El Barça golpea primero y el Jaén asalta Son Moix
El equipo blaugrana domina al Inter Movistar y se queda a un paso de la final liguera, igual que un Jaén que asesta al Palma su primera derrota del año en su pabellón.
Alcanzado el momento serio de la temporada, el FC Barcelona demostró este sábado tener el ‘modo dominador’ activado. Atrás quedan los momentos de zozobra que atravesó el club blaugrana al final de la temporada regular, y ahora los de Jesús Velasco vuelven a mostrarse como un bloque sólido y serio. Hoy, el Barça se hizo con el primer punto de la semifinal de Liga al batir por 2-0 a un Inter Movistar impetuoso pero desacertado.
Fue una victoria dulce para el combinado azulgrana, con sabor a revancha. El equipo de Torrejón de Ardoz asestó un duro correctivo al Barça hace tan solo 14 días, apeando a los culés de la primera plaza de la clasificación en la última jornada de campaña regular. Mucho han cambiado las cosas en estas dos semanas, y ayer se evidenció. El equipo dirigido por Jesús Velasco salió a por todas en el duelo que enfrentaba a los dos últimos campeones ligueros, y pronto se encontró con ventaja en el luminoso. En el minuto 6, Éric Martel introdujo en su propia portería un córner lanzado con veneno, y este tanto le dio alas a un Barça que no aflojó. Enseguida pudo llegar el segundo, pero Adolfo se topó con la madera.
Hubo que esperar hasta el primer minuto de la segunda parte para que Pito anotase tras un magnífico control con el pecho. Poco sufrieron los locales, que se quedan a un paso de la tercera final liguera consecutiva. El miércoles, en Torrejón (20:30), tendrán su primera oportunidad para ello.
En la otra semifinal, el Jaén robó el factor cancha al batir al Palma por 2-5 en la que fue la primera derrota de la temporada de los baleares en su feudo, Son Moix. Los jienenses se adelantaron en el minuto 2 con un gran disparo con la zurda de César Velasco, y su defensa fue inquebrantable desde entonces. El equipo de Daniel Rodríguez no necesitó la posesión ni tener el partido controlado, y es que un sensacional Espindola aguó todas las tentativas baleares. A la vuelta de vestuarios, tres goles en poco más de un minuto (dos más de Velasco para el hat-trick) sentenciaron el partido, y el miércoles el Jaén tendrá el primer match-ball para colarse en la primera final liguera de su historia.