La seducción se llama Catwoman

Que Halle Berry es Catwoman a día de hoy es algo que casi todo el mundo sabe. Pero pocos, muy pocos tienen el conocimiento de que, aunque sea de forma virtual, tendremos dominio absoluto sobre una de las mujeres más deseadas del panorama hollywodiense actual.

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Catwoman es un videojuego como los de antaño, una conversión al viejo estilo de las licencias cine-videojuego que tan buenamente nos suministraba Ocean en los ordenadores de 8 bits. Y es que, antes era prácticamente un compromiso de cara a los jugones, siempre ansiosos de manejar los periplos pixelados de sus héroes del celuloide… Cosa la cual ha cambiado bastante en estos días, en los que los títulos con grandes nombres provenientes de films de éxito no están tan bien vistos.

Más bien se trata de un prejuicio fundado por muchos horribles programas que vilmente se aprovechaban de una licencia cinematográfica oportunamente adquirida. En el recuerdo quedan tristes lanzamientos como la última visita del hombre araña a los compatibles, un esperado Spider-man 2 que resultó ser uno de los timos más crueles de la historia hacia los peceros más acérrimos.

Por suerte, también hay excelentes muestras de lo contrario. Por poner un ejemplo, las franquicias de Indiana Jones, El Señor de los Anillos o Star Wars se mantienen con buen tipo, u otros títulos como Enter The Matrix son tanto adorados como odiados a partes iguales… Pero ahí están, cumpliendo y quitando poco a poco la fea losa que llevan este tipo de licencias jugables.

Catwoman parece pertenecer a este último grupo de juegos, sobre todo se mantiene en la misma línea del producto Matrix de Shiny. Son un par de compactos que bien puedes odiarlos o todo lo contrario, puede llegar a resultar un entretenimiento de lo más atractivo. Vaya, que desde luego malo no es, y más si tenemos en cuenta que es atractivo audiovisualmente, ofrece retos interesantes y la aventura es hasta cierto punto emocionante. Claro está que le da cien patadas al reciente Spider-man 2… ¿o tal vez no?

Gráficos y sonido

El punto de referencia del cual partiremos para hablar de la calidad gráfica del juego es, sin duda alguna, el modelado de Catwoman. Primero, porque esta Halle Berry virtual es genial, a todas luces mucho más atractiva y sensual que cualquiera de los modelos de Lara Croft que han ido pasando por nuestros discos duros a lo largo de todos estos años. Y segundo, por el gran detalle y mimo que se le ha puesto al personaje, sorprendiendo a propios y extraños con sus mil y una poses en las que se ve que le han echado muchas horas de trabajo.

No hay más que dejar un ratito a nuestra mujer gato quieta para observar, a modo de curioso salvapantallas, el altísimo grado de poligonización empleado en ella. La cámara se acerca y rota sobre Catwoman mientras esta se contorsiona, nos lanza besos y sugiere lo espectacular que debe ser lo que tan sólo sugiere el poco cuero que cubre su morena piel. La verdad es que se nos cae la baba… ;-D

El entorno gráfico en general, por desgracia, no sigue la misma tónica del personaje central. Si bien han sido adornados acordes con la estética de la película y en consonancia con los tiempos que corren, pecan de no aprovechar el poderío visual que los compatibles de hoy en día son capaces de ofrecer. Hay que olvidarse de cualquier posible comparación entre el juego que hoy nos ocupa y otros monstruos del entretenimiento al estilo de DOOM 3 o Far Cry, pero suponemos que Catwoman tampoco pretende ponerse a la altura de estos.

Es por ello que el nivel artístico sí que puede considerarse elevado. No vamos a toparnos con un ejercicio gráfico tan bello e imaginativo como el de Beyond Good & Evil, pero sí con un programa altamente atractivo en ese sentido. Por lo menos, puede considerarse de notable todo lo referente a los juegos de luces empleados. No es que se use ningún tipo de ingeniería lumínica de última generación, pero el buen hacer a la hora de aplicarlos en pos de embellecer la imagen dicen mucho de sus bondades.

