Nuevas esperanzas en el mundo de la aventura

Hay pocos aventureros que no acusen la falta de novedades aventureras, puras, muchos se conforman con híbridos que apenas ofrecen dificultad en lo que a desgaste neuronal se refiere, otros, los muchos, nos refugiamos en las viejas glorias y antiguos éxitos que almacenamos con mimo y cuidado para capear la pertinaz sequía que nos acucia.

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Hace no mucho tiempo se comenzó a hablar de un juego hecho en Francia, Syberia era su nombre y lo poco que se sabía de él era que se trataba de una aventura gráfica y unas pocas imágenes que, a la mayoría, nos hacían soñar con tiempos mejores. Muchos de nosotros nos temíamos lo peor, una aventura francesa, unas imágenes de calidad innegable y la empresa Microids y Cryo de por medio...

Aquello podría ser otro "Lost Eden" o, peor aun, otro clónico de Myst (arde en el infierno, condenaste a todo un género). Con el tiempo las noticias se tornaron prometedoras, las imágenes que habíamos visto eran fondos prerenderizados y el sistema de juego no era un VR al estilo de Cryo, todo lo contrario, era un "point'n'click' de toda la vida y acompañado con lo mejor que puede dar la aventura gráfica: historia, diálogos, cantidad ingente de información y buena música...

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El caso es que tras unas semanas sin saber de él y con el juego a punto de salir, se conoció la triste noticia de la bancarrota de CRYO por lo que todos vimos en globo el lanzamiento de la aventura. Muchos se compraron el juego de importación,  otros aprovecharon vacaciones en las tierras del norte y lo buscaron en las tiendas y otros simplemente se aguantaron y esperaron a ver que pasaba. Y lo que nadie esperaba, pasó, Ubi Soft España consiguió los derechos de distribución y por esa razón estoy aquí, compartiendo con vosotros mis experiencias.

Guión

Syberia nos transporta a algún sitio de Francia, donde hay un pequeño pueblo cuyo sustento se centra en una impresionante fábrica de autómatas, creaciones mecánicas que han alcanzado una perfección tal que son capaces de realizar las funciones más dispares y complicadas, desde ser un  sello de caucho a un jardinero, una escalera mecánica, un maquinista con complejo de C3PO o un sistema de control. 

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Hasta este pueblo llega nuestra protagonista, Kate Walker, una joven abogada de Nueva York para solucionar el caso que le haga ganar prestigio en su bufete. En principio se trata de una misión sencilla, llegar al pueblo, firmar los contratos que traspasarían la fábrica a los clientes que representa, una multinacional juguetera, e irse de vuelta a casa. Evidentemente, todo se complica, la dueña de la fábrica fallece y a su muerte revela la existencia de un hermano al que todos dan por muerto y que, por lo tanto, es el nuevo dueño de la fábrica. Kate comenzará una búsqueda por todo el mundo en pos de un supuesto hermano que la llevará a situaciones y lugares muy diversos: Francia, Alemania, Rusia, una universidad, estaciones de trenes que a la vez son reservas botánicas y biológicas, pueblos con extrañas tecnologías y un largo etcétera.

Al principio la historia no parece gran cosa, incluso insulsa, pero a medida que vamos avanzando en el juego y nos es suministrada más información, comenzaremos a vislumbrar una aventura coherente, inteligente, interesante y llena de detalles que aportan una riqueza realmente impresionante. Nos encontraremos con llamadas de teléfono de nuestros conocidos y familiares, que en sí mismas no aportan nada, pero dan una profundidad al personaje que no suele ser tratado en otros juegos. Podemos decir que estas llamadas crean una vida al personaje en la que la mayoría de las veces ni reparamos, en Syberia, sin embargo, nos la ofrecen en pequeñas dosis y, en cierto modo, conocemos mejor a Kate.

Audio y vídeo

Gráficamente está a la altura de las expectativas, fondos pregenerados con todo lujo de detalles, entornos realistas y edificaciones espectaculares y diversas, desde la clásica arquitectura modernista a la más austera arquitectura soviética. Los personajes, por el contrario, están desarrollados en 3D en tiempo real y montados sobre esos fondos pregenerados. La verdad es que no es un método nuevo y que, como en ocasiones anteriores (The Longest Journey, Grim Fandango), da muy buenos resultados. Lo único que se echa de menos es una mayor vida en los fondos que, salvo honrosas excepciones, son total y absolutamente estáticos, por lo que puede resultar un tanto soso en ese aspecto, pero como la historia y los personajes son suficiente buenos, el problema casi no es apreciable.

