Fortaleza, coraje e inteligencia son las marcas de un verdadero guerrero.

Cuando la oscuridad envolvió la que fue una noble China, hombres y mujeres valientes, de todo tipo de orígenes sociales, se dirigieron a la batalla. A medida que cruzaban sus espadas con vastos ejércitos comenzaron a ser más que guerreros. Con el tiempo se convirtieron en leyenda.

DW4: Xtreme Legends puede jugarse como un juego independiente o, si eres un auténtico fanático de la saga, conjuntamente con Dynasty Warriors 4, dándole más potencia y mucha más jugabilidad. Nuevos elementos, nuevas escenas y muchas más horas de entretenimiento te esperan en la lejana China.

Dynasty Warriors 4 es uno de los mejores juegos de acción del catálogo de PS2, un auténtico machaca dedos, machaca mandos y machaca enemigos. Y ahora esa última entrega se ve mejorada a su manera con esta nueva "ampliación", si se pudiera llamar así, que nos ofrece KOEI bajo el mismo título con la añadidura de "Extreme Legends" que sale al mercado con personajes extra, nuevas armas, nuevas secuencias de video y modificaciones en su jugabilidad.

No es que se trate de una "expansión" para un juego propiamente dicha, pero realmente de lo que se trata es de una nueva versión de su predecesor, algo a lo que nos tienen acostumbrados los japoneses con otras sagas y que con esta se ha vuelto tradición. Este título, que llega a los territorios PAL  después de un arrollador estreno en Japón y en Estados Unidos, simplemente amplía el contenido de la pasada entrega de la saga Dynasty Warriors, ofreciendo bastantes novedades que sin duda justificarán la compra del juego por parte de los fans, el resto de los jugones con tener uno de los dos van que chutan.

La saga Dynasty Warriors tiene una gran cantidad de fans incondicionales de los juegos. Esta nueva entrega no aporta grandes cambios respecto a Dynasty warriors 4, pero si que será un gran entretenimiento para los jugadores que quieran algo más, o más de lo mismo.

DW4:XL consiste en lo mismo que los dos juegos anteriores de la saga en PS2, combates masivos en la época feudal china, en los que tú representas a un único luchador superpoderoso que va eliminando todo lo que se encuentra a su paso. La mayoría de las veces no llevas a esa valiosa escolta que nos acompaña en las misiones del los títulos "normales" de esta saga.

Estamos de acuerdo en que este tipo de juegos, simplemente un mata-mata como cree mucha gente, aun así tienen un componente de estrategia y desarrollo del personaje, lo cual consigue que el "enganche" sea mayor, y los hace mucho más duraderos e interesantes de lo que cabe esperar en un principio. Estamos de acuerdo que el juego en sí es igual que el DW4, por lo que las diferencias deberían justificar el desarrollo del título, el lanzamiento de esta continuación y la compra del juego por parte de los jugones.

G r á f i c o s

El apartado gráfico de DW4: XL prácticamente no ha sufrido mejoras con respecto al que ya se pudo ver en Dynasty Warriors 4. Básicamente se trata de añadir nuevos efectos a los nuevos movimientos y combos pero por lo general se mantienen el resto de florituras visuales del juego. Nuevas secuencias de video, nuevas vestimentas, nuevos enemigos, pero también esa persistente niebla, algunos casos de popping y alguna ralentización cuando la pantalla se llena de enemigos. Más cantidad, la misma calidad.

M ú s i c a

En cuanto a la banda sonora del juego se ha optado por la tendencia conservadora que siempre les ha venido tan bien a los chicos de KOEI, ¿para que cambiar algo que ya funciona?. No se trata de un simple más de lo mismo, sino que se añaden nuevas canciones a la banda sonora del estilo que ya hemos disfrutado en ocasiones anteriores y que tan bien no ponían en situación.

En este aspecto del juego se mantienen las mismas reglas que en la versión anterior: voces en inglés y textos que traducen dichas voces al Castellano. La verdad, para hacerlo así podían dejar los textos en japonés, que seguro que estaban mejor interpretados.

