta versión pero que venía indicado en el control.

Cuadrado es el ataque normal, círculo la patada o manteniéndolo pulsado el ataque especial y triángulo el ataque cooperativo. Transformarse en Oni vuelve a estar disponbile, exactamente igual de la misma forma que en anteriores Onimusha, aunque la transformación es más similar al de Onimusha 3.

El sistema de evolución del personaje se ha reforzado. Ahora al subir de nivel a nuestro personaje obtendremos puntos de experiencia que podremos asignar a múltiples categorías correspondientes a la ficha de nuestro personaje. Los grupos principales son Ataque, críticos, guardia y absorb y dentro de cada uno hay entre diez y seis subcategorías que podremos subir de nivel según se ve en la fotografía.

Dawn of Dreams está más centrado en el jugador hardcore, ofrece muchas más posibilidades que cualquier título anterior de la serie y obedece a la tendencia, según Inafune-san, que cada  vez existen menos jugadores casuales o esporádicos.

Para jugar a Dawn of Dreams no hace falta ser un seguidor de la serie, ya que la historia es independiente, aunque existen personajes de otras entregas anteriores. Eso si, el toque violento de Shadow of Rome parece haberse trasladado también a Onimusha, por la dosis de violencia y chorros de sangre que pueden verse en él. Su lanzamiento está previsto para el 2006.

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