Rahm y la Edad de Oro española: “Con referentes es más fácil”
El vizcaíno aborda, entre otros temas, el gran momento del deporte nacional en su rueda de prensa previa al British Open.
Fue un momento curioso, porque la pregunta no partió de la Prensa española, sino de la internacional congregada estos días en Royal Liverpool para cubrir la 151ª edición del British Open. Al calor del último gran éxito de una larga lista, el de Carlitos Alcaraz en Wimbledon, le pidieron a Jon Rahm este martes que explicara el gran momento que arrastra ya desde hace muchos años el deporte español, esa especie de nueva Edad de Oro, y el vizcaíno dio la que para él es la clave: el legado que dejaron los que vinieron antes de los que ahora triunfan.
“No lo sé. Ya me han preguntado otras veces qué pasa con los deportistas españoles. Cuando tienes buenos ejemplos en los que fijarte es más fácil. Para Carlos (Alcaraz), obviamente Rafa (Nadal) ha sido una inspiración, y Rafa también tuvo campeones de referencia para acabar haciendo lo que ha hecho. Realmente no es que sea más fácil, pero te lleva a querer emularles, a querer ser el siguiente. En fútbol la lista de buenos jugadores es enorme, en golf también hay grandes referencias... Yo creo que todo es gracias a Seve y gente que vino antes que nosotros. También puede ser una cuestión de orgullo representando a nuestro país. Somos gente orgullosa”, apuntó antes de que el elefante del LIV y su principio de acuerdo con el PGA y el DP World Tour irrumpiera de nuevo en la habitación.
No cambió mucho el discurso de Rahmbo respecto a lo que viene aportando sobre este tema últimamente. Sí sorprendió el capote que le lanzó a Jay Monahan, el CEO del PGA Tour, criticado por su cambio de postura frente a la superliga saudí, que ha pasado de demonizar a convertir en su aliada, y que ha estado un tiempo apartado de sus funciones por un problema médico no detallado. “Se han producido cambios muy grandes para todos nosotros. No he podido hablar con Jay. Espero que su problema no sea serio y que esté bien de salud. Se ha comportado de forma muy profesional conmigo y mi familia. Se ha portado muy bien. Es un gran hombre y es todo lo que puedo decir. En cuanto a su trabajo en el PGA, creo que ha sido fantástico. Lo que ha ocurrido ha sido inesperado, pero creo que es un buen trabajo, y después de esto es justo darle tiempo para arreglar las cosas. Creo que mira por el interés de los jugadores y todavía no tenemos información suficiente para valorar el acuerdo”.
Más allá de eso, Jon puso paños calientes a un asunto que nunca ha afrontado de forma drástica. Más bien ha sido la voz de la moderación en una refriega por momentos muy intensa. “El acuerdo todavía tiene que detallarse. Entiendo que el PGA quiera recuperar algunos de los que se fueron y que algunos de los que se fueron quieran volver. Creo que que algún tipo de castigo debería estar sobre la mesa, pero no sé de qué tipo. No es mi trabajo. Mi trabajo es golpear la pelota”, dijo preguntado acerca de si creía que debería haber algún tipo de sanción para los que apostaron por el nuevo circuito en caso de que quieran recuperar su tarjeta del PGA. ¿Y deberían tener algún tipo de compensación quienes decidieron permanecer fieles al tour norteamericano? No lo ve necesario: “Nadie me obligó a tomar una decisión. Fui yo quien decidí quedarme, así que no creo que el PGA deba compensarnos por habernos quedado. Tuvimos la posibilidad de elegir el dinero del LIV y decidimos no hacerlo. Ya me gano la vida muy bien haciendo lo que hago, soy un privilegiado”. “Espero que lleguen a un acuerdo satisfactorio para ambas partes y generen el mejor producto posible”, zanjó.
“Ni idea. He dicho varias veces que el formato no me gusta. Soy más tradicional. Tampoco creo que vayamos a poder ir de un lado a otro. Imagino que coexistirán los circuitos, pero tampoco puedes ir de la Liga a la Premier y volver al día siguiente. Y os aseguro que por mí no van a cambiar nada (ríe)”, dejó en el aire la posibilidad de verle jugando algún día un torneo a 54 hoyos, sin corte y con salida a tiro. Después, se pronunció sobre toda una variedad de temas:
Ganar el Open: “Obviamente sería un sentimiento increíble, por muchas razones. Ser el primer español en ganar un Open desde Seve sería muy especial. Ponerme en tres majors, segundo en la lista de españoles, y en este campo, con su historia... Las últimas veces que ha sido sede ha sido un gran torneo. Estoy con ganas de empezar y de sentarme aquí el domingo como campeón”.
Preparación: “No he trabajado específicamente en una cosa. En función del calendario nos hemos ido organizando, hay mucho golf por jugar después de esto y necesitaba algo de descanso antes. Está bien pasar tiempo en casa y desconectar del golf unas semanas”.
Posibles protestas de activistas: “Tengo una reputación, así que espero que no me pillen en un mal hoyo (ríe). He visto alguna cosa y obviamente buscan un impacto. Lo he visto en Wimbledon y obviamente este podría ser un gran escenario para intentar algo, pero no tiene nada que ver con nosotros. Si hacen algo y me pilla donde estoy, intentaré reanudar la vuelta lo más rápido posible. Es todo lo que puedo decir”.
Nuevo acuerdo con Callaway: “Me gusta involucrarme en empresas en las que creo, y el hecho de que vaya a tener acciones de Callaway demuestra que tenemos una confianza mutua. Dicho esto, incluso antes del acuerdo tampoco podía tener mucho que ver en el desarrollo del producto. Ya tienen ingenieros para eso y yo les puedo dar una información limitada. Respecto al cambio de bola, no sé si importa mucho nuestra opinión o no. Ya está en marcha. Por suerte Callaway tiene el músculo para adelantarse e ir invirtiendo en ello”.
Su campo favorito de la rotación: “Es difícil de decir. Portrush fue muy especial, muy divertido. Los campos de Irlanda son diferentes... Troon es muy divertido, muy bonito, muy difícil; Carnoustie, extremadamente difícil. Si tuviese que elegir estaría entre Troon o Birkdale. Pero no sabría decirte. Pero lo que escucho y me comentan, Turnberry y Muirfield están arriba para todos”.
Descanso: “Cuando hicimos el calendario, con los cambios que ha habido teníamos menos flexibilidad y decidimos hacer este descanso por esto. Normalmente después del Masters habría tenido dos semanas y este año no he podido por compromisos”.
Presión: “Es muy difícil ponerte en esa posición, replicar escenarios. Puedes crear un entorno en el que compitas contra ti mismo y consigas tener las mismas sensaciones que en un major. Pero la presión es la presión, alta o baja. Si te pones en esas situaciones, si eres capaz de repetir las mismas rutinas, de actuar igual, cuando llegue el momento podrás lidiar con ello”.
Regularidad: “Cuanto mejor juegues y más consistente seas más oportunidades de ganar te vas a dar. Claro que soy fan de lo que Scottie (Scheffler) ha hecho. También te digo, firmo ganar cuatro veces como yo este año siendo más irregular. Pero es increíble lo que ha hecho estos últimos meses”.