En primera línea de batalla

Estamos viviendo la que podría llamarse época dorada de la acción. Entre la enorme cantidad de títulos de este género que pueblan el mercado de las consolas, los creadores de juegos como Tekken, SoulCalibur, Dead to Rights, Pac-Man World, Ridge Racer o Time Crisis atacan otra vez el mercado de los compatibles con Kill.switch.

Como un auténtico título "multi-plataforma", Kill.switch ha pasado por máquinas tan dispares como PlayStation 2 o Xbox para finalmente llegar al PC. ¿Cómo podemos calificar su paso por el PC?. Podemos calificarlo como satisfactorio, una conversión correctamente realizada, que no requiere un hardware excesivo para funcionar con fluidez y que ha sabido adaptarse plenamente al control que esta plataforma "prefiere": el teclado y el ratón.

Para los menos duchos en el planteamiento de este juego, comentaremos que Kill.switch es un torrente de acción pura que deja fluir toda su adrenalina a través de la táctica. Pero no hablamos de una táctica pausada, que se base en el sigilo, sino más bien de intentar sobrevivir al enemigo, utilizando adecuadamente cada rincón u objeto del escenario que pueda mantenernos a salvo de su fuego constante.

El verdadero mérito de Kill.switch reside en una excelente IA, capaz de someternos a una presión constante, utilizando los mismos métodos que nosotros podemos emplear para derrotarla junto a un diseño de niveles que contrasta perfectamente con el estilo de juego.

Al margen de la calidad que desprende, y de una jugabilidad genuina, tiene también una herencia de su paso por las consolas que lo lastra frente a otros títulos de PC. El jugador actual comienza ya a estar habituado al uso de motores de física avanzados, que proporcionen una interacción con el escenario mucho mayor que "simplemente disparar y dejar marcas en las paredes". Juegos de la talla de Max Payne 2 han sabido aprovechar esta baza que incrementa enormemente el realismo, ofreciendo una experiencia mucho más inmersiva del escenario en el que se desarrolla la acción.

Mesas volando por los aires, sillas que se rompen en pedazos, paredes y elementos del escenario que se resquebrajan hasta romperse... Esta clase de situaciones que han sido exprimidas en Max Payne 2 o Painkiller no han sido aprovechadas en gran medida por Kill.switch. Aunque los enemigos de éste, poseen animaciones creíbles cuando son alcanzados por una bala o por la onda expansiva de una granada, nunca llegará a nivel de interacción que los otros dos títulos proporcionan. Tampoco favorece su puntuación final el haber prescindido de un apartado multijugador, que sin duda habría resultado realmente atractivo.

Kill.switch se presenta como un título para sibaritas de la acción, que buscan calidad y jugabilidad (que no es poco) sin necesidad de llegar a cotas extraordinarias en ninguno de los dos campos, simplemente pasar un rato entretenido sin mayores pretensiones.

Gráficos y sonido

En el aspecto más puramente técnico, es posible que Namco se decidiera por utilizar como "MiddleWare" para el paso por las diversas plataformas que iba a sufrir Kill.switch la tecnología RenderWare. Se trata de un conjunto de herramientas para desarrolladores creadas por Criterion, entre las que se encuentran RenderWare Studio y RenderWare Platform y proporcionan distintas utilidades para generar gráficos 3D, física, audio e inteligencia artificial de calidad con una premisa fundamental para las compañías de videojuegos, es multiplataforma.

Por ello no es de extrañar que la versión PC no guarde importantes diferencias audiovisuales frente a sus homólogas en consola. La resolución máxima utilizada en PC es de 1024x768, las texturas utilizadas no aprovechan todo el potencial que pueden ofrecer las máquinas de hoy en día pero en su favor diremos que permite una ejecución ligera sobre equipos con un hardware más modesto.

Los efectos de partículas favorecen la ambientación climatológica, humo, niebla... así mismo, la iluminación es muy correcta, generando sombras en tiempo real y aportando un colorido interesante al conjunto.

