No nos hemos podido aguantar más. Al igual que Óscar Wilde podemos resistirlo todo... Menos la tengación, así que hemos importado la versión americana de Stranger's Wrath. os contamos que nos ha parecido la nueva obra de Lanning y compañía en nuestras primeras impresiones.
No nos hemos podido contener más. Como Óscar Wilde podemos resistirlo todo... Menos la tentación, así que hemos importado la versión americana de Stranger's Wrath y así poder contaros qué nos ha parecido la nueva obra de Lanning y compañía en nuestras primeras impresiones.
Puede pasar cualquier cosa cuando un tipo genial llamado Lorne Lanning y su equipo se sacan de la chistera un juego que no tiene casi nada que ver con los anteriores de la saga Oddworld. Además, supone un cambio tan radical en el género al que estábamos acostumbrados, que incluso cuesta creer que se trate de la franquicia. Vamos, que o bien sale un juego mediocre, o bien sale una Obra Maestra, sin medias tintas que valgan. Pero estad tranquilos, porque tras haber jugado más de la mitad de Stranger's Wrath, podemos pronosticarle un gran éxito y afirmar que nos encontramos ante uno de los juegos más divertidos, completos y originales de los últimos años, y sin duda alguna el mejor de la saga Oddworld.
Por lo que hemos podido comprobar Stranger tiene un componente de acción muy elevado, aunque se detecta cierta nostalgia de juegos anteriores en ciertas partes en las que la aventura y la búsqueda de personajes y objetos se hacen presentes, siempre de una forma retorcidamente divertida y original.
En Stranger nos vamos a encontrar un juego que consigue esta mezcla de sabores de una forma casi perfecta, y presume de hacerlo de una forma tan original como divertida y sorprendente. Cuando iniciamos el juego comenzamos el breve y necesario paseo por las habilidades de Stranger, así como por sus diferentes tipos de juego y formas de acabar con los enemigos. Stranger sólo dispondrá de un arma que carga munición poco convencional, ni más ni menos que animales vivos muy divertidos, aunque tendremos que saber en que momento seleccionar nuestra munición, ya que en multitud de ocasiones hay varias opciones para acabar con una horda de enemigos con muy malas pulgas.
Las animaciones de Stranger son muy plásticas, están muy bien entrelazadas entre sí y son totalmente apropiadas para la naturaleza del personaje, y su integración con el entorno es simplemente perfecta. Si decidimos jugar en primera persona parecerá que el juego está diseñado íntegramente en ese modo, y si decidimos jugar en tercera persona tendremos la sensación de estar jugando a un juego de plataformas muy bien acabado.
Ambos modos están combinados de manera perfecta, las transiciones de la cámara entre los dos puntos de vista es totalmente natural y en ningún momento nos ha incomodado o interrumpido en el juego, y añado, cómo se nota que Lanning y los suyos han dedicado mucho tiempo en el desarrollo jugable de esta joya lúdica. Moverse con Stranger por el fantástico mundo de clarísima inspiración en el oeste, con la inequívoca, original y delirante firma de Oddworld Inhabitants, es todo un placer, proporciona al jugador una sensación de libertad, que si bien no es ilimitada, es suficiente como para no agobiarnos jamás dentro de una determinada aldea o ciudad, aunque he de decir que algunos poblados, sobre todo al principio del juego no son demasiado amplios, quizá para no abrumar al jugador desde el principio.
Otro de los detalles importantes en la mecánica del juego es la barra de adrenalina de la que disponemos para rellenar nuestra barra de energía la cual, se irá gastando a medida que corramos sobre cuatro patas, o realicemos ataques de tipo meleè, hay que señalar que el uso inteligente de esta barra, y su uso mesurado nos permitirá reponer nuestra barra de energía en los momentos más cruciales. Más adelante en el juego y en las llamadas General Store, además de mejorar nuestras mascotas, podremos incrementar la velocidad con la que la barra de adrenalina se recarga y obtener una serie de accesorios como puños de acero para realizar ataques más poderosos.
El uso de las capacidades técnicas de Xbox se ven perfectamente reflejadas en la gran distancia de visión que tendremos cuando nos acercamos o alejamos de un poblado, o en el más que estable frame rate, que responde sin inmutarse a la cantidad de efectos visuales tales como explosiones, reflejos, sombras en el escenario en tiempo real, luces especulares, etc.. Desde luego ahora entendemos porque no se ha podido llevar a cabo, al menos de forma satisfactoria la conversión a PS2 que se anunció en su momento. También es digno de elogio la cantidad de elementos móviles en los escenarios del juego, desde molinos, hélices, puentes, vegetación, maquinarias industriales, carteles de publicidad, luces de neón en las ciudades, animales, y por supuesto los habitantes de los poblados... Todos ellos y muchos más convierten a Stranger's Wrath en un auténtico festín para los sibaritas visuales que, además, rebosa humor y originalidad.