Magic Online inicia su fase comercial

Después de una de las betas más complejas que se recuerdan para un videojuego, tal y como indican las vertiginosas cifras recogidas a lo largo de seis meses de tests con 60.000 jugadores a lo largo de 24 horas diarias, nace oficialmente Magic: The Gathering Online.

Magic, para los que no lo conozcan (¿existe alguien?), es uno de los mayores inventos en el terreno del entretenimiento nacido en esta última década. Se trata de un juego de cartas coleccionables, con hechizos, criaturas, artefactos? que se alinean con la imaginación el jugador para hacerlo más poderoso que su adversario, algo que se demuestra si eres capaz de reducir los puntos de vida iniciales del oponente (20) a 0, antes de que él haga lo propio contigo. El juego ha dado multimillonarios beneficios a Wizards of the Coast, la propietaria de los derechos, que invirtió sus beneficios en la adquisición de compañías tan significativas en los juegos de rol como TSR. Son cientos de miles los jugadores que juegan diariamente en todo el mundo a Magic, intercambiándose sus cartas y sorprendiendo con poderosas combinaciones.

Magic Online trae todo el espíritu de los torneos de cartas al PC. Básicamente se trata de convertir las cartas físicas en cartas virtuales con la misma funcionalidad que las actuales. Así el juego incluirá 1.500 cartas perfectamente digitalizadas, intercambio de cartas, ligas, torneos, sistema de ranking mundial, gestión automática de las reglas del juego para no tener que pensar en que o no se puede hacer, chats privados, tutoriales para iniciados, selección del jugador según sus conocimientos en las cartas, biblioteca para controlar tus propias cartas físicas, etc?

En cuanto a los costes seguirá fiel al juego de cartas, con un precio de 15 euros para disfrutar del programa, el manual y una baraja prefabricada. Los sobres de las diferentes colecciones costaran 3,30 euros (con 15 cartas) y las barajas, 10 euros (con 60 cartas). Sin duda alguna es un juego que supone una revolución. Por un lado al traer con una fiabilidad pasmosa un juego con una complejidad en cuanto a reglas sin precedentes. Por otra por inventar un nuevo sistema de pago para los juegos persistentes online, donde el jugador paga por lo que adquiere en lugar de tener una cuota mensual fija. El tiempo dirá si la gente es capaz de pagar por algo virtual.