Los escenarios gozan de una buena distribución de cara al juego, han sido desarrollados ex profeso para la jugabilidad en sí misma. Aún así, transmiten una buena dosis de la obligadamente requerida ambientación que todo buen juego debe tener en la actualidad. Son decorados que heredan la oscuridad característica de la película, adornados también por esa luminosidad tan característica de este Catwoman.

Desgraciadamente, en lo referente a las texturas, podemos olvidarnos de todo tipo de excelso detallismo. Son en su mayoría demasiado planas, algunas casi al estilo del sombreado goureaud de los viejos tiempos. Posiblemente, la culpa de ello sea su raíz multiplataforma, aunque por fortuna, estas poco detalladas texturas juegan también mucho con la ambientación, y en el fondo le viene como anillo al dedo al tema Catwoman, poniendo énfasis en sus orígenes de historieta.

Tampoco salen muy agraciados el resto de personajes que pululan por el juego. Hay que matizar que en muchos momentos Catwoman nos parecerá un título demasiado frío, vacío… El reto en gran medida se encuentra en la mujer gato y su entorno, a camino entre el juego de plataformas y el indagar con nuestros poderes felinos, pero las no demasiadas veces en las que los enemigos hacen acto de presencia pues… Bueno, pues eso. No rompen moldes ni nada por el estilo.

Del mismo modo que en el entorno gráfico, dentro de una homogenidad agradable, lo que más destaca es el personaje de Catwoman en sí, también habría que resaltar la más que agradecida optimización del código, haciendo que el juego se ejecute con soltura en equipos humildes. Ideal desde luego para las más que fluidas animaciones, que sin ser el último Prince of Persia, dan muy buenas sensaciones, tanto para la vista como de cara al control.

Y es que nuestra heroína responde a nuestras órdenes de forma gloriosa. Si bien las cámaras nos jugarán alguna que otra mala pasada en los saltos, el control y las poses resultantes de nuestra poligonal estrella serán todo un regalo para la vista. Y es que es una auténtica gozada ver como se encarama a las paredes y va dejando el rastro de sus afiladas uñas…

En lo que concierne a los aspectos sonoros, encontramos melodías cuya funcionalidad no pasan de ser las meramente ambientales. Cierto es que en los momentos moviditos cambian las tornas musicales para adaptarse al momento, pero aún así pasan demasiado desapercibidas. Tres cuartos de lo mismo para los sonidos; sabemos que están ahí, pero ninguno que nos haya impactado digno de recordar.

Sí destaca el doblaje al castellano, en la línea de los productos de Electronic Arts, mimando al público español con voces de calidad. Un aplauso en ese sentido…

Guión

Patience Philips es una diseñadora tímida y sensible que trabaja en Hedare Beauty, una gigantesca empersa de cosméticos que está a punto de lanzar un revolucionario producto antienvejecimiento. Pero pierde trágicamente la vida tras el inesperado descubrimiento de un oscuro secreto empresarial.

Mientras su deteriorado cadáver descansaba en una playa, dio con ella un sobrenatural gato egipcio llamado Midnight, devolviéndole místicamente este la vida a Patience. Debido a un misterioso vuelco del destino, nuestra protagonista descubre cómo se transforma en un ser único dotado de la fuerza, velocidad, agilidad y los agudos sentidos de un felino.

Hermosa y enigmática, Catwoman promete vengarse de sus enemigos. Mientras camina entre la delgada línea del bien y el mal, una salvaje y peligrosa Catwoman se dispone a clavar las garras a todo aquel que se atreva a cruzarse en su camino. Ha llegado un nuevo felino a la ciudad, y la cosa está que arde…

Jugabilidad

Catwoman es, ni más ni menos, el típico juego de superhéroes. Siguiendo una serie de normas prácticamente establecidas desde las primeras apariciones de Batman en las consolas de 32 bits, el nuevo juego de EA sigue una a una todas y cada una de las tópicas premisas que este tipo de arcades suelen mostrar: plataformas tridimensionales a tutiplén, manidas escenas de lucha y un poquitito de exploración.

