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AJEDREZ

Magnus Carlsen y Hans Niemann vuelven a verse las caras tras la demanda de los 100 millones

Acusaciones de trampas y denuncias aparte, los dos ajedrecistas volverán a verse las caras sobre el tablero en uno de los duelos más esperados del momento.

Magnus Carlsen y Hans Niemann vuelven a verse las caras tras la demanda de los 100 millones
Grand Chess Tour/Lennart Ootes

El 5 de septiembre de 2022, Hans Niemann derrotó a Magnus Carlsen con piezas negras en la prestigiosa Sinquefield Cup. El prodigio estadounidense demostró un juego preciso acompañado de una velocidad inusual en su ajedrez que llamó la atención especialmente teniendo en cuenta lo inesperado del resultado.

No fue una derrota cualquiera para Carlsen, quien apenas unos minutos después de levantarse del tablero publicó en su cuenta de Twitter que se retiraba del torneo. Además, incluyó un vídeo de José Mourinho en el que el técnico portugués decía su célebre frase: “Si hablo, estoy en un gran problema”. La tensión se escaló cuando, una semana después, Carlsen abandonó en una partida por internet contra Niemann tras hacer un único movimiento.

“Creo que las trampas en el ajedrez es un tema importante y una amenaza existencial para el juego. [...] Creo que Niemann ha hecho más trampas, muchas más recientemente, de las que ha admitido públicamente. Su progreso sobre el tablero no ha sido normal y durante nuestra partida en la Sinquefield Cup tuve la impresión de que no estaba tenso o concentrado del todo en el juego con posiciones críticas, mientras jugaba mejor con las negras de una forma que pensaba que solo un puñado de jugadores pueden hacer. Esa partida contribuyó a cambiar mi perspectiva”, denunció Carlsen en un comunicado en el que claramente acusó a Niemann de hacer trampas.

Desde entonces, jugadores de la élite como Hikaru Nakamura y empresas élite en el sector como Chess.com se implicaron directamente en el caso. Niemann se defendió como pudo interponiendo una demanda multimillonaria por difamación, boicot grupal ilegal, interferencia ilícita con las expectativas contractuales y comerciales, y conspiración civil por valor de 100 millones de dólares cada una que fue desestimada.

Paz tensa

En agosto de 2023, Carlsen y Niemann llegaron a un acuerdo para cesar su batalla legal. Carlsen admitió la falta de evidencias que demostraran que el estadounidense había hecho trampas sobre el tablero y se mostró dispuesto a jugar contra Hans “en eventos futuros”. “Espero competir contra Magnus en ajedrez, en lugar de los tribunales”, deseó Niemann.

El anhelo de los dos será realidad este viernes. París, en el seno del Speed Chess Championship, reunirá a los dos ajedrecistas en uno de los duelos más esperados de la historia. Carlsen y Niemann jugarán noventa minutos de partidas a 5+1, sesenta a 3+1 y treinta a 1+1. El ganador del enfrentamiento se medirá en la final del torneo al ganador del Nakamura – Firouzja, por lo que existen posibilidades de que se celebre otro encuentro que sería casi tan polémico entre Nakamura y Niemann.

Hace tan solo unos días, Carlsen postergó su reencuentro con Niemann hasta la cita de París. El noruego, primer tablero del equipo WR Chess, eludió medirse contra Niemann en los Campeonatos del Mundo de Rápidas y Blitz por Equipos dejando su lugar al actual subcampeón del mundo, Ian Nepomniachtchi.

Niemann, en buena forma

Aunque los ritmos rápidos en ajedrez no son en absoluto comparables a los lentos, Niemann se encuentra en el mejor momento de su carrera. Actualmente, el estadounidense es el número 16 del mundo con un ELO clásico de 2733 puntos, justo 99 menos que Magnus Carlsen. La diferencia, para nada definitoria, es mucho mayor en el ELO de partidas relámpago, donde el noruego tiene 2888 puntos por los 2709 del estadounidense. Además, el hecho de que el encuentro se celebre mediante ordenador -pese a que a ambos les separen unos pocos metros-, dota de picante a la contienda.

Las partidas empezarán a las 20:30 horas y se podrán seguir en directo por la plataforma Chess.com. Las entradas para ver el evento en vivo en el eSpot de París oscilaban entre los 90 y los 1.350 euros y, casualmente, las más caras ya están todas vendidas. Nadie quiere perderse un duelo en el que la incertidumbre -incluso sobre si se darán la mano al comenzar o no- reinará en el ambiente.

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