BOXEO | AMB, OMB Y FIB DEL PESO PESADO
Dubois, sobre su combate con Usyk: “Me han robado la victoria”
Un golpe bajo en el quinto asalto fue lo más polémico del encuentro y Frank Warren, el promotor del británico, asegura que apelarán el resultado.
Un golpe bajo fue el protagonista del combate entre Oleksandr Usyk (21-0-0, 14 KO) y Daniel Dubois (19-2-0, 18 KO) el pasado sábado en el Tarczyński Arena de Wroclaw, Polonia, cerca de la frontera con Ucrania. El campeón retuvo sus cinturones AMB, OMB y FIB de los pesos pesados al imponerse por TKO en el noveno asalto. Dubois se quejó públicamente después del choque de que su golpe en el quinto asalto no fuese aceptado por el árbitro: “No creo que haya sido un golpe bajo. Creo que lo conecté legalmente. Me han robado la victoria”.
Uysk dominó casi todo el combate prácticamente sin problemas y acabó con Dubois por TKO en el noveno asalto. El británico hincó rodilla dos veces, y el árbitro no le dejó continuar. Pero en el quinto round, el ucraniano se fue al suelo. Una mano al cuerpo mandó a Usyk a la lona durante varios minutos. El árbitro dictaminó golpe bajo, por lo que le dejó recuperarse. Esa mano ha sido el gesto más polémico del encuentro y generó un importante debate: ¿era golpe bajo o legal? La respuesta cambia totalmente el resultado. Si es golpe antirreglamentario, Usyk se queda con sus coronas, pero si no lo es, Dubois se proclama campeón del mundo.
El árbitro lo vio claro y decidió: golpe bajo. Esta decisión no gustó nada al retador oficial, que se quejó después del encuentro. “No creo que haya sido un golpe bajo. Creo que lo conecté legalmente. Me han robado la victoria, ¿qué más puedo decir?”, se quejó el británico. Volvió a manifestar su inconformidad en una entrevista a la BBC: “Lancé la mano y sentí como impactó perfectamente, golpeándole en el estómago. Me desanimé, perdí el impulso después de eso... Este error tiene que ser corregido. Debería ser el campeón del mundo ahora mismo”, sentenció Dubois.
El promotor del británico, Frank Warren, aseguró que apelarán el resultado. “El golpe fue en el cinturón. Ojalá lo hubieran puesto en las pantallas gigantes para que todos lo vieran. Trabajó eso en el campamento de preparación, atacar al cuerpo, ya que detectó ahí una debilidad. El árbitro se equivocó”, le apoyó. Usyk defiende que el golpe fue bajo, pero compartió que, si el árbitro hubiese contado, se habría podido levantar. Confía en que habría salido de la situación a pesar del dolor que sentía.