South Park Rally

AL más puro estilo Mario Kart viene la pandilla de South Park para demostrarnos su versión de la velocidad, los circuitos y las pruebas que todo juego de karts tiene. Ni que decir tiene que las armas e ítems aquí utilizados son un fiel reflejo de la serie y de su sentido del humor.

Podremos escoger entre 30 personajes entre los que se encuentran los principales protagonistas de la serie, así como Wendy, el Chef, el Oficial Barbrady, Tio Jumbo, así como Jesús (que corre en una nube), Satán, un alien, el abuelete de uno de los críos que compite con su silla de ruedas (¡por Dios, que se va a matar!), un bebe en su cochecito, etc. Sólo los principales personajes serán accesibles desde el principio y los demás (más de la mitad) habrá que ganárselos a pulso, pero merecen la pena.

Los ítems a utilizar están en consonancia con la serie y podemos acarrear hasta 3 (tres). Si en otros títulos es una burbuja de energía, una barrera o un superpoder lo que nos da fuerzas y nos protege de los ataques de los rivales, en esta el encargado de esa labor no es otro que el Sr. Mojón (y el que no sepa quién es que le pregunte a un amigo que si vea la serie).

Se puede lanzar contra nuestros enemigos desde los tradicionales globos de agua (que tiernos), a Sparky el perro, que morderá a su presa y no la dejará seguir, e incluso podemos mandar a Frida la tunanta, una prostituta (como lo has leído) que se engancha a los rivales y les transmite un infección de herpes. Como lo lees.

Para huir de los rivales tenemos la cafeína turbo, el gordoglobo 4000 o la diarrea explosiva, ítems que nos darán un punto de velocidad y poderío que antes no teníamos.

Podemos también dejar "regalitos" en la pista a la espera de que un incauto los acepte sin más miramientos. Desde vómitos a los restos de una diarrea, darán más de un susto a los incautos conductores. Ya sabes: "...precaución, amigo conductor, la senda es peligrosa..."

No todo son parabienes, y alguna caja está trucada y a la espera de provocarnos visiones confusas (el rostro de Saddam Hussein por todos lados) que nos dificultan la carrera.

Y por último, podemos dejar fritos a los rivales que nos preceden en carrera con un rayo láser que sale de una sonda anal. Sin comentarios.

La presentación se asemeja a la de un episodio, y una vez vista, nos disponemos a meternos en el fabuloso y malhablado mundo de South Park.

GRÁFICOS

Estos gráficos son una chufa!!!. Pero es que son como tienen que ser. Me explico. Si así son en la serie, así son en el videojuego.

Tanto los decorados como los personajes se han pasado a un entorno 3D que no deja de ser novedoso, con respecto a la serie de TV, pero que es lo que es, y no va más allá para así mantenerse fiel a unos dibujos y a unos personajes que así lo requieren. Para experiencias gráficas más bonitas ya están otros títulos.

Los decorados de los circuitos recrean el pueblo y sus alrededores. La siempre nevada villa de South Park ve sus calles tomadas por estos locos del volante y algún que otro autobús escolar o máquina quitanieves que estorba más que una vaca en el pasillo de casa.

La información que nos brinda el juego en pantalla es la correcta y a veces sin ella estaríamos perdidos. Podemos ver el estado de la carrera en todo momento (as cuatro primeras posiciones). También un simple mapa que nos vendrá muy bien en todas las carreras, así como la información adicional de nuestro siguiente objetivo y los ítems que llevamos.

MÚSICA

La música es desenfrenada como corresponde a un juego de este tipo y se le ha dotado de un tema especial para la presentación del juego. Todo un detalle.

Temas en los que predomina el banjo y que parecen sacados de cualquier capítulo de la serie, aunque todos son bastante parecidos.

EFECTOS FX

Todos. Es decir, todos los ruidos, ya sean de vómitos, de pedos, etc. están incluidos en el juego y han sido grabados por sus creadores para mayor gloria de su nombre.

Además el hecho de venir sin un doblaje al castellano hace que disfrutemos de las voces originales, como no, grabadas por sus creadores, como mandan los cánones. Quizás esto disguste a muchos que piensan que las voces originales no difieren mucho de las que oímos por estos lares, pero otros preferirán escuchar los exabruptos de Cartman en inglés original.

JUGABILIDAD

La gran diferencia que tiene este título con los demás videojuegos de Karts es que en todos los demás, las distintas competiciones se basan en dar unas cuantas vueltas a un circuito predeterminado, quedar clasificado en un cierto orden y acumular puntos para que la clasificación final sea todo lo buen que podamos.

En South Park Rally las cosas no son así. En primer lugar en las pruebas no vale ser segundo: hay que ganar. Y esto nos abre las puertas de la siguiente prueba.

En segundo lugar las pruebas no son "da tres vueltas al circuito y queda el primero". Bueno, de esas también hay, pero son las menos. La mayoría de ellas tienen nombres extraños y difieren un montón de lo que es una carrera convencional. Carreras en las que habrá que recoger objetos por el circuito y ser el primero en llevarlos a un punto de control, con la salvedad de que los demás nos lo pueden arrebatar chocando con nosotros o lanzándonos algún tipo de arma extraña.

Si bien las que se asemejan a una carrera tradicional se basan en el paso ordenado por varios puntos de control que hay diseminados por la ciudad, estos puntos pueden ser modificados y hacer que aparezcan de forma aleatoria en sucesivas partidas. Lo que consigue darle un poco más de vida a este título. Pero como ya hemos dicho, este tipo de carreras son las menos.

Así nos encontramos con la carrera de las vacas locas, en las que todos los participantes están infectados de este mal y necesitan el antídoto. Lamentablemente sólo hay uno y tendremos que cogerlo y tenerlo en nuestro poder hasta que nos curemos. Si lo perdemos tendremos que quitárselo al rival que lo tenga para hacerlo nuestro y conseguir la curación. En otra, sin embargo, hay que coger 20 (veinte) pavos y llevarlos hasta un punto de control donde hay que dejarlos. Es la carrera del Día de Acción de Gracias y en este caso, como es una obra benéfica, no les podemos robar los pavos a nuestros contrincantes. Otra que merece especial mención es la de la víspera del Año Nuevo del Milenio, en la que Satán va a destruir el mundo y para impedírselo hay que evitar que leve la llave dimensional durante dos minutos, así que hay que quitársela y custodiarla nosotros durante ese tiempo.

Pero donde ya radica el premio a los aficionados a la serie TV es la opción de varios jugadores (2 ó 4) y con los que las cotas de diversión se disparan automáticamente, dividiendo la pantalla en las partes necesarias, con la consabida reducción de tamaño pero con la desaparición de la "mala leche" artificial por la "mala leche" animal de los amiguetes que nos acompañen en la partida.

Matt Stone y Trey Parker pueden estar contentos. El trabajo de Tántalus ha sido de lo más efectivo. Y las horas de diversión que provoca el juego son una garantía para todos los amantes de South Park.

Este es un juego que los seguidores de la serie no deben perderse. Ya sabemos que los hay mejores pero en cuantos de ellos los comentarios están censurados con el célebre píííííííí...