Las leyendas nunca mueren, incluso las del wrestling...

Después de Playstation 2 y Game Cube, llega a Xbox el juego "Legends of Wrestling". Los más talluditos recordaréis con cariño que durantes los primeros años de la televisión privada en España, Telecinco nos deleitaba los fines de semana con los clásicos combates de "pressing catch". Muchos de nosotros aún tenemos grabados en nuestra retina maravillosos combates entre el Último Guerrero y Hulk Hoogan, los cortes de pelo que Brutus "el barbero" dedicaba a los luchadores a quienes vencía o como Terremoto Eartquake dejaba sin respiración con su clásica sentadilla a todo rival que se le ponía enfrente.

Este deporte-espectáculo, de gran fama en Estados Unidos y México, quizás esté ya algo olvidado por nuestras tierras, pero para eso están videojuegos como éste que nos refrescan la memoria.

Legends of wrestling nos mete en el papel de más de 40 clásicos luchadores de wrestling de los años 80 y 90 (época dorada de la ya desaparecida World Wrestling Federation, ahora WWE) en liza por conseguir el título de campeón mundial. El juego nos propone los siguientes modos de juego:

g r á f i c o s
Siguiendo la tónica del juego, el apartado gráfico presenta un aspecto lamentable. Comenzando por los luchadores que son representados como caricaturas de los mismos, con unos polígonos demasiado grandes y con un aspecto bastante irreal. Además, todos los luchadores son bastante parecidos entre sí (los hay altos y bajos, gordos y flacos y combinando estas cuatro características se realizan todos los modelos) y la representación facial es bastante pobre. Si a esto le añadimos pocos escenarios para los combates, público únicamente en las dos primeras filas, unos movimientos torpes, lentos y mal representados y los graves fallos en el sistema de cámaras completan un apartado gráfico para olvidar.

m ú s i c a
Francamente pobre. Un poco de música hardcore (música, no canciones) repetitiva y sin ningún viso de calidad. Por lo menos podemos escuchar las canciones que hayamos grabado al disco duro de la consola.

s o n i d o  f x
Prácticamente inexistente. En la versión de Xbox ni siquiera existe un speaker que nos fuese narrando los combates, al contrario que en la versión de Playstation 2 donde al menos aparecían los comentarios de un speaker estadounidense. De este modo, los efectos de sonido se ciñen a los golpes, los gritos o abucheos del público y los anuncios de los luchadores al inicio de cada combate.

j u g a b i l i d a d
En un primer momento y antes de tener un primer contacto con el juego esperaba que poder luchar con algunos de los más carismáticos wrestlers de la historia sería aliciente suficiente para valorar alto este juego. Pero al poco de jugar uno se va dando cuenta de los múltiples defectos que atesora este juego. Los personajes tardan en responder a las acciones y muchas veces actúan por su propia cuenta, ejecutando golpes que ni por asomo habíamos intentado realizar. El sistema usado para la lucha, donde los personajes se agarran y forcejean es muy repetitivo, además de que es bastante fácil ganar siempre esos forcejeos que acabaran con el contrario besando la lona, y por ende, es bastante fácil pasar y pasar combates del juego con la misma repetitiva mecánica, lo cuál aburre pronto.

Si a todo  esto le unimos los escasos modos de juego (ni siquiera hay modo entrenamiento), donde los más atractivo es subir a tu casa a unos colegas y disputar unos combates, el balance general es bastante pobre.

c o n c l u s i o n e s
Con todo lo comentado anteriormente, la valoración de este juego no puede ser más que negativa. Pocos modos de juego, apartados gráfico y sonoro bastante pobres y un sistema de juego aburrido y repetitivo. Si te gustan los juegos de lucha libre puede ser mejor que pruebes con UFC Tapout (aunque tampoco sea ninguna maravilla) y si lo que te gusta son los juegos de lucha en general, será mejor que te decantes por Dead or Alive 3 o que esperes a después del verano para que lleguen al mercado futuras joyas (o eso esperamos) como Soul Calibur 2, Kakuto Chojin o Tao Feng.