Starcraft: Ghost (Xbox)

Tras pasarse los últimos años con el PC como coto de caza único, Blizzard se prepara para volver al terreno de las consolas con Starcraft: Ghost, un título lleno de acción, sigilo e infiltración y el objetivo de auparse hasta lo más alto. Para ello han relegado la responsabilidad en Nihilistic y en su más letal agente: Nova.

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Hoy en día, Blizzard es una de las compañías que más éxito y fama cosecha con sus lanzamientos para ordenador. Pese a su prestigio, es una desarrolladora que saca relativamente pocos títulos al mercado, haciéndolo además con un considerable espacio de tiempo entre lanzamientos y casi siempre con un notorio retraso, algo atribuible al cuidado y dedicación que ponen en todos sus juegos, puliéndolos al máximo en todos los aspectos, técnicos y jugables, para ofrecer unos títulos equilibrados, sin fisuras, capaces de entretener y divertir como el primer día incluso más de un lustro después de su aparición. Es el caso de sus sagas de estrategia en tiempo real, la fantástico-medieval Warcraft y la futurista Starcraft, además de esa mezcla de acción desenfrenada y elementos de rol llamada Diablo (y secuela).

Lo que no todos saben o recuerdan, aunque seguro que los más veteranos sí, es que Blizzard comenzó su andadura como compañía creadora de juegos con varios lanzamientos que daban igual importancia al ordenador y las consolas (Super Nintendo y Mega Drive por aquel entonces), incluso con títulos exclusivos para estas últimas. De sus manos salieron joyas lúdicas del calibre de The Lost Vikings, una excelente combinación de plataforma y puzzle, aparecido bajo el sello de Silicon & Synapse, el anterior nombre de la compañía californiana, o BlackThorne, una aventura que bebía de fuentes como Flashback o Prince of Persia. Y parece ser que a esta gente les ha entrado la nostalgia, al anunciar para las tres consolas de nueva generación Starcraft: Ghost, dejando de lado por primera vez en muchos años el ordenador.

Aún así, han decidido contar con la colaboración de Nihilistic Software, una joven desarrolladora californiana fundada en 1998 que cuenta con su haber un único título, Vampire the Masquerade: Redemption, pero que en el currículum de las 21 personas que lo componen aparecen una gran cantidad de juegos en los que trabajaron en sus anteriores puestos, como pueden ser Dark Forces, Jedi Knight, Descent, Shadows of the Empire, Prince of Persia 3D o Indiana Jones y la Máquina Infernal para citar algunos de los más conocidos, aunque hay uno que da una gran confianza y seguridad hacia estos chicos para afrontar este nuevo proyecto, y es que varios de ellos formaron parte del equipo que dio vida al Starcraft original, por lo que conocen bien el peculiar universo en el que tendrán que volver a trabajar en colaboración con Blizzard.

Y quizá por estas razones han decidido relegar la responsabilidad de la programación de este nuevo título a Nihilistic, compañía que ya mostró su buen hacer con Vampire, para que nutran con nuevas ideas y puntos de vista un género que los padres de Diablo nunca se han atrevido a adentrarse. Aún así, Blizzard mantiene una estrecha vigilancia y colaboración con la compañía afincada en Marin County, supervisando activamente el desarrollo del juego, algo en que esperemos que se note en el acabado final del juego, y que mantenga las altísimas cotas de calidad y diversión a que nos tienen acostumbrados. Y por lo que se ha podido ver hasta ahora, no parecen ir desencaminados…

Queriendo buscar una salida a la falta de recursos y de espacio vital, la carrera espacial volvió a ser una prioridad, logrando colonizar en pocos años la Luna y varios planetas vecinos. Con el perfeccionamiento de la criogenización y los motores warp (viaje a través del espacio-tiempo) llegó la exploración e intentos de colonización de sistemas cercanos, movimiento encabezado por una expedición de 40.000 antiguos reclusos transportados en 4 enormes transportes. Durante el viaje al planeta llamado Garlon IV, algo fue mal, y el año de duración que había previsto se convirtieron en treinta años, pasando de largo su destino inicial y llegando a un sector desconocido. Con el tiempo, los viajeros fundaron colonias en los distintos planetas del sector, llamado desde entonces Sector Terran, y empezaron a prosperar rápidamente, aunque no se libraron de alguna que otra guerra civil entre colonias, con la llamada Confederación Terran (fundada en el sistema Tarsoris) como régimen principal.

