Martina Calvo salva el caos en Buenos Aires
Se aplazó la jornada masculina, que se jugará hoy entera (cuartos y semifinales). La navarra, de 16 años, la gran sorpresa.
El noveno torneo de Premier Padel también tiene historia caótica. Hasta ahora, los otros dos de cambios, dudas, traslados, fueron achacables a las condiciones meteorológicas, que contra eso poco se puede hacer si juegas al aire libre. De ahí surgieron voces críticas, bien argumentadas, que piden unidad en el juego, que todos los torneos se disputen bajo techo. Pero Buenos Aires ha puesto a prueba la argumentación: indoor, sí, pero no se evitan los percances, ni el frio siquiera en una salas que no están completamente cerradas. De hecho, hubo que hacer encaje de bolillos para acabar los cuartos de final femeninos, con el partido de Delfi Brea y Gemma Triay ante Claudia Jensen y Tamara Icardo (6-2 y 6-1), a última hora, en la segunda sala, y a puerta vacía, pero con las cámaras de televisión.
El problema lo descubrió Juan Tello, con Di Nenno, al inicio de su partido en la pista central contra Chingotto y Galán, con 1-0 para ellos, en el 15-0 para estos con el saque. Las juntas de la pared de cristal de su fondo se estaban despegando. Así no se podía jugar. Todos recuerdan el suceso de Paquito Navarro en Lisboa, cuando se le cayó el muro al chocar contra el cristal (Aimar Goñi, en A-1, tuvo más suerte y en una situación parecida esquivó los pedazos de vidrio). Lo que parecía un retraso puntual, del primero de los cinco encuentros que quedaban en la central (Navarró-Bergamini contra Jofre-Arroyo se había trasladado por lo bien que marchaba de tiempo la competición, se convirtió en una cancelación de los cuartos de final masculinos, con la solución salomónica en el femenino para que las semifinalistas tengan un descanso parecido.
Toda esa situación rocambolesca la salvó Martina Calvo, una navarra que siempre tiene prisa: nació un cinco de julio en Pamplona para no perderse el chupinazo, jugó al fútbol en el Osasuna pero acabó en el pádel por sus padres. Ah, y sólo tiene 16 años. Se convirtió esta temporada en la jugadora más joven de Premier Padel en meterse en unos cuartos de final (con Marta Borrero), y ahora en acceder a unas semifinales de un P-1 siguiendo la estela de Andrea Ustero, Alejandra Alonso, Claudia Fernández o Claudia Jensen, por ejemplo.
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Martina no es alta (1,66 metros) para jugar en el revés, pero eso no influye en la variedad de sus golpes. Partía en el puesto 55 del ranking, y ahora hace pareja con Aranza Osoro, en un intento de la argentina por equilibrar su juego en una temporada que inició con Jessica Castelló. En el primer partido ya dieron cuenta de la pareja número cinco en Buenos Aires, Marta Ortega y Alejandra Alonso, a las que derrotaron tras perder el primer set; en el tercero, han derrotado a la pareja número cuatro, Andera Ustero-Sofi Araujo, levantando un 2-6 inicia, con un 6-3 y un 6-4. Este sábado Calvo y Osoro tendrán trabajo a destajo ante las números uno, Ari Sánchez-Paula Josemaría, que derrotaron en dos sets a Lucía Sainz y Paty Llaguno.
Donde se bordeó la sorpresa fue en el Claudia Fernández-Bea González ante Bea Caldera y Carmen Goenaga: 7-5, 1-6 y 6-1. Asi que las ganadoras de Asunción se las verán hoy con Delfina y Gemma, que quieren la venganza de Paraguay con seis días de diferencia.
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