Cierto es que el equipo de diseño de Catwoman no se ha quebrado mucho el coco para mostrar lo que no es más que una serie de reiteraciones jugables anteriormente vistas, con más o menos calidad, en títulos como Spider-man, Hulk o Indiana Jones and the Emperor's Tomb, sólo que en esta ocasión, se nota sobremanera que las prisas son malas consejeras. Con tiempo, a buen seguro que habría salido algo redondo del todo, pero bueno…

De primera mano, el espectacular modelado de Halle Berry choca constantemente con la dificultad que da una cámara mal ajustada. Si ya de por sí con un buen control pad analógico resulta complicado ejecutar con firmeza algunos saltos, ni os podréis imaginar lo frustrante que resultará el hacerlo con el teclado, sobre todo cuando la cámara enfoque con esas extrañas maneras diagonales de las que tanto le da por pecar.

Nuestra felina amiga es capaz de correr, saltar, trepar por las paredes y rebotar en ellas, balancearse con el látigo, caminar acrobáticamente sobre cables, y hacer todo tipo de virguerías con todo lo que encuentre a mano. No hay que olvidar el hecho de que Catwoman es un programa en el que las plataformas protagonizan un 75 por ciento del juego, y eso se nota. Una pena que, a la hora de la verdad, cueste tanto el hacerse con los controles… ¡y la maldita cámara!

Lo cierto es que, en conjunto, nuestro periplo por los decorados del juego es muy espectacular por lo bien representadas que están las acrobacias. Desgraciadamente, los pocos movimientos fundamentales para evolucionar en nuestra misión son extrañamente complicados para un arcade de este tipo, lo cual para colmo de males nos emplaza malditamente una y otra vez a repetir largos paseos por culpa de algún salto mal dado. Para más INRI, todo se complica aún más con las habilidades especiales de la mujer gato, los llamados 'sentidos felinos'.

Luego están los enemigos. De nula IA, estos hacen que Catwoman se vea obligada a protagonizar anodinos combates en los que tendremos que jugar con ellos al billar. Es decir, la mayoría de los rivales de la mujer gato despertarán del KO una y otra vez, siendo la única manera de frenarlos definitivamente el encerrarlos tras un fuerte golpe en algún armario (éstos no salen del armario… ¡entran!), colarlos en los contenedores de basura y cosas así. Todo hay que decirlo, resulta bastante ridículo el tener que hacerlo una y otra vez.

Al terminar cada una de las 20 misiones del juego, ganaremos ciertos puntos canjeables por nuevas habilidades extras. Estos puntos se consiguen realizando los movimientos especiales que se nos pedirá al comenzar cada fase. El canje y la forma de ver las acciones de Catwoman se hace en el modo 'cómic', el cual es a la vez un elegante y utilísimo tutorial.

¿Qué más decir acerca de Catwoman? Pues que destila una gran profesionalidad en el equipo que lo ha desarrollado, pero que el concepto se traba cuando choca de bruces con etiquetas tales como una licencia cinematográfica que exige apretadas fechas de entrega. Así, nos encontramos con un control no pulido, demasiado duro para un programa de estas características, que se une a una acentuada brevedad de juego y a las pocas motivaciones que mueven de por sí a un personaje como Catwoman (o no).

Comparándolo con…

El título más reciente que comparte, al igual que Catwoman, el binomio superhéroe-cine-videojuego, es inequívocamente, Spider-man 2. Cierto es que el resultado de la conversión a PC de este juego es uno de los fiascos más grandes que hemos podido ver en mucho tiempo, pero la cruda realidad es que el título de Activision era mucho más entretenido que el que hoy analizamos. Suena fuerte, ¿eh?

Lo que está bien

Lo que no está tan bien

Enlaces

La página oficial del juego

Manual

En unas escasas quince páginas se relatan resumidamente los detalles principales para arrancar el juego y poder disfrutarlo. Cumple sobradamente con su obligada pretensión, pero ojalá llegue el día en el que todas las compañías aprendan un poco de Nintendo en este sentido, con sus maravillosos manuales excelentemente diseñados a todo color.

Requerimientos de sistema

Windows 98 SE/2000/ME/XP, Pentium III/Athlon 800 MHz, 256 MB de memoria RAM, 1.5 GB de disco duro, CD-DVD 8X, tarjeta de sonido compatible con DirectX 9.0b, tarjeta gráfica 64MB Direct3D.

Tarjetas de vídeo soportadas: nVidia GeForce 2 o superior y ATI 7500 Radeon o superior.

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