Fiyi da la campanada: gana a Australia y dinamita su grupo
Los Flying Fijians, que no batían a los Wallabies desde 1954, dan una lección de pundonor y hacen saltar por los aires el grupo C. Triunfos de Sudáfrica e Inglaterra.
Un 26 de junio de 1954, la selección de rugby de Fiyi batió a Australia por un ajustado 16-18 en Sídney. Era la cuarta vez que los dos países oceánicos se enfrentaban, y el balance era de dos triunfos para cada uno. Desde entonces, la balanza se desequilibró por completo: 17 victorias para los Wallabies, las últimas 15 de manera consecutiva, y un empate (en 1961). Por el camino, palizas como un 49-0, 66-20, 49-3... Hasta el día de hoy. Los Flying Fijians rompieron la mala racha ante los Wallabies a lo grande, con uno de los triunfos más importantes de su historia: 15-22 en la segunda jornada del Mundial de Francia para hacer saltar por los aires el grupo C.
El siempre divertido equipo de Fiyi venía mandando avisos últimamente. Ganó hace un mes a Inglaterra en la preparación para la Copa del Mundo, y en su estreno en la presente edición tuvieron en sus manos el triunfo ante Gales, que escapó con vida en la última jugada. Aquella derrota pareció enterrar sus opciones de avanzar a cuartos de final por primera vez desde 2007, pero este domingo las reavivaron de la mejor manera posible, con una victoria que se celebrará por todo lo alto en unas islas que no llegan al millón de habitantes. La selección entrenada por Simon Raiwalui fue ágil en ataque, una roca en defensa y aprovechó a las mil maravillas los errores, infantiles en ocasiones, de una Australia que se complica su futuro en el torneo.
En el tramo inicial, los Flying Fijians subsistieron gracias al pie de un inmaculado Simione Kuruvoli, que registró un perfecto 4/4 en golpes de castigo en la primera mitad. Fiyi castigó con dureza la falta de disciplina de Australia, tanto en defensa como en ataque, y es que un buen puñado de ofensivas Wallabies fueron desmanteladas por retención y otras sanciones. El ensayo de Mark Nawaqanitawase fue la única alegría para los bicampeones mundiales en los primeros 40 minutos (caían 8-12 al descanso). Nada más volver del vestuario, Fiyi golpeó con un ensayo de Josua Tuisova, que aprovechó un error garrafal australiano en un up and under, y con la conversión de un Kuruvoli que dejó el 5/5 a palos antes de abandonar el partido por lesión.
Los Wallabies continuaron desorientados, sin un rumbo fijo con el que atacar y abusando de las patadas. Eddie Jones no fue capaz de encontrar las grietas en su rival. La renta para Fiyi pudo ser mayor, pero las imprecisiones a la mano, su gran mácula, fueron las únicas que lo evitaron. El sufrimiento de los de las islas para resguardar su ventaja no fue tan agónico como se podía esperar, y es que Australia se encargó de dispararse al pie una y otra vez. El ensayo de Suli Vunivalu a falta de poco más de 10 minutos para el final le dio un poco de picante al tema, pero Fiyi continuó siendo un muro y logró abrochar una histórica victoria. El consuelo para Australia fue llevarse los dos puntos del bonus defensivo, y de milagro, ya que Frank Lomani erró un golpe de castigo con el tiempo cumplido.
Con este inesperado, pero más que merecido, resultado, el grupo C del Mundial se puso patas arriba. Lidera Gales con 10 puntos y dos victorias, seguido por Fiyi con 6 (ante el Puerro lograron el bonus defensivo), igual que Australia. Si los Flying Fijians cumplen con los pronósticos y superan a Georgia y Portugal, pondrían pie y medio en los cuartos de final. El duelo entre Gales y Australia del próximo domingo cobra máxima importancia: los Wallabies necesitan ganar a los líderes, y además conseguir el bonus ofensivo para superarlos en la tabla. El sorpresón de Fiyi abre ahora un gran abanico de posibilidades en el grupo, más todavía teniendo en cuenta los bonus. Pero este triunfo histórico ya no se lo quita nadie a unos fiyianos que sueñan en grande.
Sudáfrica e Inglaterra mantienen el pleno
La segunda semana de competición en Francia se cerró, además, con otros dos encuentros. A la hora de la comida, Sudáfrica no dio ningún tipo de opción a una Rumanía que se llevó su segunda paliza seguida. Si los rumanos, que ocupan la plaza de España en el Mundial, recibieron un 82-8 de Irlanda hace una semana, esta vez los vigentes campeones les endosaron otro contundente 76-0. Esta es, de hecho, la segunda mejor puntuación en la historia mundialista de los Springboks, que a través de 12 ensayos sumaron el dos de dos en su camino a la cuarta Copa Webb Ellis. Con tan solo tres puntos permitidos en dos encuentros, Sudáfrica ya piensa en el gran duelo del próximo sábado, en el que se medirán con Irlanda con el primer puesto del grupo B en juego.
También se apuntó el dos de dos Inglaterra, que no llegaba a este Mundial en su mejor momento pero que está moviéndose a la perfección en un juego algo más embarrado y tosco. Así consiguió el XV de la Rosa superar este domingo a la peligrosa Japón, por 34-12. Los de Steve Borthwick leyeron el encuentro a la perfección y supieron limitar la explosividad de los nipones, muy atenazados durante el partido. En el intercambio de golpes de castigo volvió a relucir el pie de Josh Ford, y Japón no pudo dar una sorpresa con la que amenazaba. Mientras que Inglaterra se dejó el primer puesto del grupo D casi garantizado, los asiáticos apuntan a jugarse el otro billete a cuartos de final ante Samoa.