FID CIUDAD DE LEÓN ABANCA | ÁLEX CORRETJA
“Si no eres consciente de que ganar eso con 20 años no es normal, después lo sufres”
Álex Corretja abre este jueves (20:00) el FID Ciudad de León. Antes, en las instalaciones de ABANCA, atiende a los medios de comunicación.
León vuelve a ser el centro de todas las miradas. Desde este jueves, la ciudad acoge el Foro Internacional del Deporte (FID), que celebrará su octava edición con otra plantilla de primer nivel mundial. Con Rudy Fernández o Amaya Valdemoro entre las estrellas que desfilarán por el auditorio leonés, este jueves (20:00), será el turno para Álex Corretja, el encargado de dar el pistoletazo de salida. El extenista y ahora comentarista, ganador de una Davis, una medalla olímpica o una Copa de Maestros, entre muchos otros logros, habló con los medios, en las instalaciones de ABANCA, antes de su ponencia vespertina, que estará centrada en el trabajo en equipo. “Llevábamos siete años detrás de él, es un auténtico honor que esté hoy aquí”, reveló el director del FID, Francisco del Río, sentado a la derecha del barcelonés. A su izquierda, lo celebraba el director territorial de ABANCA, Marcos Lamas.
“Voy a intentar pasármelo lo mejor posible. Esta tarde haré una charla de trabajo en equipo, pese a que vengo de un deporte individual. Nunca había venido a León. Ya puedo decir que sí y estoy muy contento”, expuso Corretja, muy preguntado por el final de su carrera como tenista y el inicio de su vida en los medios de comunicación. “Yo no me jubilé, terminé una carrera, que es la del tenis, y empecé otra”, resumió entre risas. “En mi época, no me apetecía hablar de qué iba a hacer cuando me retirara. A mí me ocupaba entrenar, dormir bien, descansar y volver a entrenar. El postcarrera es muy complejo. Tienes la sensación de que nada de lo que haces es tan emocionante como lo que has hecho. Lo que has vivido es tan energético que después, incluso las ofertas económicas, pese a que no es lo más importante para mí, todo se queda corto”, revivió.
Corretja puso fin a su etapa como tenista, en la que llegó al número dos del ranking ATP, en 2006, con 31 años. El adiós estuvo marcado por un problema en su ojo izquierdo, en el que le diagnosticaron un derrame en la mácula. “Yo tuve un problema en el ojo y eso me frenó abruptamente. Nunca supe a qué me quería dedicar”, aseguró un Álex que, sin embargo, sí fue capaz de mantener “los pies en la tierra”. “Si no eres consciente de que eres un privilegiado, después lo sufres. Si no eres consciente de que lo que ganas con 20 o 21 años no es normal, después lo sufres”, enfatizó un Corretja que, a día de hoy, aún mantiene ciertas rutinas de su época en la élite del deporte. “Yo, habitualmente, me sigo vistiendo de chándal. Me retiré hace 20 años, pero me sigue pareciendo raro no hacerlo. Cuando hago una sesión de fotos de tres horas, me preguntan si estoy cansado y siempre digo que podría estar otras siete horas. Tenemos una disciplina muy marcada desde pequeños”, explicó.
El viejo y el nuevo tenis
A día de hoy, Corretja sigue muy conectado con el tenis. En su nueva vida como comentarista, prácticamente hace las mismas giras que los jugadores en activo. El circuito actual, sin embargo, no es el que dejó. “Ahora es todo mucho más cerrado”, resumió. “Antes había un poco más de camaradería. Te comunicabas con los compañeros sin filtrar. Ahora, es imposible decirle a un amigo del circuito que estás mal, porque un par de días después te puedes enfrentar a él. Íbamos 20 a cenar y no pasaba nada. Ahora, para que entre otro jugador a tu grupo de comida... es muy difícil. También porque ahora los equipos de los jugadores son de diez personas. Se nota mucho eso. Los jugadores están más cerrados con sus equipos”, explicó. El tenis de ayer y el de hoy, con Corretja como nexo de unión.
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