Los escenarios, a pesar de ser variados y encontrarse geográficamente distantes en el mundo, ofrecen texturas algo repetitivas y en ocasiones simplistas (como las utilizadas para representar rocas). Se han tratado con mayor detalle los escenarios abiertos y exteriores que los interiores. Incluso llega a imitar estampas (que no estilo de juego) del genial Metal Gear Solid II, donde podemos ver la ambientación a bordo del petrolero Discovery totalmente "imitada" por Kill.switch en su misión a bordo de un mercante en el mar Caspio.

El apartado sonoro es de muy alta calidad, un tanto repetitivo pero escuchado en un equipo con Dolby Digital Interactivo se hace realmente magnífico. Cada arma suena contundentemente, incluso las explosiones de las granadas sorprenden por su realismo y el aturdimiento sonoro tras una explosión cercana que nos pone un pitido de fondo, como si nuestros tímpanos hubieran estado a punto de estallar. Hablando de la banda sonora del juego, a excepción de la melodía principal, el resto de melodías que acompañan la acción resultan absolutamente insulsas.

No podemos dejar el apartado audiovisual sin hacer alusión a las escenas cinemáticas que cuentan la historia. Inicialmente su duración es escasa, lo justo para darnos unas ligeras pistas del pasado de nuestro personaje. Sin embargo, según avanzamos en el juego, las escenas intermedias se vuelven más largas llegando a mostrar piezas de acción de una calidad realmente impresionante. No posee presentación alguna al comienzo del juego, pero las escenas cinemáticas que acompañan a la acción para darle profundidad a la historia son realmente buenas, sobre todo según nos acerquemos a las escenas finales.

Guión

Kill.switch posee una historia interesante, que podría buscar una similitud de planteamiento en el cine con la película Memento. Manejamos a un súper soldado, que parece haber olvidado su pasado y trabaja para "una voz" que le ordena atacar distintos objetivos en puntos "calientes" del planeta. Lejos de ser un héroe que lucha para salvar el mundo, nuestro personaje es una máquina de matar creada para destruirlo, está tratando de comenzar una guerra mundial.

Un fallo en el dispositivo nanotecnológico que parece llevar en su cabeza nuestro personaje, provoca la visión de escenas de su pasado que marcarán su presente y su manera de actuar en el futuro, pegando algún giro inesperado en el argumento que no vamos a descubrir aquí.

La historia de Kill.switch es interesante pero no afecta al desarrollo de la jugabilidad, está para mantener el interés del jugador en la progresión por sus escenarios sin querer llegar a mayores pretensiones.

Jugabilidad

Como buen juego de acción, Kill.switch tiene una jugabilidad a prueba de bombas. Aunque carezca de múltiples opciones que lo habrían situado dentro de los grandes de la acción, ofrece un nivel de calidad más que aceptable, rebosa adicción por sus cuatro costados.

El sistema de juego nos permite aprovechar cada rincón del escenario para escondernos de las balas del enemigo y plantearnos la mejor forma de sobrevivir a su ataque para seguir avanzando. Mientras estamos agazapados tras una caja, tenemos tres soldados enemigos delante que se compenetran perfectamente para tratar de rodearnos, sorprendernos y matarnos.

Aunque permanezcamos ocultos, los enemigos van tratando de aumentar posiciones frente a nosotros, mientras uno ataca de frente para distraer nuestra atención, los otros dos están acercándose por cada flanco. Llega el momento de pensar con rapidez, "¿me cargo al que tengo  a la derecha?", "si me asomo para matarle, lo mismo el de la izquierda se va acercando detrás de mí sin que me de cuenta", "¡el de en frente va a lanzarme una granada!, ¡tengo que salir por patas!"... y todo esto contra una I.A. que tiene el mismo gusto que tú por la vida, se cubrirá para no exponerse a tu fuego... ¡que tensión!...

Este apartado se ve realmente potenciado por las maniobras que el enemigo efectúa para darnos caza y las que nosotros podemos realizar para frenar su avance.

