Como destrozar un clásico

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Los siete samuráis de Kurosawa fue rodada en 1954, siendo a día de hoy uno de los clásicos de la historia del cine. Medio siglo más tarde Sammy se ha propuesto homenajear este clásico en forma de videojuego, pero los resultados no han sido los esperados...

Los siete samuráis o ‘Shichinin no samurai' es un clásico del cine filmado en 1954 por Akira Kurosawa. Muchos quizás no la hayáis visto, pero posiblemente conozcáis su existencia, al menos por la infinidad de películas que luego la han imitado, como  ‘El último samurai' de Tom Cruise. Este año se cumplen 50 años desde que el maestro Kurosawa rodara esta cinta, hecho que ha aprovechado Sammy para rendirle tributo.

Sammy tras pedirle permiso al hijo de Kurosawa se lanzó a desarrollar una versión muy libre de ‘Los siete samuráis'. Como muchos ya conoceréis, el argumento gira en torno a unos aldeanos que asediados por unos bandidos que les roban las cosechas cada cierto tiempo, deciden contratar a siete samuráis (o ronin) que les ayuden a librarse de ellos. Este argumento que puede parecer tan sencillo, mostraba una historia muy humana con un grupo de samuráis tan dispares como interesantes.

Ahora tenemos en las estanterías de nuestro país la adaptación de Sammy, que lejos de rendir homenaje adaptando la obra de Kurosawa, lo destroza. Sammy a pesar de tener entre manos una obra llena de posibilidades, sólo ha cogido ciertos detalles insignificantes -como el hecho de ser siete samuráis o un pueblo asediado- desaprovechando la oportunidad de rendir un digno homenaje.

Seven Samurai 20XX a diferencia de la película esta ambientada en un futuro no muy lejano donde la tecnología y la robótica esta a la orden del día. El argumento nos sitúa en una ciudad futurista de corte cyberpunk (muy típica de las obras de manga o anime) donde los ciudadanos son relegados a vivir de forma infrahumana en vertederos por las corporaciones.

Durante una cacería de humanoides (humanos mejorados genéticamente) Natoe, un samurai, salva a un pequeño grupo de personas. Estas desesperadas le piden ayuda para librarse de su miseria y protegerles de los humanoides y robots, algo que desestima en un primer momento harto de luchar y ver morir amigos a su alrededor. Pero más adelante es Kabei el que si acepta el reto y convence a Natoe para formar un grupo de siete samuráis...

Natoe y el resto de personajes tienen unos diseños muy ‘cool' que concuerdan muy bien con el estilo ‘samurai cyberpunk' que tiene el título. Esto no se traduce en los enemigos normales que acaban por aburrir machacando la paciencia del jugador, viendo desfilar miles y miles de personajes iguales intentando arrearnos un katenazo.

Las animaciones de los personajes son fluidas en la mayoría de las ocasiones, ya que hemos llegado a detectar ciertas caídas de la tasa de frames cuando se concentran en pantalla muchos enemigos. A pesar de este detalle Natoe se mueve bien y posee una gran cantidad de movimientos que ejecuta dependiendo de la situación del combate.

Los escenarios son otro detalle agradable que Sammy ha trabajado en parte en Seven Samurai 20xx. Por un lado tenemos una monotonía casi tan irascible como la variedad de enemigos, pero por otro lado los entornos abiertos están bastante bien creados dando mostrando una ciudad cyberpunk en todo su esplendor.

Un detalle también que destaca en este título son los juegos de luces y destellos que veremos en los combos casi infinitos de Natoe, cuando use la técnica de las dos espadas.

Como hemos dicho el juego sufre en ocasiones cuando el número de personajes en pantalla es excesivo, si a esto le unimos que no poseemos un selector de Hrz y que jugaremos a 50 Hrz con Overscan el resultado final es pobre.

En el terreno de los efectos sonoros tampoco andamos muy bien, aunque al menos el doblaje ingles del juego es bueno. Los efectos de los golpes con la katana nos sonarán todos iguales a pesar de golpear tanto acero como carne, y los enemigos tampoco corren mejor suerte, siendo aún más pobres los fx que les han tocado.

Seven Samurai 20XX es un beat'em up increíblemente monótono por varias razones entre ellas en control del personaje y el sistema de lucha. El stick derecho nos ayudará a ir encarando enemigos a medida que aporreamos el X enlazando combos de 60 u 80 golpes con los enemigos que vayan desfilando. Si conseguimos rellenar la barra de poder del inferior de la pantalla podemos llegar a utilizar dos espadas incrementando el número de golpes y eficacia, pero en resumidas cuentas es lo mismo.

Esto una vez y otra vez durante niveles que la monotonía de los enemigos no hacen más que agravarla. Algunos niveles han sido un suplicio superarlos a la vez que pensaba ‘¿Y cuando se acaba esto?' . Algunos detalles rompen esta monotonía, pero son escasos y poco duraderos. Entre estos detalles destacan dos: Los efectos Matrix en los combos que veremos al combinar un deslizamiento con un golpe de forma correcta o los ‘Final Boss', que en ocasiones nos harán establecer estrategias algo alejadas del ‘Aporrea el X'

l  o    m  e  j  o  r :