Estrategia en Chicago, años 20

El género de la estrategia en tiempo real que tan buenos títulos nos ha dado en los últimos años, parece que empieza a estar algo saturado y se impone ya la aparición de un título que lo renueve y se convierta en un nuevo referente como en su día fue Dune o Warcraft. Street Wars no consigue aportar nada nuevo en este panorama limitándose a seguir con las reglas ya establecidas para este tipo de juegos, pero esto es algo que tampoco podemos censurar demasiado ya que una superproducción como "C&C Tiberian Sun" no ha logrado tampoco añadir ningún elemento nuevo al género.
Eso sí, Street Wars es un título no muy brillante pero con el que no nos vamos a aburrir en absoluto si su temática nos atrae, buenos gráficos, doblaje perfecto de las voces, jugabilidad correcta y sobre todo un gran derroche de humor, punto este que quizás sea el más destacable del juego.

En este caso nos encontramos en los años de la ley seca y con varias ciudades en las que hacer fortuna convirtiéndonos en jefes mafiosos, esto lo tendremos que conseguir introduciéndonos en la construcción de negocios para financiar nuestra organización y tratar de imponernos a las demás familias establecidas en nuestra ciudad.
 

Descripción General:
Nuestra economía se basará en el cobro del alquiler de los distintos negocios que podemos construir: Garitos, Fondas de Caridad, Restaurantes, Salas de Billar, Peepshows… y otros edificios que nos permitirán desde crear recursos como la Fábrica de Cemento hasta ocultar los cadáveres de nuestras víctimas caso del cementerio. Para construir y mantener nuestras propiedades, nos hace falta mano de obra formada por obreros y reparadores.

Resumiendo, más de lo mismo en el mundo de la estrategia en tiempo real pero en este caso dentro de una temática que se desmarca de orcos, tanques y naves espaciales que tanto pueblan nuestras pantallas, eso sí Street Wars no termina de conectar con el jugador y durante su desarrollo se tiene un poco la impresión de caos ante todo lo que se nos pide que controlemos en tan poco tiempo y no pasará a la historia ni mucho menos pero es un juego agradable, bien resuelto técnicamente y lo bastante atrayente para los no muy expertos en este género.
 
 
 
Audio/Vídeo:
Vídeo y audio se mantienen en la misma tónica que el resto del juego, la corrección sin ningún tipo de alardes. Los gráficos de Street Wars no presentan ninguna exquisitez en el aspecto técnico ni están llamados a hacer historia pero resultan agradables y simpáticos tanto el diseño de los personajes como el de los edificios que podemos construir, dando como resultado un look bastante colorido y animado a las ciudades que nos encontramos a lo largo del juego.

En cuanto al sonido, tanto los efectos como la música están bien resueltos acompañando correctamente las distintas situaciones que se nos presentan en el desarrollo de la acción. Las voces, perfectamente dobladas al castellano son un punto a favor de Street Wars, estas voces incluyen algún guiño a la más célebre película de gángsters de todos los tiempos: "El Padrino", detalle que es de agradecer.
 

Estrategia y trucos:
¿Que se puede decir de la estrategia a seguir en este tipo de juegos que no sea conocido? Construir, asegurar nuestras construcciones contra los ataques del enemigo y cuando tengamos una banda de gángsters lo suficientemente fuerte atacar a la banda rival. Hay que tomar especial cuidado con las quejas de nuestros inquilinos y con nuestra economía, por lo demás es un juego relativamente fácil.

Estos trucos o consejos son los que había disponibles el 06/12/99. Si no encuentras lo que buscas, pasa por la sección de TRUCOS.
 

Jugabilidad:
En este apartado, Street Wars no está a la altura de los grandes títulos de la estrategia en tiempo real. El número de posibles acciones a realizar durante el juego, no es demasiado grande, el hecho de limitarnos a construir edificios y conquistar los construidos por el enemigo hace que su desarrollo sea bastante monótono, aunque para un jugador no demasiado experto en este género pueda resultar excelente para iniciarse en el mundo la estrategia en minúsculas.