Tres aspectos fundamentales convierten a Kill.switch en una fuente de jugabilidad y adicción:

Baste una anécdota curiosa, tenía mi personaje parapetado tras una caja y frente a él tres soldados armados, uno de ellos con una metralleta de tubos, de ésas que cuando empiezan a dar vueltas antes de disparar, sólo su sonido te pone los pelos de punta. Trato de atacarles por los lados de la caja en la que me encontraba escondido, pero el soldado que manejaba la metralleta de tubos me ponía las cosas realmente difíciles. Elimino de la "ecuación" a dos de ellos, tras un largo tiroteo donde la paciencia fue mi mejor aliada.

Quedaba tan sólo uno a varios metros de la metralleta estática, confiado pensé "ni de broma va a ir a por la metralleta de tubos, seguro que se queda donde está disparándome"... para mi asombro, tras lanzarme varias ráfagas que impedían que me asomara, tomó la súper metralleta y comenzó a abrir fuego sobre mí dejándome prácticamente en el sitio... En fin, una IA a la altura que favorece la jugabilidad y te mantiene pegado al monitor hasta que consigues pasarte la fase.

Otros aspectos interesantes, que mejoran el juego son el total de 14 armas disponibles, entre rifles, metralletas y granadas que el agente podrá utilizar en el campo de batalla. Algunas armas poseen hasta dos modos de disparo, podremos utilizar el M203 es su disparo normal para ametrallar al enemigo o en su disparo secundario para lanzarle granadas. También podremos utilizar el disparo secundario con el AK47 para apuntar con mayor precisión o para activar el zoom de la mira telescópica de nuestro rifle de francotirador MCRT 300.

La utilización de un curioso sistema de recuperación, al estilo "Halo", permite a nuestro agente recuperarse de las heridas mientras permanece agazapado y sin recibir impactos en algún rincón del escenario. La recuperación de salud no servirá de nada si nos alcanzan repetidamente o llegan a impactarnos en la cabeza.

La jugabilidad y el juego en general habrían llegado a ser "brutales" si no fuera por detalles como una física aprovechada "a medias": si te abalanzas sobre unos cubos encima de una caja, éstos no se caen, ni las cajas de madera vacías se traspasan o se rompen, ni los bidones con líquidos inflamables estallan... menos mal que los cristales sí se hacen añicos al ser impactados con las balas o los soldados salen disparados por los aires cuando les alcanza una honda expansiva.

Esos pequeños detalles que le dan más credibilidad al conjunto y la inclusión de un modo multijugador habrían aumentado sensiblemente la nota final de este juego. Pero no dudéis que os hará pasaros sus 20 fases "del tirón", en escasas 8 horas pero "enganchados" como locos hasta pasar al siguiente nivel...

Estrategia y trucos

Aprender a jugar a Kill.switch es sencillo, el problema inicial será el control y la sincronización de movimiento que exige su diseño de niveles. Afortunadamente, no sólo dispone de una curva de aprendizaje suave sino que además, los primeros escenarios se nos plantean como un pequeño tutorial para aprender a movernos. Otra ventaja que hace más fácil el juego es la manera de apuntar utilizada en el PC, el ratón, que hace mucho más fácil apuntar a un enemigo que los sticks analógicos de un pad de consola.

Es absolutamente imprescindible aprender a escondernos tras los elementos del escenario, o el enemigo terminará con nosotros en escasos segundos. Para cubrirnos es tan sólo necesario utilizar el botón de dirección frente al objeto que tenemos y el de ocultarnos. Una vez colocados es conveniente memorizar las posiciones del enemigo y no permitir que ninguno pase de una línea imaginaria que nos tracemos frente a nosotros o terminarán por acorralarnos sin darnos cuenta.

El siguiente paso, una vez hemos aprendido a refugiarnos es tratar de pensar en cómo avanzar, usando el arma adecuada podemos hacer que el enemigo que vigila en la distancia nuestro movimiento sea eliminado mediante nuestro rifle de francotirador. En los ataques cuerpo a cuerpo la escopeta recortada no tiene parangón pero para las distancias "medias" es interesante utilizar cualquiera de los fusiles de asalto que el juego nos proporciona.

En muchas ocasiones, lo más prudente no es adelantarnos, sino dejar que el enemigo se acerque para poder atacarle desde más cerca, lo que va a requerir grandes dosis de paciencia para no salir "y arrasar con todo" (lo que con total seguridad terminará con un balazo entre ceja y ceja).

