En un universo convulso, marcado por las estrategias políticas y las tentaciones del lado oscuro, el destino de un cazarrecompensas puede poner en jaque a las más altas instituciones interplanetarias. Lucas Arts nos pone por fin en la piel del cazarrecompensas más rudo y despiadado de toda la galaxia (o, al menos en la de su padre) gracias a este prometedor juego de acción en tercera persona. Es hora de que Jango Fett nos guíe por los rincones más sórdidos de la Galaxia. Que de la aventura salgamos vivos o muertos solo depende de nosotros. Cuando se estrenó en 1976 Star Wars, ni siquiera el propio George Lucas era capaz de imaginar que estaba a punto de entrar en la historia del cine y sentar las bases de una moderna mitología que ha calado de manera irreversible en la sociedad occidental de finales del Siglo XX. Y es que ya son varias las generaciones que han crecido a la sombra de un cuento de hadas futurista que representa la eterna lucha entre el bien y el mal, adornada para la ocasión por espectaculares batallas espaciales y no menos sorprendentes combates con sables láser. Hoy día, los entrañables androides R2D2 y 3CPO son tan familiares como la telefonía móvil y son legión los que han visto en esta saga su auténtica pasión. De la gran factoría de sueños que es Star Wars han surgido personajes carismáticos que permanecen en la retina de miles de millones de cinéfilos por todo el mundo. Quién no ha sonreído con las bravuconadas de Han Solo o se ha sorprendido a si mismo comprendiendo a la perfección los gruñidos del bueno de Chewaka? Entre ellos, los que aparecieron en la primera remesa de películas (los Episodios IV, V y VI) probablemente, y con el permiso de Darth Vader, uno de los malvados más atractivos es el cazarrecompensas sin escrúpulos que persigue a Han Solo por todo el universo, Bubba Fett. De hecho, en la ultima de las películas de la saga, El ataque de los clones, Lucas ha querido satisfacer las ansias de muchos de sus incondicionales por conocer algo más sobre los orígenes de este sombrío personaje. Y para ello nos ha presentado ni más ni menos que al mismísimo padre de la criatura, Jango Fett. Y como para hacer cierto el dicho "de tal palo tal astilla" papa Fett también se dedica a eso de ir de planeta en planeta capturando vivos o muertos a cuantos se le encargue y, para más identificación paterno-filial, tiene unos gustos en el vestir (léase armadura y peculiar casco) clavaditos a los de su hijo. Y es precisamente este cazarecompensas espacial, rudo y expeditivo, el protagonista del nuevo juego de Lucas Arts, auténticos especialistas en explotar con extraordinarios resultados la franquicia estrella de su filial cinematográfica Lucas Films.
Star Wars Bounty Hunter (GameCube, PS2)
Antes de la clonación La historia del videojuego nos sitúa temporalmente entre los episodios I y II de la saga cinematográfica (exactamente 10 años antes de los acontecimientos contados en Star Wars: Episodio II, en un intento de explicar las razones por las que Jango Fett es seleccionado para servir de modelo al ejercito que desatar la llamada guerra de los clones. Jango ha sido contratado para localizar y dar caza a una presa extremadamente poderosa: un caballero Jedi renegado que ha conseguido convertirse en el líder de una peligrosísima secta. Para ello tendrá que visitar varios mundos en busca de pistas sobre su paradero, al tiempo que sortea las trampas de su brutal archienemigo Montross y va cazando hasta 150 personajes que pululan por la galaxia ignorantes del alto precio que han puesto a sus cabezas. Como nuestro protagonista no es de los que se andan por las ramas, la decisión final de si entrega a sus presas vivas o muertes solo depende de él. Y es que ser un villano a la caza de seres de peor calaña que la tuya tiene esas cosas. Hasta llegar a enfrentarse cara a cara con el misterioso Jedi oscuro, tendrá que hacer un largo recorrido a través de seis capítulos y dieciocho niveles que nos llevarán por las zonas más peligrosas de toda la galaxia. Cada capítulo se desarrolla en un mundo diferente y los aficionados a la Saga tendrán la oportunidad de visitar los peores antros de lugares tan familiares como Corruscant o el mismísimo Tatoonie. Otra de las grande satisfacciones (bueno, según se mire) que el juego depara a los fans de Lucas es poder trabajar a las Ordenes de los Hutt, posiblemente los mejores y más famosos clientes del universo.
Star Wars Bounty Hunter (GameCube, PS2)
Todo queda en casa Star Wars Bounty Hunter marcar un hito dentro de la historia de Lucas Arts, ya que se trata del primer videojuego en el que colaboran de manera directa dos grandes empresas dentro de la enorme corporación del entretenimiento que ha creado Lucas: la todopoderosa Industrial Light & Magic y los estudios de sonido Skywalker Sound, ambas empresas laureadas con varios premios Oscar. Los primeros, conocidos por la extraordinaria calidad de sus efectos especiales para el cine, son los responsables de todas las secuencias cinemáticas que nos guiarán a través de la historia antes y después de cada nivel.
Star Wars Bounty Hunter (GameCube, PS2)
Los chicos de Skywalker Sound han sido, por su parte, los responsables de dotar de ambientación sonora a este juego. Según sus responsables la creación de sonidos específicos para las secuencias cinemáticas e in-game han supuesto un nuevo paso dentro del sonido para videojuegos, creando un producto muy usual en el mundo del cine pero absolutamente pionero en nuestras consolas. La música original para Bounty Hunter ha sido compuesta por Jeremy Soule, pero los seguidores de la saga pueden respirar tranquilos sabiendo que varios temas de las películas de Star Wars creados por John Williams estarán presentes también en este juego.
Star Wars Bounty Hunter (GameCube, PS2)
Luces, cámaras, acción La libertada de movimientos en el juego se ha intentado ampliar de manera considerable con respecto a otros títulos de acción en tercera persona. En este sentido es clave la utilización del característico jetpack de Jango, unas de sus señas de identidad (y también de su hijo) en la saga de La Guerra de las Galaxias. Gracias a este artilugio Jango puede volar a velocidades de vértigo por todos los escenarios. Al principio los desarrolladores del juego lo diseñaron como un complemento sólo para algunos niveles, pero al ver las posibilidades que brindaba su uso se decidió incluirlo en todas la fases. En cuanto al arsenal que podrá utilizar nuestro querido "cabezalata", nos podemos encontrar desde un par de pistolas "blaster" que utiliza al más puro estilo del cine de Hong Kong (a dos manos, como marca la moda) hasta un cortador láser que le permitir abrirse paso a través de las puertas bloqueadas. Evidentemente los "juguetitos" no se agotan aquí y Jango también podrá usar rifles de precisión, lanzallamas, cables cortantes e incluso misiles. En el apartado técnico destaca la presencia de antialiasing a pantalla completa (algo poco o nada usual en esta plataforma), iluminación dinámica de los personajes y un frame-rate medio de 30 fotogramas por segundo para una media de entre 30.000 y 50.000 triángulos por segundo. Lo cual, en principio, suena ciertamente prometedor. Ahora sólo nos falta ver si la versión definitiva cumple con las expectativas que este juego genera no sólo para las ingentes cantidades de aficionados de Star Wars sino también para los amantes de los buenos juegos de acción. La caza del extraterrestre ya ha empezado.
Star Wars Bounty Hunter (GameCube, PS2)