Aquellos poseedores de una tarjeta gráfica capaz de hacer suavizado de contornos están de enhorabuena ya que este juego se beneficia al 100% de este aspecto. Si bien la opción que viene incluida en el juego no funciona todo lo bien que debiera (yo no noté mucha mejoría) si es cierto que si activamos la opción de antialiasing en las opciones avanzadas de nuestra tarjeta podremos disfrutar de unos personajes perfectos y sin molestos dientes de sierra.

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En cuanto a lo referente a los personajes, ¿qué puedo decir?, pues que son muy buenos, sobre todo Kate, que tiene una cara preciosa y muy bien formada. Las texturas también son excelentes, superando a anteriores aventuras similares, que solían conformarse con cosas realmente planas y sin relieve, en Syberia encontraremos calidad por todas partes.

Los vídeos introductorios y de transición son excelentes, de gran calidad y muy bien realizados, aunque esto es marca de la casa, porque Microïds siempre ha destacado por la calidad de los mismos. Y, aunque sean tradición en la productora, no quitan para que lleven la historia y la experiencia de juegos muchos pasos adelante. Además, y a diferencia de otros juegos, los vídeos se reproducen con suavidad y sin parones, y sin tener que tocar opciones de calidad o algo así. Aún recuerdo que en TLJ era complicado ver los videos a todo tren por que se atascaban, había que verlos con ese molesto modo entrelazado.

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Si hay que echarle en cara algo a este juego es el apartado sonoro, no por malo, si no por escaso, y es que parece que hoy en día no se premia al jugador con música durante todo el juego, más bien se ha optado por la fórmula de ofrecer pequeñas composiciones que se presentan en momentos puntuales para acentuar o enfatizar lo que sucede en la pantalla. La verdad es que los efectos están bien, son correctos y cumplen su función a la perfección. Pero la música, aunque escasa es excelente, cuando suena se deja escuchar con deleite, mención a parte tiene todo el concierto de Helena Romanski en la fábrica o la música al final del juego, se te llegan a erizar los pelos.

La adaptación a nuestra lengua ha corrido por cuenta de Ubi Soft, que, aunque la gente no lo crea, ha hecho un gran trabajo. Hoy en día siempre encontramos detractores del doblaje de juegos, siempre diciendo que se pierde calidad o sentido. Bueno, no soy quien para llevarles la contraria, pero sin duda alguna creo que han conseguido muy buenos resultados y que las voces han quedado excelentes. ¡Ah!, además la mayoría de ellas son conocidas, así, que recuerde, hay voces que habremos oído en Monkey island (Sopabuena y la dama del vudú) o en Broken Sword (George Stobbard es inconfundible)... En resumen, un buen ejemplo de cómo hacer las cosas, quizás no llegue a la altura de TLJ, es muy difícil, pero sin duda alguna tiene personalidad propia.

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Estrategia y trucos

Como cualquier aventura gráfica, se trata de ir con paciencia, escuchar todos los diálogos y agotar todas las posibilidades de diálogo. En Syberia los atascos no son difíciles de solucionar. La mayoría de las veces, si no todas, tendrás no más de cuatro lugares que visitar y dos o tres personajes con los que hablar, así que simplemente debes ser metódico y no desesperarte ya que, aunque no lo creas, casi todos los enigmas de este juego son de una lógica aplastante, más o menos.

Si en algún momento te atascas tienes dos opciones, la solución de los cobardes es ir a la magnifica solución que he escrito, ahí podrás solucionar sin problemas toda la aventura. Eso sí, olvídate de la diversión y la satisfacción que da desentrañar un enigma que te ha tenido acorralado durante un par de días. La segunda opción es la que todos deberían seguir, olvidarse de soluciones (eso es para los novatos) y romperse el coco.

En realidad no hay que romperse nada, como ya he dicho, sólo debes ir con cuidado, escuchar todas las conversaciones con cuidado, tomar nota de los detalles importantes y usar papel y lápiz, en este juego ayuda MUCHO el viejo método de apuntar las cosas y las conversaciones. Léete, de verdad, todos los papeles, documentos y libros que consigas porque muchos diálogos se activaran si has leído lo que te dan, hombre, evidentemente se activaran con que pases por cada una de las hojas del documento, pero no tiene sentido que se active una conversación y no sepas la razón de su activación.

