Besos y caramelos de cocaína o sexo oral: las defensas más surrealistas por dopaje
El caso de Sinner, que sitúa el origen de su positivo en los masajes de su fisioterapeuta, se suma a muchos otros. Gasquet, Valieva, Simoni...
Jannik Sinner ha sacudido al deporte con la noticia de su doble positivo en Clostebol este martes. El italiano, número uno del ranking ATP, fue absuelto al demostrarse que no tiene responsabilidad en los dos resultados adversos, en los que se apreció una milmillonésima parte de la sustancia prohibida por gramo. Sinner alegó que, durante Indian Wells, su fisioterapeuta se estaba curando un corte en un dedo con un medicamento que contenía Clostebol, y que al aplicarle masajes se produjo la contaminación. La Agencia Internacional de Integridad en el Tenis y un tribunal independiente, compuesto por expertos en la materia, creyeron la teoría del tenista, que se libró de una sanción de cuatro años. Su defensa, llamativa, se suma a otras tantas, con ejemplos exitosos y otros que no llegaron a buen puerto.
Gasquet y un beso con cocaína
Durante el Masters 1.000 de Miami de 2009, Richard Gasquet, aún en activo a sus 37 años, dio positivo por cocaína. El tenista francés, sin embargo, se libró de la sanción, que hubiera sido de dos años. En su defensa, adujo que la sustancia había entrado en su cuerpo por haberse besado con una mujer, Pamela, de la que sólo dijo conocer su nombre y el hecho de que fuera consumidora habitual. Según sus explicaciones, que fueron aceptadas, todo se había producido la noche anterior al análisis, en una fiesta en un club de la ciudad estadounidense.
Otra vez cocaína... en unos caramelos
Como en el caso de Gasquet, Gilberto Simoni, doble ganador del Giro de Italia, también dio positivo por cocaína y consiguió librarse de la sanción. Su caso se produjo en 2002 y, pese a terminar saliéndose con la suya, supuso su retirada en la ronda italiana del mencionado año. En su defensa, aseguró que la sustancia procedía de unos caramelos originarios de Perú que su tía, Jacinta, le había dado para paliar el dolor de garganta.
Comida contaminada
El pasado abril, a través del documental Doping Top Secret: China Files, volvió a la actualidad el positivo por la sustancia prohibida trimetazidina de 23 nadadoras chinas. El caso tuvo lugar en 2021 y la AMA no impuso suspensiones provisionales ni investigó por su cuenta. Según el informe de la agencia china de antidopaje (CHINADA), los positivos se debieron a la comida que consumieron los deportistas en el Huayang Holiday Hotel de Shijiazhuang. El documento indica que se detectaron restos de la sustancia en botes de especias, el extractor y un desagüe.
La medicación del abuelo
Otro caso reciente y muy relacionado con el anterior. En 2022, durante los Juegos Olímpicos de Invierno, celebrados en Pekín, Kamila Valieva también dio positivo por trimetazidina. La defensa de la joven patinadora rusa (15 años), que se convirtió en la primera mujer capaz de realizar un salto cuádruple en unos Juegos, se basó en que la sustancia se encontraba en la medicación que utilizaba su abuelo. Este mismo año, se confirmó una sanción de cuatro años para la deportista.
Sexo oral
En 1996, Daniel Plaza, campeón de los 20 kilómetros marcha en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, dio positivo por nandrolona, un esteroide anabólico con propiedades similares a la testosterona. El español, que fue suspendido dos años, aseguró que la sustancia llegó a su cuerpo al haber practicado sexo oral a su esposa embarazada. Nueve años después, El Tribunal Supremo dio la razón al marchador por un defecto de forma.
Demasiado amor
Otra vez, el sexo como origen del mal. En 1998, el velocista Dennis Mitchell, con dos oros mundiales, dio positivo por testosterona. En su defensa, el estadounidense adujo que este exceso era debido a que bebía abundante cerveza y a que practicaba el amor con intensidad. La federación norteamericana le absolvió de toda culpabilidad. Luego, intervino la federación internacional para imponerle una sanción de dos años.
Un alargamiento de pene
Uno de los casos más surrealistas. En 2010, LaShawn Merritt, campeón olímpico y mundial de 400 metros, dio positivo por DHEA y pregnenolona, dos sustancias que, según su defensa, formaban parte de un producto, ExtenZe, cuya función era provocar un alargamiento de pene. “Ninguna pena que reciba por mi acción podrá eclipsar la vergüenza y humillación que siento”, expresó. Su sanción, inicialmente de 21 meses, fue reducida y pudo defender su título mundial en Daegu 2011.
Lluvia con EPO
Tras dar positivo por EPO en 2012, después de la maratón de Perpignan, Fatima Yvelain, corredora francesa que participó en Sídney 2000, aseguró que la sustancia había llegado a la muestra analizada a través de la lluvia. “Había llovido mucho durante toda la carrera. No tengo muy claro cómo, pero debió de arrastrar consigo algún tipo de sustancia dopante que llegó a mis zapatillas y a mis pantalones cortos. Al hacer el control antidoping, el agua contaminó la muestra de orina tomada tras la carrera”, intentó justificar.
Golosinas contaminadas
Issamade Asinga, récord mundial sub-20 en los 100 metros lisos (9,89 segundos) y llamado por muchos a ser el sucesor de Bolt, fue sancionado por dopaje en mayo de este año. El atleta surinamés, de 19 años, dio positivo por GW1516, sustancia también conocida como Cardarine e incluida en la lista de productos prohibidos de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), y estará apartado de las pistas cuatro años. Para defenderse, el deportista alegó haber consumido unas golosinas contaminadas. “Lamentablemente, en 2023, PepsiCo me dio un paquete de regalo de Gatorade que contenía Gatorade Recovery Gummies. Un laboratorio acreditado por la AMA identificó que los contendores del producto que me dieron estaban contaminados con GW1516″, expresó.