Last Ninja: The Return (PC)
Una videoaventura con componentes de arcade en la que encarnamos a un ninja.
Los más viejos del lugar tal vez recuerden una serie de juegos que hace años salieron para el Commodore de 8 bits, con el nombre de Last Ninja. Los tres conjugaban unos gráficos increibles, una dificultad ajustada y una desbordante adicción. La segunda parte de este juego también fue lanzada para el resto de ordenadores de 8 bits, y algunos de 16, como el PC de por aquel entonces. Bien, pues tras largo tiempo sin saber nada, los señores de System 3 han decidido recordarnos las místicas artes orientales.
El juego en sí, no sera únicamente un arcade al uso. Al igual que en las anteriores entregas, la videoaventura ocupa un lugar bastante importante, pero sin dejar de lado los frenéticos combates, por supuesto. Además, se le añade un componente de pseudo-rol, al incluir una serie de habilidades que han de ser mejoradas por el jugador (dominio de armas, subterfugio, lealtad al maestro, disfraces, asesinato, etc...). Habrá alrededor de 100 localizaciones diferentes, divididas en cinco niveles de veinte escenarios cada uno, aproximadamente. Como ya he dicho antes, se tendrá que investigar en cada nivel toda una serie de enigmas, puzzles y demás invenciones que nos entetendrán mientras no estamos desmembrando alguno de los multiples y detallados enemigos que tiene el juego.
Técnicamente, el juego tiene aspecto de tener una gran calidad. Se utiliza una vista 3D isométrica, a base de pantallas fijas (no parece que haya scroll). Los personajes no han sido digitalizados, y sus movimientos han sido hechos "a mano", no se ha utilizado el motion capture para ninguno de ellos, pero sus animaciones son increibles. Me recuerdan la cara que se nos puso cuando vimos el primer Prince of Persia ;).
Los movimientos incluyen acciones tan variadas como acechar a un enemigo tras las rocas, o esconderse en una tinaja para esquivar a los guardas. Los escenarios y demás gráficos del juego están hiperdetallados. No han escatimado colores en la paleta, incluso en algun monstruo en plan reptil, se pueden distinguir sus escamas. Y lo más increible de todo, es que para conseguir todo este grandioso espectáculo de texturas, efectos y demás milagros, no se esté utilizando ningún tipo de aceleración 3D por hardware. O sea, que el resultado final es de lo más prometedor (por otra parte, se espera que los usuarios de tarjetas 3D tendrán sus bonificaciones).
En definitiva, una videoaventura de las que hace mucho tiempo que no tenemos, y ya nos comemos las uñas esperando que se distribuya en nuestro país. Yo ya estoy haciendo cola...
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