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Jugabilidad

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Syberia es una aventura clásica en todos sus aspectos, basada en el conocido point'n'click  y simplificado hasta el extremo. Se echan en falta más opciones de interacción con los objetos que recogemos, no se pueden observar las cosas una vez recogidas, excepto los documentos que podremos leerlos cuantas veces queramos.

El caso es que al quitar esas opciones se simplifican bastante las cosas, cuando queremos usar un objeto con algo del entorno tan sólo tendremos que seleccionarlo del inventario (botón derecho del ratón), pinchar sobre él y después pasar el objeto sobre donde queramos y el icono del ratón nos indicará si la cosa marcha bien o no. Si es que no, pues a probar con otra cosa, aunque esta aventura no es de las de ir probando todo con todo, ya que rara vez tendremos más de cuatro o cinco cosas en el inventario y si unes eso a las pocas localizaciones que tienes a la vez, pues te deja con que los atascos son poco frecuentes.

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Las conversaciones han sido resueltas de un modo que a mí no me llega a encantar, aunque hay que reconocer que es, cuanto menos, sencillo y directo. Cuando hables con alguien saldrá una libretita con los temas que puedes tratar, lo único que tendrás que hacer es pinchar sobre el tema y el resto lo hace el juego. Sí, ya, a mí me resulta un tanto pasivo pero bueno, es el sistema elegido.

El inventario, como ya he comentado, es muy sencillo. Se saca con el botón derecho del ratón y se divide en dos zonas bien diferencias, la primera es donde residen todos los objetos, llaves y similares que encontramos mientras jugamos, la segunda es donde se almacenan todos los documentos, papeles, y libros que encontremos o nos den. Es desde donde los leeremos y desde donde los usaremos si es preciso. Así mismo, el entorno del inventario nos da paso al menú de salvar y cargar. Muy cómodo, ¿verdad? Y hablando de salvar y cargar, estas opciones son muy rápidas, creo que son, con diferencia, las más rápidas que he visto en una aventura, no es de esos juegos que da pereza cargar una situación anterior ya que es casi inmediato, pinchas sobre el salvado y ya está, un par de segundos y a jugar.

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Como nota discordante en todas estas alabanzas hay que decir que el juego tiene algunos errores de bulto bastante molestos, el más importante es que se da en la zona de lanzamientos espaciales, si no haces las cosas en un determinado orden puedes despedirte de finalizar el juego, yo mismo me encontré en una situación en la que el cosmonauta desaparece y no vuelve a vérsele, siendo este un elemento imprescindible para terminar con el puzzle que él mismo te ha puesto.

Comparado con...

Supongo que por similitudes lo compararé con The Longest Journey, ya que ambos juegos se mueven en el terreno de lo fantástico y los dos están protagonizados por una atractiva joven que viene de fuera. Bueno, el caso es que ahí se acaban las similitudes, ambas aventuras son geniales, pero no por gustarte una te debe gustar la otra. Recordemos que TLJ tiene muchísimos diálogos, largos y para algunos tediosos, Syberia apenas tiene diálogos y nunca tienes control sobre la conversación, es decir, tienes control sobre el tema de la conversación pero no sobre lo que dices. En cambio el presente juego nos ofrece cantidades ingentes de información escrita, mucha, tanta que en ocasiones puede resultar molesta para aquellos que prefieran escuchar a leer.

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Gráficamente creo que ambos están a la misma altura, Syberia gana en las texturas y modelos de personajes y TLJ lo hace en lo relativo a fondos llenos de vida y movimiento. Los dos derrochan imaginación y variedad. Ambos juegos ofrecen mucha diversión y calidad, así que, en resumen, si no tienes ninguno de los dos, pues cómpralos.

Lo único determinante para comprar uno u otro, a parte de los gustos personales de cada uno, es el precio. Mientras que TLJ tiene un precio más que envidiable, 9.95€, menuda ganga, Syberia nos costará la friolera de 50€, una cantidad muy alta para mi gusto, pero seguro que todo fan de la aventura está dispuesto a rascarse el bolsillo si merece la pena y creedme, esta justificado, lo pasaréis bien y no os defraudará.

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Lo que está bien

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Lo que no está tan bien

Manual

Bastante escaso en cuanto a manual, la verdad es que por los 50€ que te cascan por el juego podrían estirarse un poco más, ya que hablamos de un manual de doce carillas a tamaño CD en las que básicamente te explican a instalar el juego (a estas alturas con eso) y a usar los controles. Vamos, que el manual viene metido en la solapa del CD.

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