Arbidel se queda el 12º del mundo: “No puedo pedir más”
El nadador de Avilés volvió a nadar por debajo del anterior récord de España en las semifinales de los 200 mariposa, pero no le alcanzó para meterse en una cara final en los Mundiales de Fukuoka.
Después del récord estratosférico de las eliminatorias, donde Arbidel González dejó temblando la marca de los 200 mariposa que tenía anteriormente Carlos Peralta (1:54.99), lo que le valió para colarse segundo en las semifinales, el de Avilés no consiguió darle un mordisco más, lo que le hubiera valido para meterse en una apoteósica final ya que el tiempo de corte era 1:54.97. El nadador del CN Barcelona registró 1:55.61, por lo que de nuevo volvió a nadar por debajo de los 1:56.42 del malacitano Peralta. Arbidel da un salto a la mariposa española a sus 21 años.
“Estoy muy contento del tiempo de la mañana, por la tarde quizás estaba más cansado. Iba por la calle 4, los que tenía al lado iban más rápido y noté algo más de olas. Pero me encontré bien y disfruté. Por la mañana ya había logrado el objetivo, no puedo pedir más”, comentó después el nadador, tercer semifinalista en las tres jornadas que se llevan en Fukuoka junto a Mario Mollà (50 mariposa) y Hugo González (100 espalda). El relevo 4x100 libre masculino fue incluso finalista (octavo). “Es mi primer Mundial, obtuve un récord de España que rebajé dos veces, una semifinal...”, declaró”.
La prueba metió en la final con la segunda mejor marca (1:54.21) al francés Leon Marchand, que aspira a ocupar el trono del ausente Kristof Milak después de sumar ya el triunfo en los 400 estilos de la primera jornada en los que pulverizó el récord mundial de Michael Phelps. Su rival será el mismo que esos 400 estilos, el estadounidense Carson Foster, que logró la mejor marca con 1:53.85.
En el resto de semifinales, destacó la marca en los 50 braza con la que el nadador chino Haiyang Qin entró en la final. Sus 26.20 fueron el récord de Asia y el séptimo mejor tiempo de la historia, a solo 25 centésimas del récord mundial de Adam Peaty, la leyenda de la braza ausente por depresión en los Mundiales de Natación de Fukuoka. Qin ya ganó el 100 y advirtió que iría a por los récords de Peaty.
La final también igualada y morbosa será la de los 200 libre de este miércoles, en la que de nuevo se verán las caras Ariarne Titmus, la australiana campeona y plusmarquista de los 400 libre, y la joven canadiense Summer McIntosh, que finalizó cuarta en la prueba anterior y ahora quiere resarcirse. Ambas, nadando en 1:54, han pasado primera y segunda a la final separadas solo por tres centésimas (1:54.64).