Sierra se llevó tiempo atrás el gato al agua, para envidia de más de una compañía, al ser autorizada en exclusiva para publicar un disco de misiones para Diablo, previsto casi de obligada aparición al ser el más rotundo éxito de ventas de Blizzard. He dicho disco de misiones, por lo tanto, aunque sus novedades son sustanciosas, no esperes encontrarte con Diablo II, cuya aparición se ha retrasado hasta después del 98. Este hecho, junto a la necesidad de mantener el título fresco en la mente (y el bolsillo) de los aficionados a los RPG's debido a la salida de poderosos competidores como Ultima Online o Fallout, no se presume ajeno a la concesión de la licencia para la realización de este add-on, que Blizzard pensaba en principio realizar ella misma, como aseguró hace unos meses al negar la posibilidad de conceder su licencia a ninguna otra compañia. No obstante, como se ha comprobado ya una y mil veces, los criterios que rigen a un gran sello son tan volubles como el mercado y el tiempo disponible para dedicar a cada producto, así que aquí lo tenemos y de la mano de una de las más ilustres compañias, en principio no demasiado experimentada en el género. La división encargada del proyecto ha sido Synergistic Software.
El monje, el nuevo personaje añadido al juego, resulta ser el más equilibrado de los tres ya que posee una más que correcta habilidad mágica junto a unas notables fuerza y destreza. También suele gozar de las mejores armaduras, por lo tanto es excelente para el combate a corta distancia por el poco daño que recibe. Las nuevas armas no carecen de ventajas, como en el caso de los arcos, un ejemplo de modelos de éstos son un ejemplar que lanza arcos de luz cuando se dispara y otro, de escasa potencia, que lanza tres fechas a la vez. Pero entre las nuevas pociones añadidas al juego, existen algunas destinadas a reforzar los atributos de las armas, por lo que una de aspecto casi inofensivo en principio, se puede volver letal cuando avances en el juego. Respecto a los nuevos hechizos decir que son bastante útiles, añaden una buena dosis de jugabilidad al juego y su diseño está muy logrado, existiendo algunos de ataque y otros que hacen más cómoda tu búsqueda.
La aparición de nuevos monstruos, como es habitual en los juegos de rol, es bastante paulatina para procurar mantener el interés por el juego y por razones de dificultad. Una novedad reseñable es que la textura y color de la mayoría de monstruos está pensada para que les sea posible camuflarse en los niveles que habitan, pudiendo resultar invisibles en determinados momentos, lo que hace el juego más difícil y las sorpresas funestas algo habitual. De los que se pueden ver tras llevar sólo unos dias jugando los más destacables son Lich, el Psico-orbe y el Destrozador. El primero es un hechicero espectral, que lanza conjuros a distancia causando fuertes daños, criatura conocida de todos los aficionados al género. La segunda es un molesto ente, lanzador de bolas de fuego desde la impunidad que consigue poniendo tierra de por medio, ya que huye de tu encuentro para evitar el ventajoso para ti cuerpo a cuerpo. Otro interesante monstruo es el Desenmarañador, una criatura etérea exasperadamemente difícil de golpear y con un gran potencial a la hora de atacar.