La noche de las brujas ahora en GameCube.

La noche de Halloween inspira este título que viene cargado de magia e imaginación unos meses después de haberlo hecho en la consola de Sony. Greg y Alicia vuelven a adentrarse en el mundo de los muertos para salvar a sus amigos esta vez en GameCube.

Un título sencillo pero atractivo con la simple intención de entretener como Castleween llega a la consola de Nintendo. No destacará en demasía por su apartado técnico o jugabilidad, pero lo que esta claro es que es un juego cargado de magia e imaginación que puede llegar a cautivar hasta a los más 'maduritos'.

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Durante el camino Greg y Alicia se entretienen peleando y jugando como hacen siempre quedándose un tanto rezagados, para cuando se dan cuanta sus amigos ya han llegado y han entrado en la misteriosa casa. Cuando los dos chiquillos entran en la casa observan como el malvado hombre Calabaza atrapa al ultimo de sus amigos con un extraño hechizo que lo transforma en piedra robándoles el alma.

Los dos protagonistas se quedan helados ante la visión pero cuando advierten que el hombre Calabaza no esta solo ya que empiezan a aparecer horripilantes figuras tras de él, salen corriendo despavoridos hacia la profundidad del bosque sin rumbo fijo. De repente los niños se encuentran ante una puerta de metal un tanto siniestra, pero no se lo piensan dos veces y se adentran en ella por que tras ellos sigue el hombre Calabaza y sus horribles compañeros.

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Para sorpresa de Greg, Alicia desaparece por arte de magia quedándose solo, pero acto seguido hace su aparición el Guardián que le cuenta que se han adentrado en el Mundo de los Muertos...

Durante el resto del juego este personaje hará muchas mas apariciones ayudándoles en su cometido de liberar a sus amigos del hombre Calabaza y su maligno jefe. Es una mezcla entre el genio de Aladdín y el pato Lucas hablando, es el personaje cómico del juego y os aseguro que en más de una ocasión nos hará al menos sonreír. La pena es que salga tan poco por que es lo mejor del juego, desternillante.

Por su parte Alicia es una pequeña niña pelirroja de ojos azules y va disfrazada de bruja. Usa su sombrero a modo de boomerang, con lo que sus ataques son a distancia. Al contrario que Greg odia el fuego y ama el frío elemento del hielo, además pasará desapercibida entre las brujas del mundo de los Muertos.

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Son dos personajes distintos con cualidades distintas, así que deberemos usar cada uno en la ocasión que más le necesitemos. Para ello iremos recolectando cristales en nuestro camino, cada transformación nos costara 30 y cada 100 sumaremos una vida más.

Entonces dependiendo de la situación que nos encontramos usaremos a uno u otro, por ejemplo a Greg si necesitamos activar una calabaza de fuego o queramos pasar desapercibido entre unos diablos que nos acechan.

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En este punto es donde destaca más Castleween en la ambientación de cuento de Halloween que posee el título. Tumbas, ciénagas, puentes sobre ríos lúgrubes, abismos... de todo. La ambientación continua con los personajes, desde los protagonistas Greg y Alicia, pasando por el magistral Guardián y acabando con los enemigos, algunos curiosos y graciosos a la vez. Hablando ya de otros efectos gráficos como la luz que nos iluminará por unas catacumbas o el fuego de algunos lugares son también positivos en este apartado.

Otros detalles que hemos observado y que afectan bastante a la jugabilidad es el motor  de colisiones y el sistema de cámaras. Lo primero el motor de colisiones tienen bastantes fallos, pues nos costara en ocasiones muchas veces pasar cierto enemigo sencillo ya que es difícil atinarle en el cuerpo a cuerpo, o por enemigos que parece que no te van a tocar y al final acaban mandándote al otro barrio.

Si además al problema de un motor de colisiones no muy fiable le unimos un sistema de cámaras que deja bastante que desear (Cámara fija en tercera persona) la dificultad del juego en algunos momentos desesperará a mas de uno. Esta cámara no será siempre desde atrás del personaje sino que podrá ir cambiando y poniéndose a enfocarnos desde un lateral o desde una poción aérea.

Esto en ocasiones nos deja vendidos sin poder ver bien la longitud de un salto o un enemigo que tenemos delante. En definitiva tenemos un apartado técnico sin florituras con algunos aspectos positivos y otros que deberían de pulirse.

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Comparándolo con la versión de Playstation2 hemos podido notar quizás una mayor nitidez en los gráficos y que el framerate del juego no se ve tan resentido en ocasiones como en la versión de la consola de Sony (Quizás por la mayor potencia de la máquina de Nintendo)

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También, en parte derivado del problema anterior, es difícil atinar en el cuerpo a cuerpo a los enemigos puesto que no vemos bien al enemigo y además el motor de colisiones no es muy eficiente, ya que aunque juremos que estamos a una distancia perfecta para carrera a ese enemigo que nos acosa podremos fallar estrepitosamente.

Otro detalle que quizás no cautive a todos los seguidores del género de las plataformas es la linealidad del título, parecerá en todo momento que nos llevan de la manita durante el desarrollo del juego.

Aparte de estos detalles, Castleween es un juego que sin muchas pretensiones gustará al público que va dirigido, los más pequeños y habilidosos de la casa. El juego consta de unos 11 niveles llenos de puzzles y retos varios donde deberemos de ir liberando uno a uno a nuestros amigos hasta que lleguemos al enfrentamiento final y descubriremos todo el pastel. El título no es que sea muy largo pero el tiempo que dure nos tendrá bien entretenidos.

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  c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n

Castleween es un juego sencillo con una sencilla premisa, entretener que es en teoría la finalidad de todo título como mínimo. No es un juego con altas pretensiones ni tampoco busca el efectismo de un argumento enrevesado. Simplemente es un cuento de la noche de Halloween donde deberemos participar y ayudar a Greg y Alicia a salir victoriosos.

  l  o    m  e  j  o  r

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