Wario Ware Inc. Touched!
Sawara Made in Wario, o lo que es lo mismo, Wario Ware Inc. Touched!, ya está en nuestras manos. O mejor dicho en nuestras Nintendo DS, porque desde que nos hemos hecho con él no hacemos otra cosa que jugar y jugar a sus minijuegos. Aquí os dejamos estas impresiones con las que esperamos se os pongan los dientes muy largos...
Nintendo es de esas compañías que, cuando se lo proponen, son capaces de crear experiencias únicas que el jugador bien entendido sabe saborear como si de un plato preparado por un cocinero de categoría se tratara. Este Sawara Made in Wario es la última prueba que hemos tenido el gusto de disfrutar. Advertencia: si os ofrecen probarlo y no queréis quedar enganchados, mejor que no aceptéis la oferta. El último juego patrocinado por el antagonista de Mario es adictivo como él solo.
Quién no avisa...
Made in Wario para Game Boy Advance - o Wario Ware, como se le conoce fuera de Japón - es sin duda una de las sorpresas de esta generación. A veces las mejores ideas surgen de forma fortuita y se transforman en juegos de los que nadie tenía noticias antes, ni estaban amparados en campañas de publicidad pero que por su genialidad, por su capacidad de aportar algo nuevo, consiguen convertirse en títulos notables en ventas y sobresalientes en críticas. Y es que el mercado de los videojuegos, por fortuna, se sabe recompensar el talento.
Después del éxito de Made in Wario original para GBA apareció una versión para GameCube con algunos añadidos en el modo multijugador. Era un buen juego, pero quedó claro que la franquicia no había nacido para ser disfrutada en una consola doméstica. Su estilo de juego, basado en una sucesión de puzzles cortos de poco más de cinco segundos, contínua y cada vez más rápida, dota a la serie de un carácter que se ve potenciado por el hecho de ser portátil, al permitir diversión instantánea y no exigir una gran experiencia por parte del jugador.
Una nueva gallina de los huevos de oro
No es de extrañar que Nintendo haya decidido popularizar la saga. La prueba de ello son las dos nuevas entregas de la saga que han aparecido recientemente: Mawaru Made in Wario en GBA - Mawaru, en japonés, vendría a ser algo así como "Girar", debido a que esta versión utiliza un sensor de movimiento para participar en los juegos- y Sawaru Made in Wario para DS, el juego que nos ocupa . Sawaru, "Tocar", indica el estilo de juego que algunos minijuegos plantearán. Pero ya os decimos que "Tocar" no será lo único que tendréis que hacer...
Nada más aparecer el concepto de la pantalla táctil, era fácil imaginar que una de sus aplicaciones más obvias podrían ser los minijuegos. Muchos apostaron por un Made in Wario en DS desde el principio y así fue. En el E3 2004 una de las demos con las que se mostró por primera vez Nintendo DS al gran público era precisamente la de un nuevo Made in Wario y no decepcionó en absoluto.
Y es que la pantalla táctil parece hecha a medida para este tipo de juegos. En una de las pruebas tenías que "rascar" para que apareciera una moneda mientras que en otra tenías que usar el stick en forma de espada y cortar en el aire diferentes piezas de fruta.
Las posibilidades se antojaban casi infinitas, y el resultado final no ha decepcionado en absoluto. El ser uno de los primeros títulos de la consola y acompañarla en su mismo lanzamiento no le ha pasado factura, y podemos decir que Sawara Made in Wario es el título que más nos ha convencido de la parrilla inicial de Nintendo DS.
Desenfado visual
Gráficamente, no se desmarca de la línea de la saga y da cabida a todos los personajes ya conocidos como Mona, Jimmy o el propio Wario. El estilo pintoresco y colorido de los personajes es el mismo aunque para esta vez se han incorporado escenas intermedias algo más largas, que por poder quitarlas, no afectan para nada a la jugabilidad. Verlas, eso sí, siempre es divertido, pues algunas de las situaciones son ciertamente cómicas. La historia que componen, tal y como se espera de este juego, no tienen ni pies ni cabeza, una sucesión de hechos absurdos y divertidos sin más que parecen tener como punto de unión el concierto del grupo de Mona.
