Segundo episodio de una saga mítica.

En caso de que no hubieramos sabido nada de oídas, la primera de las sorpresas nos viene dada por la presencia de dos CDs, cada uno serigrafiado con uno de los dos protagonistas principales. ¿Que es esto? ¿Otra aventura de mas de un cd? Inevitablemente eso ya produce una sonrisa.

Pero si nos detenemos a hojear el manual, cosa difícil dada las inmensas ganas que tenemos de poner ya el primero de los discos dorados en nuestra Playstation, nuestra sonrisa inicial podria ya llegar a las orejas por varios motivos, algunos totalmente innovadores.

De nuevo estaremos en Racoon City. De nuevo, nos enfrentamos a la misteriosa empresa que tiene el desagradable don de convertir en putrefactos zombies aquellos desgraciados que hayan estado envueltos en el accidente (¿o experimiento?) de la misteriosa factoria. Y de nuevo, tendremos a nuestra disposición a dos personajes principales a elegir para completar nuestra aventura: Leon Kennedy y Claire Redfield.

 El primero es un policia novato que, ante la alerta en el pueblo, ha sido llamado para incorporarse de inmediato al cuerpo de policía de Racoon; pero la violencia de los hechos ha dificultado su encuentro con el jefe de la comisaría, el cual ha de encontrar. En cuanto a Claire, como habréis podido ver por su apellido, es la hermana de Chris Redfield, de Resident Evil 1, y ha venido a Racoon para averiguar que le ha pasado a su hermano que aun no ha vuelto.

Cada uno de ellos tiene sendas presentaciones (todo renderizado) en las cuales tienen diversos encuentros con tipos de lo mas leprosos, hasta que se encuentran de casualidad y huyen en el coche de Leon. Pero tal es su suerte, que se estrellan pudiéndose salvarse segundos antes al arrojarse del auto cada uno por su lado. El automóvil crea tal caos de fuego y destrozo que los ha dividido cada uno a un extremo...

Y he aquí una de las innovaciones: según el personaje con el que queramos empezar, pondremos el CD que le corresponda, con la cual veremos su introducción y su puesta en escena en el juego.

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Semejante apertura, que dejará la boca hecha agua hasta aquellos que no posean una Playstation, no ha sido mas que el principio. Nada mas empezar el juego, nos veremos rodeados de zombies dispuestos a echarnos un mordisquillo a la yugular. Tras unos movimientos de huida para ganar distancias, echamos mano de nuestra automática para descargar cuantas balas sean posibles en tan indeseables engendros. Mientras unos caen a los pocos disparos, y otros caen y vuelven a levantarse, percibimos la diferencia entre ellos, con diferentes uniformes, algunos indicativos de su antiguo trabajo... muchos de ellos evidentemente ex-policias. Incluso hay mujeres, si es que ahora se les puede seguir llamando así.

Seguimos adelante, y a medida que recibimos ataques comprobamos impresionados que el cuerpo del protagonista se resiente, al pasar del estado atlético inicial a estados cada vez mas doloridos. Este realismo lo acentúa el hecho de que, aparte de avanzar cada vez mas a rastras, se nos negará la opción de correr cuando peor estemos sencillamente por el gran esfuerzo que ya ha de hacer nuestro personaje para poder avanzar... y sobrevivir. En nuestra odisea por sobrevivir, avanzar y averiguar cuantas cosas podamos, contemplaremos con agradable horror como, a diferencia de la primera parte, aquellos ciudadanos que en nuestra aventura sean asesinados por los zombies en la ciudad, resucitarán convirtiéndose en uno de ellos.

Con semejantes perspectivas de futuro que quieren darnos también a nosotros, está claro que lo que menos queremos es morir, así que dispondremos de cartuchos de tinta para poderlos usar en las maquinas de escribir que encontremos para grabar nuestra posición y de un arsenal de armas que podremos encontrar en nuestras pesquisas.

Con este argumento no han inventado la rueda, pero en la playstation hay pocos juegos con atmósfera opresiva y muchos menos que realmente crean situaciones de tension. El juego está estrategicamente creado como una auténtica película de terror, sumergiendo con habilidad al jugador. Su escasez de oponentes en este apartado, le da una buena nota.

Los elementos curativos y los personajes que encontremos serán vitales para llegar a buen término, alcanzando mucha mas importancia que en la primera parte los personajes secundarios. Y cuando lleguemos al final, os habréis llegado al final... pero seguramente no os habréis acabado el juego. Os saldrá una letra (S - Special, A, B...) indicando la habilidad que habéis puesto en el juego, con lo que el final será distinto según si lo habéis hecho mejor o peor en la aventura.

Y para colmo de bienes, hay dos personajes ocultos en el juego que podréis seleccionar como protagonistas si tenéis suficiente habilidad... realmente hay juego para rato. Es evidente que Resident Evil ha sido superado en todos sus aspectos, y con creces. Y aunque muchos guardemos con fuerza la imagen de la mansión victoriana en nuestros recuerdos, la perfectamente bien recreada ciudad de esta segunda parte, sus armas, escalofriantes efectos, y sensacional carisma de los protagonistas, pueden, si no borrar tal imagen, si añadirse en nuestros futuros recuerdos con orgullo de los mejores juegos que hayamos jugado jamás en nuestra consola.

Ahora hay mas fondos animados que en la primera parte, y de nuevo tenemos a unos protagonistas muy bien detallados. Su animación es muy buena y fluida. Hay cantidad de zombies diferentes; incluyendo mujeres... la calidad de detalle global es elevadísima. Los dos cds están bien llenos gracias a los gráficos y las escenas renderizadas, de una calidad sublime.

Es inevitable, al hablar de este juego, de la gran cantidad de sangre que vamos a ver, que aunque no dañará la sensibilidad de nadie (excepto aquellos cascarrabias con hijos que, desde luego, no lo vayan a jugar ellos mismos), si hay de forma abundante. Realmente, a los fanáticos del terror les dará la impresión de haberse metido de lleno dentro de una película de George A. Romero, llena de zombies, sangre ycasquería.

Los que hayamos jugado a la primera parte, ya nos impresiona el avance que el engine del juego ha sufrido: aparte del detallismo, ahora pueden haber muchos mas personajes en pantalla. El enfrentarnos a 4 o 5 zombies a la vez ya lo dice todo.

Al clásico estilo de las películas de terror. Ya sabéis: prioridad para los sonidos fx, para acentuar las acciones del protagonista y las de los enemigos y el ambiente. El BGM (Background Music) es por ello, secundario, pero instrumental recreando la atmósfera siempre lúgubre en la que estaremos, y con golpes de sonido que romperán la música en algunos momentos para dar paso a un BGM más angustioso aun.

El juego sigue los esquemas de su primera parte, es decir, una aventura con mucha acción y elementos de terror. Pues bueno, esta segunda parte tiene aún mucha mas acción, sin abandonar la base de aventura que tiene. A mas enemigos, armas y munición, mas adrenalina que liberamos. Añadámosle el 'pequeño' ambiente de terror global, y tendremos un juego terriblemente adictivo, en el cual querremos avanzar mas y mas.

Por otra parte, nuestra parte mas sádica puede llegar a niveles altísimos de satisfacción con cada mutilación de brazos, piernas o cabeza que infrinjamos a nuestros enemigos. Y he aquí otra innovación para los amantes del sadismo: los pisotones finales a los zombies cuando nos agarran son mas espectaculares aún, e incluso podremos reventarlos por la mitad para atacar sus partes aún móviles.