El resto de sonidos de la biblioteca de efectos del juego es el mismo que el del pasado título, salvo en los nuevos movimientos y combos que simplemente modifican un poco los efectos ya escuchados en la versión anterior.

Puede parecer que este juego es sólo para los muy fanáticos de estos juegos, ya que lo único que agrega muchas más misiones (unas 42 misiones propias para cada personaje), pero con la salvedad de aportar el modo xtreme que es el auténtico "motor" del juego, ya que es muy factible pasarse días y días pegado a la PS2 y a este juego.

Y se puede decir que se trata de uno de los mejores juegos de acción, sobre todo si la experiencia es acompañada con un colega a dobles, ya que las horas jugadas se pueden multiplicar hasta la saciedad, reventando enemigos, mejorando todos los personajes, y  sacando las armas de máximo nivel, para volver a jugar de nuevo con los personajes mejorados y que nadie nos tosa. Impagable.

Con un par de modos de juego nuevos, que no son muy extensos, el objetivo principal del juego es poder utilizar los generales que hemos mejorado en el DW4 y poder desbloquearles nuevos extras, así como alguna misión nueva.

Como siempre el verdadero centro del juego es el modo "musou". Aunque he de decir que la experiencia más salvaje de este título es lanzarse a la aventura sin los consabidos guardaespaldas, para que, como si de un "obleix" nipón se tratase, nos dediquemos a coleccionar KOs enemigos a ver quien contabiliza más. Es muy factible pasar de los 300 enemigos abatidos a las primeras de cambio. Imaginaos con los personajes mejorados. Si decidimos utilizarlos se portarán igual que en versiones anteriores, para bien y para mal.

Esta es la pregunta clave que se hacen muchos jugones, ¿merece la pena gastarse el dinero de nuevo si ya tengo el DW3 original? En realidad la respuesta a esta pregunta es muy sencilla y podría ser esta otra pregunta, ¿has explotado DW3 hasta el último detalle?, si has llevado DW3 al límite y quieres más, está claro que comprar DW3:EL será una gran opción, pero si tienes DW3 a medias, quizás sea excesivo comprar esta ampliación, ya que es básicamente el mismo juego.

A sabiendas que un juego de este tipo se puede hacer repetitivo para muchos jugones, hay que decir que para los aficionados a la acción y a "machacar" el mando sin perdón ofrece  diversión sin parar.

Es recomendable ir probando los distintos generales, pues no se parecen los unos a los otros en sus características y cualidades, así como en sus diferentes movimientos. Sobre todo a la hora de conseguir las armas de mayor nivel, para lo cual hay que hacerse las misiones tal y como se ordena, lo que hace que la tensión aumente por momentos y no sea un simple aporrear el mando y aplastar cabezas a diestra y siniestra.

Pero no nos engañemos. Seamos sinceros. Es uno de los mejores juegos de acción del catálogo de PS2. Los personajes tienen mucho carisma, los modos son de lo más variado y el juego se puede jugar como complemento o no del anterior, el gran Dynasty warriors 4.

Este título ofrece mucha diversión sin llegar a ser un simple machaca-botones. Los combos que se pueden realizar con apenas dos botones hacen que la experiencia de juego sea de lo más completa para cualquier jugón que se preste a jugar con este título, aunque evidentemente la dificultad puede ir incrementándose.

El nuevo modo Legend merece la pena ser jugado hasta el final, mientras que los modos Xtreme y Challenge tienen unos extras bien desarrollados para hacer el juego más durable de lo que parece a primera vista.

Si ya has jugado a DW4, tienes las cosas más claras que si te acercas a esta saga por primera vez. A los fans de la saga Dynasty warriors, esta nueva entrega les parecerá fabulosa, en cambio a los que el juego les guste, pero no demasiado, DW4:XL les va a parecer más de lo mismo y no les merece la pena volver a gastarse un dinero en él. Aunque sea menos dinero que con un juego normal.

Porque esa es una de las ventajas del juego: su precio reducido. Hay que tener en cuenta que se puede encontrar en las tiendas por menos de 40 euros, un precio sensiblemente inferior a lo normal en las novedades que salen al mercado cada mes.