Exhibition of Speed
- PlataformaDC4
- GéneroConducción
- DesarrolladorTitus
- Lanzamiento28/05/2001
- TextoEspañol
- VocesInglés
Limitado recital
Exhibition of Speed viene a rememorar los buenos momentos que el género de la conducción ha dado a todos los usuarios de Dreamcast con juegos como SEGA Rally 2, MSR, Ferrari F355 pero con un marcado carácter arcade....
Dreamcast ha sido una consola muy prolífica en juegos de conducción desde sus inicios. Así lo demuestran grandes títulos de este género como SEGA Rally, Metropolis Street Racer, Ferrari F355 o el más reciente Daytona USA. Todos, en mayor o menor medida han demostrado ser buenos títulos con una gran aceptación entre el usuario, independientemente que fuesen simuladores (como Ferrari F355) o arcades (como Daytona USA) de conducción.
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Tras casi año y medio de desarrollo, Player 1 Games, bajo el auspicio de Titus, presenta un juego que retoma la filosofía de la conducción arcade y junto con otros elementos como el justo toque humorístico o un modo principal muy consistente, intenta hacerse en hueco en el difícil mercado de Dreamcast.
En un principio, Titus para reforzar el feeling del juego, planeaba hacerse con licencias de grandes fabricantes de automóviles, como Mitsubishi, Ford o Alfa Romeo, para incluir coches reales en el título, pero finalmente esto no ha fructificado y todos los modelos que aparecen en EOS son ficticios.
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Exhibition of Speed es bastante económico a nivel gráfico. La ambientación de sus 15 circuitos es variada, con pistas que cruzan estaciones de ferrocarrill, campo a través, paisajes helados o modernas ciudades. Destaca negativamente la aparición de un cansino poping en los fondos que es algo imperdonable a estas alturas. Los modelados de los coches son de calidad, resultante de unas texturas correctas y una buena manita de antialiasing, que se echa en falta en otra consola de nueva generación.
El motor del juego no puede evitar que de cuando en cuando aparezcan unos monumentales slowsdowns que ralentizan el juego de una forma terrible. También hay que tener en cuenta que únicamente pueden participar 6 coches por partida, lo que no debería suponer una sobrecarga poligonal excesiva. Eso unido a que el juego no llega ni de lejos, a moverse a 60 frames por segundo, nos hacen dudar de la eficacia del trabajo hecho con el motor gráfico.
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El juego ofrece 3 perspectivas distintas dos exteriores a dos distancias y una interior, bastante cómoda para el manejo. También aparece la posibilidad de asignar la cámara a una perspectiva trasera que nos de contacto ocular con nuestros perseguidores.
Hay que destacar el cuidado con el que se representa al conductor en las vistas exteriores, a quien puede verse manejando el volante con movimientos acordes al desplazamiento del coche, si conducimos un modelo descapotable.
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La banda sonora del juego está compuesta por temas de corte dance y techno, pero de inicio sale con un volumen muy bajo, y habrá que subirlo para poder apreciarlo. Tampoco tienen un papel muy llamativo porque durante las carreras el papel principal lo lleva el sonido fx, con un resultado bastante triste.
Nada del otro mundo. El catálogo de efectos es bastante limitado y se reduce a los típicos ruidos de motor subiendo de revoluciones, a chirriar de ruedas y a colisiones entre los coches. También aparece un speaker que nos da la salida antes de la carrera, pero sólo en inglés. Muy flojo.
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Exhibition of Speed ofrece 3 modos, Thropy, carrera rápida y contrareloj. El primero de ellos es el más interesante, y en él podremos escoger a uno de los 8 pilotos disponibles (incluso personalizarlo y cambiarle el nombre) y sumergirnos en una aventura en busca del campeonato de la primera división de carreras. Pero como mandan los cánones, habrá que empezar desde abajo, con uno de los peores coches y poco a poco ganar dinero e ir mejorando nuestro vehículo.
Los otros dos modos poco más dan de si. La típica carrera contrarreloj para hacernos con los circuitos y dejar patente nuestra capacidad para reventar los registros, y el modo carrera rápida, que hará las delicias de hasta 4 jugadores, con las pertinentes limitaciones gráficas.
El control del juego es arcade total, nada de física ajustada ni de conducción realista. Con soltar levemente el botón de acelerar podremos enfrentarnos a cualquier curva con resultado óptimo, y si no, en la colisión asistiremos a un recital surrealista, ya que los vehículos se comportan muy extrañamente y a las primeras de cambio salen volando por los aires y dando vueltas (!!!). Hablando de los vehículos, después de quitarnos la golosina de los modelos reales, éstos han sido reemplazados por coches ficticios y de corte tirando a simpático más que al realismo que se hubiera transmitido con las marcas reales.
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En definitiva, pocos modos de juego y un contol arcade muy sencillo de manejar es lo que ofrece Exhibition of Speed en este apartado.
c o n c l u s i ó n
Conforme está el patio de la conducción arcade en Dreamcast, diríamos que EOS no ofrece nada nuevo al género, más bien, en muchos aspectos hay varios pasos atrás, como por ejemplo un apartado gráfico muy débil.
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La principal novedad que el juego iba a incluir, como era la aparición de coches reales de fabricantes como Mitsubishi o Alfa Romeo, finalmente ha quedado en agua de borrajas, por lo que el juego queda bastante "vacio".
Únicamente el modo Thropy se salva de la quema, ya que podremos ir comprando nuevos vehículos, correr temporada tras temporada e ir subiendo de división y da una cierta continuidad al juego. En cambio los otros dos modos, a pesar de lo divertido que es jugar a 4 jugadores, no ofrecen muchos alicientes.
Recomendado sólo a los aficionados a la conducción arcade que quieran ampliar su catálogo, porque el resto quizá puede esperar a crazy taxi 2 o contentarse con las ofertas que ofrece el catálogo de la blanca de SEGA en estos menesteres.
Mediocre
Podía ser pero no ha sido y tras pasar unos breves minutos con él quedará archivado en la estantería para no jugarlo nunca más. No lo compres, no digas que no te lo advertimos.