Casi todo el juego está realizado en coloridos 2D, aunque se han incorporado algunos elementos 3D puntuales. La funciones tridimensionales de la máquina están todavía faltas de un juego que les haga justicia, por lo menos hasta Metroid Hunters. Pero la verdad es que las dos dimensiones pega mucho más con la naturaleza del juego. Aunque no hay que descartar en un futuro que se invente un "Made in Wario 3D", seguro que encontrarían nuevas aplicaciones para algo así.
Originalidad al poder
Para esta ocasión no sólo se ha recurrido al stick, sino que algunos minijuegos hacen también uso del micrófono, usando su hasta ahora única aplicación: el soplar. Inflar globos, suspender objetos en el aire e incluso soplar en la oreja de modo sensual servirá para completar algunos de los desafíos que este título encierra. Por si fuera poco, se ha incorporado un modo para zurdos, sólo tienes que seleccionarlo en el menú y rotar la consola, por lo que podrás manejar cómodamente el stick con tu mano izquierda. Es muy reconfortante que Nintendo tenga en cuenta a todos los jugadores, no sólo al bloque mayoritario...
Al conectar el juego uno se encuentra en una especie de sala principal en 2D en la que aparecen tres personajes. Al seleccionar uno de ellos, por ejemplo a Wario, empezaréis a enfrentaros a algunas de las pruebas. A medida que las vayáis superando, conseguiréis desbloquear otros personajes y objetos con los que podréis jugar en cualquier momento, sin el estrés de estar limitados por tiempo como en los minijuegos que componen los desafíos principales. Estos objetos, entre los que podemos encontrar mesas de ping pong - que permiten que dos jugadores en la misma máquina puedan echar una partida -, pianos, relojes de precisión, despertadores e incluso fotos dedicadas - e interactivas - os mantendrán entretenidos durante un buen rato. Sin duda, el desbloquearlos a todos es uno de los mayores alicientes a la hora de jugar a este Sawara Made in Wario.
La estructuración de los niveles de cada personaje es la misma: con un número determinado de vidas, que dependerá del personaje que hayáis escogido, y con las que tendréis que intentar superar el máximo número de pruebas posibles. A medida que superéis pantallas el tiempo que se os otorgará será menor, por lo que tendréis las cosas más difíciles. Cada decena de fases, aproximadamente, os tendréis que enfrentar a una prueba especial, que en el caso de que superéis os otorgará, además de acceso a los siguientes niveles, una vida extra. Hay que decir que si no conseguís superar una prueba no tendréis que repetirla, sólo se os restará una vida, ganando acceso a la siguiente pantalla.
Remix de estilos
Cada personaje, por regla general, tendrá su propio estilo de pruebas, aunque algunos tan sólo se limitarán a presentar una selección de retos. Unos dependerán de la velocidad con la que muevas el stick por la pantalla, otros te piden precisión al tocar puntos concretos, en otras tiene que dibujar algo o borrarlo pasando con el stick por la zona precisa de la pantalla... Pero dentro de estos grupos hay una enorme variedad de pruebas, que no sólo son divertidas por sí mismas, sino que constituyen una gran fuente de aprendizaje para dilucidar como futuros juegos pueden aprovechar el interfaz de la máquina.
Por ejemplo, uno de los minijuegos te pone en el papel de un ninja lanzando shurikens, en la que se muestra la visión en primera persona con los dos brazos en posición de lanzamiento. Tienes que hacer el movimiento de lanzamiento con el stick de abajo a arriba en la dirección correcta para lanzarlo al sitio donde tiene que ir.
!Aprender es divertido¡
En otras prueba se te pide dibujar - o mejor dicho repasar -"kanjis" (ideogramas japoneses que constituyen sus palabras). Eso sí, el orden de los trazos, un aspecto fundamental para escribir correctamente en la lengua nipona, aquí se obvia, tan sólo prestándose atención al resultado final. Ojalá todos los profesores hicieran también la vista gorda...En cualquier caso, con el reciente anuncio de Nintendo de un diccionario de japonés, es fácil comprobar las potenciales funciones educativas de la máquina. Hay que decir que los diccionarios electrónicos japoneses son muy populares debido a las complejidades propias de los Kanji, su uso es mucho más común entre todo tipo de japoneses que por ejemplo los diccionarios españoles.
