OLIVER, un nuevo dispositivo dispuesto a cambiar el fútbol sala
Un novedoso dispositivo de trackeo ‘low cost’ pretende profesionalizar el fútbol sala. Registra la actividad física en el partido y los entrenamientos, predice sobrecargas y previene las lesiones.
Tras quedar eliminado en un torneo de fútbol y afrontar discusiones como “quién corre más” o “quién debe jugar en qué posiciones”, José González, CEO y Co-fundador de OLIVER, decidió buscar una herramienta que fuese capaz de proporcionar información objetiva sobre estos parámetros para poder mejorarlos. Al no encontrar nada en el mercado, decidió armar un equipo y construir un producto con dichas características.
OLIVER es uno de los primeros dispositivos GPS adaptables a fútbol sala. Un invento que registra métricas de potencia de disparo, aceleraciones, control de cargas y sirve así para prevenir lesiones. “Aunque está disponible también para otros deportes, mediante un sistema de algoritmos, todos los parámetros se adaptan a las necesidades del fútbol sala”, cuenta José González, CEO de OLIVER. El crecimiento de este utensilio es imparable, y ya lo usan varios equipos del primer nivel del fútbol sala y también en la Kings League.
Uno de los beneficios de que OLIVER funcione con sensores inerciales es que no se necesita instalar antena en el pabellón, lo que proporciona comodidad. El dispositivo es un sistema de trackeo que cuenta con más de 10 sensores. Las mediciones se pueden ver en una aplicación móvil y portal web para poder realizar un análisis.
Actualmente, en la liga española de fútbol sala de Primera División son cuatro los equipos que están usando este dispositivo GPS: Córdoba Patrimonio, Ribera Navarra, Santa Coloma y Noia Portus. Sin embargo, González augura un buen futuro. “El crecimiento de 2022 fue exponencial y esperamos mantener ese ritmo de crecimiento para este 2023″, declara.
El dispositivo de GPS OLIVER tiene varias ventajas, entre ellas, la ubicación en la que los jugadores lo llevan, una media que cubre la espinillera. “Los otros dispositivos que se cuelgan al pecho, muchas veces cuando el jugador tiene un choque, hace que se descuelgue y caiga al suelo. Con OLIVER esto pasa menos, porque va en una región más difícil de tocar”, advierte Rafael Duquia, ex preparador físico de Córdoba Patrimonio.
No obstante, que el jugador lleve este medidor en la pierna tiene otros puntos positivos: “En fútbol sala, el balón es más pesado, y al tener más aceleraciones y más contacto con la pelota en el transcurso del juego, genera una carga extra en las piernas. Al llevar OLIVER en la pierna, se puede tener acceso a la medida del pie con el balón, pero también a la medición de carga y cansancio que supone estar chutando balones todo el tiempo”, relata el cofundador del dispositivo.
Muchos equipos apuestan por esta marca, que salió al mercado en 2021, por la asequibilidad de su precio. “La diferencia de precio con el resto de dispositivos era muy grande”, declara Héctor Gadea, preparador físico del Ribera Navarra. Esta diferencia de precio tiene una explicación, y es que este dispositivo ha estado casi tres años en reserach development (investigación y desarrollo) y “gracias a ese tiempo dedicado solamente a la construcción de un producto es lo que lo hace altamente efectivo”, confirma González.
La incorporación de este GPS a la plantilla de los equipos ha ayudado no solo a los preparadores físicos, sino también a los entrenadores y cuerpo técnico. OLIVER da muchas informaciones que permiten conocer si los jugadores llegan a las zonas de intensidad y de volumen que se planifica, y así poder organizar las sesiones de entrenamiento más personificadas. “Con los datos de OLIVER puedo saber si estoy alcanzando las zonas que deseo, y si no, compenso en las próximas sesiones. A la hora de organización semanal o de sesiones de entrenamiento me ha ayudado mucho para tener una orientación”, afirma Duquia, quien esta temporada está en un club de Malasia y al que espera poder incorporar esta tecnología.
“OLIVER aporta datos objetivos. Antes nos basábamos en las sensaciones del jugador. Ahora son números objetivos, esto nos permite ajustar tanto que el jugador siempre llega en las mejores condiciones posibles al partido. También sirve para reducir riesgo de lesiones, sobre todo, lesiones musculares”, dice el preparador físico de Ribera Navarra.
Pruebas. Los resultados de OLIVER son notables desde el inicio de la utilización del dispositivo. “Cuando vamos a los equipos que no han utilizado estas características, ya en los primeros entrenamientos y partidos, al menos con conocer la información, significa un primer punto de partida. Sin embargo, la optimización total se da a las 3 o 4 semanas de uso, cuando el producto ya tiene un arrastre de información individualizada de cada jugador que le permite arrojar información de mucho más valor y recomendaciones basadas en la data real y específica de cada jugador según sus propias características”, detalla José González.
Aunque solo son cuatro los equipos del momento, “los dos cubles más importantes de la liga están probando el producto y hay posibilidad de que suscriban un contrato oficial con nosotros”, concluye González.
La tecnología, al servicio de un mejor rendimiento.