Tras varias generaciones, y aún enzarzados en constantes luchas internas, apareció una flota de una raza alienígena tecnológica y psíquicamente muy avanzada, los Protoss, que arrasó una de las colonias humanas sin aviso ni oposición. Además, otra raza alien, los aterradores Zerg, fue avistada cerca de otro sistema Terran, viéndose éstos atrapados entre dos invasiones externas y una guerra interna. Es en este punto donde parten Starcraft y su secuela-ampliación, Brood Wars, donde comandábamos los ejércitos de las tres razas en contienda, en un arco argumental impecable, acabando en un final bastante sorprendente… Y justo en ese punto es donde tiene comienzo Starcraft: Ghost, uno de los títulos en los que más esperanzas se ha depositado para los próximos meses.

Las unidades Fantasma, son tropas de élite reclutadas y entrenadas desde niños, para alcanzar el nivel más alto posible para un humano, tanto en el aspecto físico, como en el mental, usando drogas durante el crecimiento del individuo para despertar las habilidades psiónicas latentes de la especie humana. Adiestrados en las artes de la infiltración y supervivencia en territorio enemigo, y equipados con la mejor tecnología que los Terran son capaces de producir, los Fantasmas actúan como exploradores, espías, asesinos y francotiradores, generalmente en solitario tras las líneas enemigas, pero también en coordinación con los ejércitos Terran en pleno combate. Y encarnados en uno de ellos, con el nombre código de Nova, tendremos que realizar todas esas funciones y más, siguiendo las órdenes de nuestros superiores.

Siendo un juego donde primará el sigilo y la eliminación selectiva de enemigos, tendremos que llevar al límite las capacidades atléticas de nuestra bella protagonista, y hacer buen uso del enorme plantel de movimientos y que prometen que será capaz de realizar, dignos del mejor Snake o Fisher, para lograr infiltrarnos y pasar desapercibidos allá donde tengamos que ir. Sin olvidar el poder de sus habilidades psiónicas, las cuales nos permitirán distintas acciones, desde detectar tropas enemigas camufladas, hasta entrar en una especie de bullet-time (tan común últimamente) con el que disparar con mayor precisión o sortear a nuestros rivales con una velocidad superior a la normal.

Además, Nova contará con todas las habilidades de que hacían gala las unidades Fantasma en el juego original, además de nuevos añadidos que se presentan la mar de interesantes. Desde la capacidad de envolverse en un campo invisible y actuar impunemente sin que puedan vernos, hasta la capacidad de pedir y dirigir ataques tan distintos como el fuego de una batería de Tanques de Asedio o de Cruceros de Batalla, un escaneo de una zona oculta, o la intervención de una Nave de Ciencia y sus temibles ataques de radiación, sin olvidar el poderoso, efectivo y mítico ataque nuclear táctico en pleno centro neurálgico del enemigo.

También podremos hacer buen uso de todos los tipos de munición de nuestro fiel rifle C-10, desde munición perforante para ejercer de francotiradores, hasta proyectiles explosivos para ocuparnos de hordas de enemigos, pasando por la útil munición de bloqueo, capaz de desactivar cualquier vehículo o unidad mecánica durante un breve lapso de tiempo, suficiente para esquivarlo o encontrar el modo de eliminarlo. Pero el arsenal de nuestra letal agente no se quedará ahí, si no que contaremos también con muy diversos tipos de granadas, y el poder usar armamento de otras unidades, como pueden ser los rifles de asalto o lanzallamas Terran, además de ser capaces de pilotar muy distintos vehículos, como los bípode Goliats o las motos Buitre.

