Carmack justifica los requisitos de Doom III

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Tras el estelar paso de Doom III por el E3 de Los Ángeles, John Carmack habló en un foro sobre los requisitos mínimos de este juego. El programador reconoce que saben que habrá usuarios que no podrán jugar por los elevados requisitos hardware, pero opina que su decisión es correcta. Pensando en todo lo que quería introducir en el nuevo engine, era necesario pedir como mínimo una tarjeta gráfica con procesador GeForce o Radeon 7500. De hecho, al inicio del desarrollo John hizo algunas pruebas con hardware Voodoo, TNT y Rage128, pero el aspecto conseguido no llegó a lo que él quería ofrecer.

El problema está en la libertad que puedan tener los artistas y diseñadores. Si se permite hardware de menor potencia, tendrán que valorar además de la jugabilidad y la estética el rendimiento. De esta forma, la plataforma media para la que han desarrollado desde el inicio ha sido una GeForce 3 o Xbox. El hardware menos potente podrá desactivar algunas opciones, y los afortunados con máquinas más potentes podrán conseguir más imágenes por segundo y una mayor calidad. A pesar de esta decisión, los diseñadores no podrán olvidar el efecto sobre el rendimiento de sus creaciones, ya que afectará más que en Quake III.

Otro factor que han valorado en id ha sido que veremos juegos creados con el engine de Doom III hasta cinco años o más después de cuando se tomaron las primeras decisiones sobre el diseño. Ya ha pasado con los juegos que usan el engine de Quake III, con estudios que han lanzado dos generaciones de productos, y ahora prevén que se repita con el engine de Doom III. Así que aunque inicialmente los requisitos hardware mínimos pudiesen parecer demasiado elevados, en unos años quizás parecerán demasiado asequibles.

El último tema que tocó John fue la versión del engine para Linux. No lo llegó a confirmar al 100%, pero es casi seguro que lanzarán una versión del juego para Linux, aunque inicialmente sólo funcionará con los drivers NVIDIA.