Mumbo Jumbo nos presenta Myth III

Myth fue la pieza clave sobre la que cimentó lo que es Bungie hoy en día. Cuando esta fue adquirida por Microsoft y perdió los derechos de Myth los muchos aficionados que tiene esta saga se temieron lo peor, pero Gathering of the Developers, la compañía sobre la que recayeron los derechos, no estaba muy por la albor de dejar abandonada una licencia tan jugosa, así que asignó la complicada tarea de realizar un nuevo Myth a uno de sus estudios, Mumbo Jumbo.

Con ya un 50% del juego realizado, lo que se pudo ver en el E3 puede dejar bastante satisfechos a los seguidores de la serie porque parece que Mumbo Jumbo está haciendo grandes esfuerzos por no tocar demasiado aquellos detalles que han hecho grande a la saga a pesar de haberle incorporado un engine completamente nuevo en el que las unidades pasan de ser sprites para convertirse en seres poligonales.

Gracias a este nuevo engine las unidades presentan un gran aspecto y, pese a que Myth III es una precuela que acontece 1000 antes de los sucesos acaecidos en el primer Myth, hay muchas unidades que familiares que se podrán ver como nunca antes, como pueden ser los famosos enanos bombarderos.

El terreno es absolutamente interactivo y deformable, de modo que cosas como explosiones tendrán un efecto palpable sobre este y demás objetos del escenario como arboles o rocas.

En cuanto a la historia se está realizando un elaborado guión que mete muchos de los elementos vistos en la primera y segunda parte de Myth, aunque al ser una precuelaveremos cosas como que varios de los señores caídos están de nuestro lado, líderando los ejercitos que intentan defenderse de los ataques de los Myrkridia y los Trow.

Definitivamente, el juego ofrece un aspecto prometedor a falta de terminar muchas cosas y de construir por completo aspectos tan importantes como el juego online. A propósito de este, el juego llegará con un editor de emisiones para que los muchos aficionados que han hecho mods para Myth II puedan seguir haciendolo, así que solo nos queda esperar que el juego cumpla lo prometido y sea fiel a la saga de la que toma nombre.