Roce federaciones-CSD

El Comité Olímpico Español acogió hoy una reunión entre Víctor Francos, secretario de Estado para el Deporte; Alejandro Blanco, presidente del COE y una representación de presidentes federativos (balonmano, esgrima, halterofilia, gimnasia, un directivo de ADESP...). De fondo, el malestar de estas últimas por la “intoxicación” que, a su juicio, está provocando la crisis de la Federación Española de Fútbol sobre su imagen y su labor social, alentada también desde el Gobierno al meter en el mismo saco a todas con algunas declaraciones.

“Se habla con ligereza de la necesidad de cambiar todas las estructuras, de ampliar ordenanzas cuando la actual Ley del Deporte ya contempla casi 20 reglamentos a los que tiene que hacer frente una federación, incluidos prevención de abusos e igualdad”, se quejaba José Hidalgo, presidente de la Asociación del Deporte Español (ADESP) este jueves en AS.

“Les he transmitido que lo que ha pasado tiene que servir para que el desarrollo de la Ley del Deporte y la orden ministerial electoral nos haga corregir aquellas cosas que nos permita tener instrumentos para afrontar crisis como esta. Que el Gobierno pueda tomar decisiones cuando la situación es grave, no es transgredir su autonomía, sino garantizar que vayan a funcionar bien”, expuso Francos al finalizar la reunión.

“La estructura del deporte español está bien. Y cuando en una federación hay un problema, no se debe trasladar a otras”, advertía Blanco.

Las federaciones expusieron que “ya existen suficientes normas que regulan el deporte en temas de buen gobierno” y que su apuesta por la igualdad es desde hace tiempo “real y efectiva”. “La mayoría de las federaciones españolas son humildes y harían falta ocho años de subvención ordinaria de todas para alcanzar el último presupuesto de la de fútbol, por lo tanto, no vivimos en realidades distintas”, adujeron.