Cuando nos veamos abrumados y necesitemos contener el avance enemigo podemos utilizar el "disparo a ciegas" que nos ayuda a frenarles sin exponernos demasiado. Además, el "disparo a ciegas" puede utilizarse, enfocando nuestro fuego en una dirección, mientras agachados y sin que nos vean corremos hacia la contraria, de ese modo, podemos sorprender al enemigo creando confusión.

No podemos dejar de lado en la estrategia en el campo de batalla, el uso de granadas, sean de flash o sean de fragmentación, nos servirán para eliminar a varios enemigos de un solo golpe sin gastar demasiada munición. Por cierto, éste también lanza granadas para "sacarte" de la posición en la que te encuentres. En esos casos será mejor la "maniobra evasiva", nuestro personaje dará un salto y una voltereta que le alejará de las ondas expansivas de las explosiones y de alguna emboscada por sorpresa que nos tenga preparada el enemigo.

Y para finalizar el apartado de la estrategia, aprende a entender el significado de tu barra de salud. Cuando la barra azul del protagonista está completa, tenemos una salud del 100%. Si el personaje sufre algún daño la barra azul se reducirá y el indicador de salud se hará más pequeño. Gracias a los "dispositivos nanotecnológicos", que nuestro agente lleva integrados en su cuerpo, si permanece a salvo durante un pequeño espacio de tiempo, recuperará parte de la salud; sin embargo, si es alcanzado en lugares vitales o varias veces, ni la tecnología podrá hacer que se recupere de los daños... Cúbrete, recupera tu salud y no te expongas al fuego enemigo.

Comparándolo con...

Por una vez, más que intentar igualar a Kill.switch con otro juego, vamos a opinar con qué no hay que compararlo. No hay razón para comparar Kill.switch con Metal Gear Solid o Splinter Cell, ya que ambos utilizan el sigilo como arma contra el enemigo, mientras que la base de Kill.switch es "dispara a todo los que se menee" mientras te cubres para no resultar herido. Es decir, aunque se antoje en los tres casos el uso de un personaje de las fuerzas especiales con un pasado más o menos escabroso, Kill.switch no ofrece la misma experiencia que los otros dos títulos anteriores.

La acción es el pilar fundamental en Kill.switch mientras que el sigilo y la historia son el eje de Metal Gear Solid o Splinter Cell. Podemos llegar a encontrar un estilo de juego similar en Max Payne, el cual tiene unos mejores gráficos, historia y ambientación y un sistema de juego no basado en "protegerse" sino más bien lo contrario. Así pues, la comparación con Max Payne puede resultar obvia pero queda fuera de lugar. Por último, podemos buscar en juegos como Halo el sistema de recuperación de salud que ayuda a favorecer la acción en gran medida aunque claro está, a excepción de la característica de recuperación de salud, nada tiene que ver Kill.switch con Halo.

En fin, quizás sea conveniente contrastarlo con las "Coin Ups" (máquinas recreativas) en las que disparas con una pistola, mientras te sitúas tras una caja al pulsar un pedal, sólo que en tercera persona y con total libertad de movimientos. Es complicado encontrarle un espejo donde mirarse a este Kill.switch que parece haber tomado prestadas algunas ideas para crear un producto difícil de comparar.

Lo que está bien

Lo que no está tan bien

Enlaces

Manual

El manual del juego consta de 12 páginas, realizadas en tonos grises a excepción de la portada y contraportada que se encuentran realizadas en color. No aporta una introducción que explique la historia, es parco a la hora de dar estrategias y trucos para moverse por el escenario. En suma, es un manual totalmente prescindible.

Requisitos del sistema

Requisitos mínimos: Sistema operativo: Windows 98, 98 SE, ME, 2000, XP. CPU: Pentium III a 800 Mhz o Athlon equivalente. Tarjeta de vídeo:  con al menos 32 Mb. Memoria Principal:  128 Mb R.A.M. Formato: CD-R.O.M. Disco Duro: 900 Mb. Tarjeta de sonido: 100% compatible con DirectX 9. Controles: ratón y teclado o pad.

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