Minijuegos casi infinitos
Y hay más, bastantes más, hay un minijuego en el que tienes que meterle una especie de palillo en uno de los orificios de una nariz para que estornude, rascar la espalda de Wario e incluso de Mario, hacer explotar fuegos artificiales...
Algunos tan absurdos que no puedes hacer menos que reírte por su misma concepción, como el tener que despertar a personas durmiendo golpeando objetos, hacer cosquillas a dos hombres que intentan sostener con sus bocas un objeto y conseguir que les caiga, sintonizar correctamente una radio, empujar a un barco con vuestros soplidos, establecer un camino gracias al cual dos enamorados puedan encontrarse, ordeñar vacas, deshojar tréboles, ordeñar vacas, arrancar pelos, pintar uñas, acariciar a gatos, cortar mocos...
Incluso habrá minijuegos inspirados en clásicos de 8 bits de Nintendo Famicom, NES en nuestro país, que recuperarán momentos de Super Mario Bros o Zelda, entre otros, para plantear pruebas que tendrán un gran valor emotivo para todos aquellos jugadores que, en su momento, hayan disfrutado de esos títulos. Vamos, un montón de juegos, la mayoría de los cuales no estarán accesibles desde buen principio, sino que tendréis que avanzar para poder echar unas partidas a ellos.
A pesar de todos, hay cosas que se echan en falta, como la posibilidad de crear varios perfiles, o que, al menos, el jugador que haya conseguido una máxima puntuación pueda introducir su nombre. Quizá es debido a que en Nintendo consideran que los japoneses no van a dejar jugar a nadie con su consola, pero esperamos que esto se modifique en la versión europea de próxima aparición...
Conclusiones
Cada consola suele tener, en la mayoría de los casos, un juego por el cual ya merece la pena comprarla. Nintendo DS ha tenido la suerte de tenerlo desde el mismo día de su lanzamiento. Touch! Made in Wario es una de esas experiencias que ningún amante de los videojuegos debería perderse. Tocar, sí, pero también estirar, golpear o incluso soplar son las acciones que se requieren por parte del jugador para participar en la enorme cantidad de minijuegos incluidos.
Wario vs Mario
Al contrario que Mario 64, título que ha defraudado a muchos jugadores por haberse metido casi con embudo en la nueva portátil de Nintendo, el último juego del antagonista del fontanero italiano encapsula a la perfección todo lo que un título para NDS debería contar. Diversión a raudales, un uso de la pantalla doble totalmente coordinado con el de la pantalla táctil, un control que olvida el pad y los botones de la consola y una cantidad ingente de originalidad.
La gran cantidad de minijuegos incluidos se antoja como una clase magistral a las desarrolladoras Third Parties de NDS, iluminándolas con el gran número de posibilidades jugables que la pantalla táctil combinada con la doble pantalla ofrece. Flaco favor para las compañías más preocupadas en ingresar en caja que en ofrecer experiencias de valor a los jugadores, porque el listón ha quedado bastante alto. Tanto, que hasta el anteriormente citado Mario 64 ha quedado en evidencia. No ha sido el único, porque las diferentes pseudo conversiones de títulos de GBA a Nintendo DS han quedado retratadas gracias al ingenio de este juego, desarrollado entre la misma Nintendo e Intelligent Systems.
En definitiva, Sawaru Made in Wario, que en Estados Unidos se ha bautizado como Wario Ware Inc. Touched!, nombre que probablemente tendrá en el mercado PAL, es el juego que seguramente mejor aprovecha hasta ahora las funcionalidades de la máquina, junto a Feel The Magic. Pero a buen seguro que no faltará mucho para que la máquina empiece a demostrar su verdadero potencial en otros juegos que no sean sólo de mini-puzzles. Mientras tanto, resulta agradable poder pensar en un título tan divertido para estrenar la consola, un título que pueda parecer pensado para jugadores casuales, pero que atrapará hasta al sibarita más exigente. Por cierto, que si estás pensando en la importación no deberías tener grandes problemas, dado que el no conocer la lengua nipona no te impedirá poder disfrutar de los minijuegos.
- Puzle
Wario se apunta al carro de los juegos de Nintendo DS con un título que aprovecha la pantalla táctil, el micrófono y la pantalla doble de la consola de la Gran N.