Gráficamente, el aspecto que ofrece lo visto hasta ahora de Starcraft: Ghost es una muestra de buen hacer y mimo en la creación de todos los elementos, resultando en un conjunto sólido, pero aún pendiente de bastantes arreglos, en especial en rendimiento, ya que al parecer tienen problemas para mover el juego en su actual carga gráfica incluso en la consola de Microsoft…

Empezando por las unidades, estas gozan de un modelado ejemplar, siendo fieles reproducciones de los sprites 2D que contemplamos por primera vez hace ya un lustro, aunque no todas los enemigos y vehículos que veremos parecen estar al mismo nivel (sin contar a Nova, muy superior al resto), pero aún hay tiempo para mejoras. Además, por primera vez podremos observarlas en toda su magnitud, al estar realizadas en una escala real, donde los Hidraliscos de tres metros de altura se ven empequeñecidos ante la mastodónica figura del temible Ultralisco o ante el duro habitáculo blindado de los letales Dragones Protoss.

En materia de escenarios, el engine gráfico de SC: Ghost parece capaz de desenvolverse sin problemas tanto en interiores como exteriores, y en una gran variedad dentro de estos, desde cuevas volcánicas a bases militares o desde junglas a desiertos. Llaman especialmente la atención los escenarios más 'tecnológicos', algunos de los cuales llegan a recordar a muchos de los que podíamos contemplar en Metroid Prime (en cuanto a estética, y en menor grado, calidad), y también los templos Protoss, de gran belleza. Aún así, a día de hoy las texturas cantan un poco en según qué mapa y en ciertas unidades, pero es de esperar que de aquí a su lanzamiento sean trabajadas con algo más de maña.

Y para apoyar este despliegue gráfico, nada mejor que el buen uso de la iluminación que parece que le están dando en Nihilistic, con unas explosiones, fogonazos, fuego, luces y sombras de un gran nivel, que prometen ser de lo mejorcito del juego… Mención aparte merecen los efectos 'especiales' que provocan según qué habilidades, como cuando un Comsat Terran hace un escaneo de una zona, o el efecto del campo de camuflaje del traje de Nova, que nos hará recordar rápidamente el del mítico Predator de la película de mismo nombre…

Con esto, se permite que todo aquél que desee emular a la Teniente Ripley y arrasar con todo alien que se le cruce por delante será libre de hacerlo, pero también se da manga ancha a quién prefiera ir evitando todos los enfrentamientos posibles y en caso de eliminar a alguien hacerlo desde las sombras o con ataques por la espalda. O si se prefiere, una mezcla de ambos estilos. E incluso en cada forma de pasarse el juego habrá distintas maneras de afrontar la situación, por lo que la variedad estará a la orden del día, con la única limitación de nuestras decisiones y lo que el guión imponga en según que momentos.

Pero para ello, se necesitaría una Inteligencia Artificial a la altura, capaz de reaccionar y responder a nuestras acciones de forma lógica y sensata. Y al parecer, según la compañía californiana, la IA con que contará Sarcraft: Ghost no decepcionará en ese sentido, y aunque en los vídeos y demostraciones sacadas a la luz no se permite discernir sobre la calidad de dichas rutinas, habrá que darles un voto de confianza. Aunque es bien sabido que con estas cosas mejor no opinar hasta que esté la versión final en nuestro lector, que luego pasa lo que pasa…

También está por ver qué ocurre con los fuertes rumores de que Starcraft: Ghost acabará siendo exclusivo para Xbox, en especial a causa de los problemas de rendimiento que se han ido encontrando, pese a que desde Nihilistic y Blizzard han confirmado una y otra vez que las aventuras de Nova siguen en desarrollo para las consolas de Sony y Nintendo, además de la negra de Microsoft, pero veremos como queda la cosa…

Así que a esperar toca, y a rezar para que este juego acabe siendo todo aquello que han dicho sobre él. Y en ese caso, estaremos de enhorabuena. Empieza la cuenta atrás.